Boom de la novela hispanoamericana: Realismo mágico y nuevas narrativas

Novela Hispanoamericana de la segunda mitad del siglo XX

Contexto histórico y literario

En la primera mitad del siglo XX predominan dos tendencias en la narrativa hispanoamericana:

  • El relato breve de tema fantástico, de raíz modernista.
  • La novela realista sobre diversos temas: la revolución mejicana, la opresión de los indios y el conflicto entre civilización y barbarie.

La década de 1940 experimenta un crecimiento urbano en Hispanoamérica. La vida cultural se enriquece con la llegada de numerosos intelectuales españoles y europeos exiliados. Comienza entonces la superación del realismo narrativo. La novela hispanoamericana incorpora el tema urbano, nuevas técnicas estructurales y una creación propia: el realismo mágico.

El Realismo Mágico

El realismo mágico consiste en una representación compleja del mundo que admite al mismo nivel lo racional, lo onírico y lo fantástico. Se plantea como la única posibilidad de tratar la realidad hispanoamericana, muy distinta a la europea por la pervivencia de lo mágico o maravilloso y por la fuerza telúrica de la naturaleza.

Autores representativos de la primera etapa del realismo mágico:

  • Alejo Carpentier (El siglo de las luces): Barroquismo de estilo, ambientada en el siglo XVIII.
  • Miguel Ángel Asturias (El señor presidente): Figura de un dictador en un ambiente de pesadilla con un estilo surrealista.
  • Augusto Roa Bastos (Yo el supremo): Novela dedicada a la figura de un dictador.
  • Jorge Luis Borges: Relatos como juegos de ingenio, con temas recurrentes: el mundo como laberinto indescifrable, la vida como un sueño, el carácter circular del tiempo.
  • Juan Rulfo (Pedro Páramo, El llano en llamas): Juegos espacio-temporales constantes.
  • Ernesto Sábato (El túnel, Sobre héroes y tumbas): Personajes alucinados y angustiados en un mundo de pesadilla, absurdo e incomprensible.

El Boom de la Novela Hispanoamericana (A partir de los años 60)

El boom de la novela hispanoamericana se caracteriza por:

  • Ruptura del tiempo y del espacio, desintegrando la estructura narrativa.
  • Combinación de distintas personas narrativas, con cambios de perspectiva.
  • Diversidad y mezcla de estilos: directo libre, indirecto libre, monólogo interior.
  • Mezcla de lo real, lo mítico y lo fantástico.
  • La novela como un rompecabezas que requiere la participación del lector para cobrar sentido.

Autores clave del Boom:

  • Mario Vargas Llosa (La ciudad y los perros): Denuncia del machismo y la violencia en un colegio militar limeño, crítica a la sociedad peruana.
  • Julio Cortázar (Rayuela): Relatos de efecto inquietante, juegos de ingenio e imaginación. Rayuela permite la lectura en distinto orden, reflejando lo absurdo y caótico de la realidad.
  • Gabriel García Márquez (Cien años de soledad): Novela ambientada en Macondo, un mundo creado a partir de recuerdos de su infancia y la historia de Colombia, que simboliza la realidad del continente y del ser humano. Obra maestra del realismo mágico que narra la historia de una familia a lo largo de siete generaciones.

Otros autores importantes del boom y posteriores: Fuentes, Onetti, Lezama Lima, Benedetti…

Conclusión

La narrativa hispanoamericana de la segunda mitad del siglo XX refleja la compleja situación del subcontinente: una naturaleza espectacular, salvaje y grandiosa; estados débiles, sometidos a la colonización económica extranjera, que oscilan entre la dictadura y la revolución; sociedades inestables, con enormes desigualdades entre la rica oligarquía y las masas pobres; y el mestizaje racial y cultural.