+EL TEATRO:–
El teatro del XVI supone un proceso de transformación hacia la comedia nueva. Durante este siglo van apareciendo comedías en 3 actos con influjo italiano. El creciente éxito público, que hace que el espacio escénico pase de plazas y calles a un lugar cerrado, el corral de comedias. El corral de comedias eran patios de vecinos acondicionados para este fin. La actividad teatral crecíó tanto que se hacían representaciones de forma diaria. En el corral de comedias se manténía la distinción entre clases sociales que acudían a ver el espectáculo. Además hombres y mujeres no compartían ningún espacio, incluso accedían al recinto por puertas distintas. Las ventanas funcionaban como palcos; las del último piso se llamaban desvanes y las inferiores aposentos; estos eran ocupados por los hombres y mujeres de la nobleza. Bajo los aposentos estaban las gradas, en semicírculo, cubiertas de la lluvia por un cobertizo. Delante había un patio descubierto, donde se situaba el pueblo, contemplando la obra, normalmente, de pie. Después se colocaron unas filas de bancos en este espacio, las lunetas, que hasta se podían proteger con una lona si hacia mal tiempo. Para separar al fondo a las mujeres del pueblo se habilitó un espacio denominado cazuela. Este público era muy ruidoso y crítico con las representaciones y si la obra no cumplía con sus expectativas, los espectadores, especialmente los mosqueteros, y también las mujeres dictaminaban con su actitud, silbaban y arrojaban basura. Por eso se colocó una autoridad. La construcción de estos edificios, permitíó la creación de un escenario que presentaba tres alturas. En la parte superior se situaba un balcón y en el tablado el foso del que salían o entraban los actores a través de unas trampillas.
El teatro del XVI supone un proceso de transformación hacia la comedia nueva. Durante este siglo van apareciendo comedías en 3 actos con influjo italiano. El creciente éxito público, que hace que el espacio escénico pase de plazas y calles a un lugar cerrado, el corral de comedias. El corral de comedias eran patios de vecinos acondicionados para este fin. La actividad teatral crecíó tanto que se hacían representaciones de forma diaria. En el corral de comedias se manténía la distinción entre clases sociales que acudían a ver el espectáculo. Además hombres y mujeres no compartían ningún espacio, incluso accedían al recinto por puertas distintas. Las ventanas funcionaban como palcos; las del último piso se llamaban desvanes y las inferiores aposentos; estos eran ocupados por los hombres y mujeres de la nobleza. Bajo los aposentos estaban las gradas, en semicírculo, cubiertas de la lluvia por un cobertizo. Delante había un patio descubierto, donde se situaba el pueblo, contemplando la obra, normalmente, de pie. Después se colocaron unas filas de bancos en este espacio, las lunetas, que hasta se podían proteger con una lona si hacia mal tiempo. Para separar al fondo a las mujeres del pueblo se habilitó un espacio denominado cazuela. Este público era muy ruidoso y crítico con las representaciones y si la obra no cumplía con sus expectativas, los espectadores, especialmente los mosqueteros, y también las mujeres dictaminaban con su actitud, silbaban y arrojaban basura. Por eso se colocó una autoridad. La construcción de estos edificios, permitíó la creación de un escenario que presentaba tres alturas. En la parte superior se situaba un balcón y en el tablado el foso del que salían o entraban los actores a través de unas trampillas.