Crisis de 1808: Reinado de Carlos IV, Guerra de Independencia y Constitución de 1812

La crisis de 1808: La Guerra de Independencia y los comienzos de la revolución liberal

La crisis del Antiguo Régimen coincide con el comienzo del reinado de Carlos IV y de su esposa María Luisa de Parma, el cual se extiende de 1788 a 1808. Carlos no heredó la capacidad política de su padre, pero se encontró con unas circunstancias complejas, como la Revolución Francesa. Los reyes deciden confiar toda la política en un valido, Manuel Godoy, joven hidalgo extremeño. Godoy, ante los acontecimientos de la Revolución Francesa, toma estas decisiones:

  1. España se une a una alianza de potencias europeas (Austria, Prusia) para declarar la guerra a Francia en castigo por haber ejecutado al rey Luis XVI. Los revolucionarios franceses ganan esa guerra, por lo que se abandona esa intervención.
  2. A partir de 1796, la Revolución Francesa se va moderando y todo el poder de los revolucionarios se concentra en Napoleón, que se convierte en emperador. Godoy se convierte en admirador de Napoleón y le ofrece una alianza con España para formar un bloque contra Gran Bretaña. Se firma el Tratado de San Ildefonso en 1796 y 1800, una alianza naval de España y Francia contra Gran Bretaña. El resultado de esta alianza es la Batalla de Trafalgar en 1805, donde Napoleón es derrotado. A pesar del fracaso, Godoy siguió en el poder y apoyando a Napoleón.

En 1807 se firma otro tratado, el Tratado de Fontainebleau, con Francia, que tiene tres cláusulas:

  1. España se suma al bloqueo continental contra Gran Bretaña.
  2. Se permitiría que tropas francesas entraran a España para asegurar ese bloqueo y conquistar Portugal.
  3. Portugal quedaría dividida en tres reinos a repartir.

A partir de octubre de 1807 se hace efectivo el tratado y tropas francesas entran a España como aliados, pero se comportan como tropas de ocupación. El 17 de marzo de 1808 se produce un motín, una revuelta en Aranjuez. Entran en el palacio y Carlos IV abdica por el descontento del pueblo, destituyendo a Godoy. Le cede el trono a su hijo Fernando VII el 19 de marzo, quien mantiene la política anterior de alianza con los franceses. Pero Napoleón no se fía de Fernando y le convoca a una reunión en Bayona. Junta a la familia y les presiona para que el trono caiga en manos de Napoleón. Fernando se lo devuelve a su padre, Carlos IV, quien se lo entrega a Napoleón. Napoleón entrega el trono español a su hermano José I.

El pueblo reacciona con una sublevación el 2 de mayo de 1808 en muchas ciudades contra los franceses por la independencia. Surge un movimiento de resistencia popular frente al extranjero. A partir de esta resistencia empieza la Guerra de Independencia (1808-1814). Tiene tres aspectos:

  • Es una guerra internacional.
  • Dentro de la sociedad española hay dos bandos: los que están a favor de Francia, afrancesados, del dominio de José I, y los patriotas.
  • Es también una revolución política porque, ante el vacío del poder, lo rellena un poder popular que se autoorganiza y se declara soberano. Desde mayo surgen Juntas Provinciales de Defensa que eligen una Junta Suprema Central que se reúne en Aranjuez, después en Sevilla y, por último, en Cádiz, única ciudad donde los franceses no pudieron entrar. Esta Junta Suprema convoca las Cortes que, el 19 de marzo de 1812, redactan la primera constitución española, La Pepa.

Esta revolución significa acabar con el Antiguo Régimen. Fases de la guerra:

1. Ocupación y levantamiento (1808)

Después del 2 de mayo, los franceses encuentran mucha dificultad en ocupar algunas ciudades españolas, como Gerona y Zaragoza. Cuando las tropas francesas intentan conquistar Andalucía, pierden en la Batalla de Bailén. Esta derrota provoca que José I abandone Madrid.

2. Predominio francés (1809-1812)

Napoleón en persona entra en España y repone a su hermano en Madrid. Con un ejército mejor, consigue ocupar todas las ciudades de la península excepto Lisboa y Cádiz. La resistencia española continúa en forma de guerrillas (fuerzas regulares, sin uniformar).

3. Ofensiva hispano-inglesa (1812-1814)

Napoleón saca tropas de España para utilizarlas en Europa. Los ingleses aprovechan para desembarcar en Portugal, se reorganiza el ejército español y van reconquistando las ciudades, obligando a José I a salir de España. Les derrotaron en la Batalla de Vitoria en 1813. Napoleón firma el Tratado de Valençay, devolviendo el trono a Fernando VII.

Las Cortes de Cádiz y la Constitución de 1812

La Junta Suprema de Defensa de Cádiz, reunida allí, convoca unas Cortes Constituyentes por provincias en forma de estamentos que envían diputados de cada provincia. La mayor parte de los diputados fueron personas de la burguesía (profesionales, abogados, médicos, profesores). Había un sector del clero y de la nobleza, pero no representaban a estos estamentos. La mayoría de los diputados eran de ideología liberal (soberanía nacional, separación de poderes, igualdad jurídica, libertades individuales). Se reúnen y esta asamblea, después de dos años de trabajo, produjo dos obras muy importantes: la Constitución de Cádiz y una abundante legislación social y económica.

Constitución de Cádiz

Aprobada el 19 de marzo de 1812 (La Pepa). El diputado más destacado, el redactor, fue Agustín Argüelles. Características:

  • Define la nación como la unión de todos los españoles (incluyendo América).
  • La soberanía es nacional y declara de forma precisa que la nación no es propiedad del rey.
  • El régimen político es una monarquía parlamentaria.
  • División de poderes: el legislativo corresponde a las Cortes con el rey. Si las Cortes proponen una ley, el rey puede aceptarla o negarla, vetarla y que no se aplique esa ley, pero solo durante dos años. Si en dos años las Cortes siguen queriendo esa ley, se aplica. El ejecutivo solo corresponde al rey y el judicial a unos tribunales independientes.
  • Sufragio: tienen derecho al voto todos los varones.
  • Libertades universales: derecho a la propiedad, libertad de imprenta, de educación.
  • Igualdad de ciudadanos ante la ley: desaparecen los fueros territoriales, los tribunales especiales y los privilegios de la nobleza y el clero.
  • Fiscalidad: todos los ciudadanos pagarán los mismos impuestos en proporción a su riqueza.
  • Establece la creación de la milicia militar.

Hicieron una gran labor legislativa con una gran cantidad de leyes:

  1. Quedó abolida la Inquisición.
  2. Libertad de trabajo y contratación, suprimiendo el control de los gremios sobre los oficios.
  3. Abolición del régimen señorial.
  4. Inicio de las desamortizaciones (medida económica).

Tanto la Constitución de Cádiz como la legislación apenas estuvieron vigentes tres años, entre 1820 y 1823.

Fernando VII: Absolutismo y Liberalismo. La emancipación de América española

Fernando VII reinó entre 1814 y 1833. Durante la Guerra de Independencia se le llamaba Fernando el Deseado porque los patriotas de Cádiz tenían mucha confianza en él. Fernando defraudó, pasando a llamarse el Felón. Se distinguen tres etapas en su reinado:

1. Sexenio Absolutista (1814-1820)

Fernando entra en España y se presenta ante él una comisión de diputados de Cádiz, presentándole la Constitución. Fernando la rechaza y declara nulo lo que las Cortes hicieron. Se apoya en españoles absolutistas que poco antes habían reclamado su rechazo a la Constitución en el Manifiesto de los Persas. Este manifiesto dice que el periodo de seis años entre 1808 y 1814 ha sido una revolución y anima al rey a olvidar y no tener en cuenta los resultados de esa revolución, volviendo al sistema anterior. Los liberales son perseguidos, muchos tienen que exiliarse, y entonces Fernando gobierna con un grupo de políticos absolutistas en un contexto muy difícil porque al mismo tiempo se están empezando a producir guerras de independencia en Hispanoamérica.

2. Trienio Liberal (1820-1823)

En 1820 se prepara un gran ejército para enviarlo a América a reprimir a los independentistas liberales, pero aparece un capitán, Rafael de Riego, que utiliza el ejército para dar un golpe de Estado. Se presenta ante el rey y le obligan a jurar y aceptar la Constitución de Cádiz. Los liberales llegan al poder, se forma un gobierno presidido por Argüelles que intenta aplicar de manera efectiva el programa de la Constitución. Esta aplicación tiene muchos problemas. Dentro de los liberales se dividen los moderados, que participaron en la redacción de la Constitución (Argüelles), y los radicales o exaltados, que quieren llevar la Constitución a lo más extremo, más izquierdista (Álvarez Mendizábal).

En 1823, en el Congreso de Verona, la Santa Alianza (Prusia, Austria, Rusia) decide exterminar a los liberales. Decide que un ejército de la Santa Alianza entre en España para acabar con el gobierno liberal, un ejército francés (Diez mil hijos de San Luis). En 1823 entra en España, consigue vencer a las milicias liberales y pone a Fernando VII como rey absoluto.

3. Década Ominosa (1823-1833)

En América triunfan todos los movimientos independentistas y en España se produce una violenta represión contra los liberales. Al mismo tiempo, el Estado intenta reorganizarse, pero muchos políticos se dan cuenta de que el absolutismo ya no sirve y es necesario introducir medidas liberales, constitucionales. Este problema se relaciona con el problema de sucesión. Fernando VII está mal de salud y no tiene sucesor. Su última esposa, María Cristina de Borbón, tiene a Isabel. Fernando abole la Ley Sálica y tiene otra hija, Luisa Fernanda. El hermano de Fernando, Carlos, también quiere el trono. Cuando muere Fernando en 1833, estallan las Guerras Carlistas entre Carlos e Isabel (bueno, su madre, María Cristina) y gana Isabel.

La emancipación de América

Durante el reinado de Fernando VII se produce la independencia de las colonias americanas. Causas:

  1. Los criollos (descendientes de españoles pero nacidos en América) vieron en la independencia una forma de mejorar su situación social y económica.
  2. Al desaparecer el poder central en 1808 en España, estos criollos se organizan en Juntas de Defensa que son independientes.
  3. Gran Bretaña apoya estos movimientos independentistas y los criollos toman como modelo a Estados Unidos.
  4. En América se difunden las ideas del nacionalismo y liberalismo.
  5. La debilidad del Estado español en ese momento hace posible el poder imponerse e independizarse.

Hay dos etapas en el proceso de emancipación:

1. Tentativas de emancipación (1806-1814)

La primera vez que se habla de independencia en América es en Venezuela y el defensor es Francisco de Miranda. En 1808 se forman Juntas de Defensa Antinapoleónicas en América que, al principio, aceptan la autoridad de la Junta Suprema y envían diputados a Cádiz. Pero a partir de 1810, muchas de estas juntas se declaran independientes. Determinadas personas, los libertadores, por ejemplo, Hidalgo en México, Miranda y Bolívar en Venezuela y Colombia, llamada Nueva Granada. Sin embargo, permanecen fieles a España Perú y las Antillas (La Española, Cuba y Puerto Rico). A partir de ahí, el virrey Morillo consiguió restablecer el orden hacia 1815.

2. La independencia (1816-1825)

Los territorios se van independizando porque los libertadores consiguen derrotar a los realistas (partidarios del dominio español) y a las tropas enviadas desde la península. Simón Bolívar, gran libertador de América, realiza una campaña en la que derrota sucesivamente a las tropas realistas en las batallas de Boyacá, Carabobo, Pichincha y Ayacucho (1824). Estas batallas suponen la creación de una república que se llamó Gran Colombia, formada por las actuales Colombia, Ecuador y Venezuela. Antes de la muerte de Bolívar, que fue el primer presidente, esa república se dividió en tres. Por la batalla de Ayacucho se consiguió la independencia de Perú y Bolivia. En el sur de América, los libertadores fueron San Martín y O’Higgins, que convirtieron el virreinato del Río de la Plata en cuatro repúblicas (Uruguay, Paraguay, Argentina y Chile). En México, la independencia la declaró un criollo llamado Agustín de Iturbide, que se hizo proclamar emperador, y que en 1824 fue derrocado por una república federal. Después de estos procesos de independencia, solo quedó bajo dominio español Cuba, Puerto Rico y las islas Filipinas en Asia.