Tipos de Edificios Urbanos en la Antigua Roma
La Arquitectura Doméstica
- Domus de los patricios:
- Construcción con disposición de apertura hacia el patio central (atrium).
- Las habitaciones que daban a la calle (tabernas) se alquilaban para negocios.
- El pasillo de entrada desde la calle entre las dos tabernas terminaba en un patio central (atrio) que distribuía el acceso a las habitaciones que le rodeaban (tablinium-despacho, triclinium-comedor, dormitorios, cocina, etc.).
- En las habitaciones, las paredes se solían decorar con frescos y los suelos se recubrían con distintos tipos de mosaicos.
- En el centro del patio había un estanque (impluvium) que recogía las aguas de lluvia del techo que vertían hacia él (compluvium).
- Tras la conquista de Grecia y por copia de ellos, se puso de moda construir un patio trasero porticado con columnas (peristilo) con jardines y acceso a otras dependencias como letrinas y termas familiares.
- Villae campestre: Parecidas a las domus.
- Insulae de la plebe: Edificios de 4 o 5 pisos, construidos en madera.
La Basílica
- Edificio que se situaba en el Foro destinado para tribunal de justicia.
- Tenía una planta rectangular con tres naves separadas por columnas, y, como novedad, un ábside en el lado contrario al acceso.
- Fue una tipología usada posteriormente por los cristianos para sus templos.
El Templo
- Es el edificio dedicado al culto de los dioses.
- Presenta la misma estructura que un templo griego, pero con algunas variaciones: El templo romano, dedicado al culto, imitaba el modelo griego, pero se elevaba sobre un podio y presentaba columnas adosadas.
- Ejemplos destacados son La Maison Carrée en Nimes y el Panteón de Agripa en Roma, notable por su cúpula de hormigón sin columnas interiores, con un óculo central que ilumina el espacio interior.
Teatros y Anfiteatros
En el teatro griego, las gradas aprovechan la pendiente de una colina y rodean la orchestra, el espacio central para las representaciones. Los teatros romanos innovan al construir edificios exentos con una cávea semicircular y una scena rectangular frente a la orchestra, como el Teatro Marcelo en Roma.
En los anfiteatros, destinados a espectáculos violentos, se estructura un espacio oval llamado arena, rodeado de gradas, con fosos bajo el suelo para fieras y acceso para gladiadores. El Coliseo es el anfiteatro más grande, con capacidad para 50,000 personas y decorado con órdenes arquitectónicos variados en su fachada. En Italia se conservan casi íntegros varios anfiteatros como los de Verona y Pompeya. En España destacan 12 anfiteatros, siendo el de Itálica (Sevilla) (Siglo II d.C.) el que tiene mayor capacidad. En Francia, los de Nimes y Arles se siguen usando como recinto de espectáculos y plaza de toros.
Circos y Termas o Balneum
Los circos romanos, como el Circo Máximo en Roma, eran estadios alargados para carreras de cuádrigas, con un muro central (spina) decorado que separaba las pistas. Alcanzaron gran popularidad en todo el imperio. Medía más de 600 metros de largo.
Las termas, o baños públicos, eran complejos con piscinas de distintas temperaturas (frigidarium, tepidarium, caldarium) y espacios para actividades sociales. Las Termas de Caracalla en Roma son un ejemplo destacado.
Construcciones Conmemorativas y Funerarias
Los Arcos de Triunfo
Los arcos de triunfo eran monumentos conmemorativos en honor a emperadores victoriosos, consistentes en pilastras robustas y un arco central decorado con relieves de sus victorias. Evolucionaron a arcos simples, triples y de cuatro vanos. Ejemplos famosos incluyen los arcos de Tito, Septimio Severo y Constantino en Roma, y en España, el Arco de Bará en Tarragona.
Columnas Conmemorativas y Altares Honoríficos
Las columnas conmemorativas, como la de Trajano y la de Marco Aurelio, homenajeaban a emperadores victoriosos con altos relieves helicoidales. Los altares honoríficos, como el Ara Pacis, eran pequeños edificios abiertos que agradecían la victoria a los dioses.
Las construcciones funerarias incluían mausoleos con criptas y salas, y columbarios con nichos para urnas funerarias.
Las Obras Públicas y de Ingeniería Romanas
Las murallas romanas defendían ciudades con gruesos muros y almenas, y sus calzadas conectaban el imperio con bases resistentes y losas de piedra. Construyeron puentes sólidos, como el Puente de Alcántara, para atravesar ríos, y acueductos como el de Segovia, con arcadas que llevaban agua desde embalses a las ciudades. También desarrollaron puertos y faros, como la Torre de Hércules, para facilitar la navegación y el comercio en zonas costeras.