¿Qué son las Arcillas?
La arcilla es un producto natural comúnmente utilizado en spas y balnearios con terreno arcilloso. Es un mineral proveniente de la meteorización de las rocas. Las arcillas son silicatos hidratados, denominados así porque su unidad estructural es el ion silicio Si(O4)-2. Su estructura es tetraédrica, con un oxígeno en cada vértice y el ion silicio en el centro. El silicio tiene una valencia de +4 (electrones de la última capa) y cada oxígeno tiene una valencia de –2, por lo que hay un exceso de -4.
Para alcanzar una estructura estable, cada tetraedro se une con otro por las bases mediante un enlace covalente en el que intervienen 3 de cada 4 oxígenos. Esta estructura tetraedro-tetraedro se repite, dejando libres los oxígenos con carga -2, que tienden a enlazarse con los cationes.
Los cationes presentes en esta estructura son, entre otros, aluminio, zinc, hierro, silicio y manganeso.
Estas repeticiones forman láminas con estructura tetraedro-tetraedro unidas horizontalmente. Esta secuencia laminar justifica la propiedad absorbente de las arcillas, y por esta estructura laminar se denominan filosilicatos o silicatos laminados.
El tamaño de la partícula es de 2 micrómetros, lo que explica su capacidad para formar dispersiones coloidales al mezclarse con agua.
Los oxígenos libres pueden unirse al agua, y se distinguen los siguientes tipos de agua:
- Agua de adsorción: queda fijada en la superficie de las láminas.
- Agua de absorción: agua interlaminar, que se mueve o desplaza entre las láminas.
- Agua estructural: penetra dentro de la estructura tetraedro-tetraedro.
Propiedades de las Arcillas
- Absorción del agua: las arcillas tienen una gran capacidad de absorción debido al pequeño tamaño de sus partículas y a la gran superficie de contacto. Esta absorción en el espacio interlaminar provoca la separación de las láminas y el hinchamiento del material, generando un desplazamiento entre las láminas que produce una gran plasticidad (capacidad de un producto para adaptarse a la zona donde se aplica, es decir, de deformarse y permanecer ajustado a la zona).
- Intercambio iónico: en la superficie de los tetraedros que forman las láminas se sitúan iones, generalmente cationes, que quedan retenidos y se intercambian con otros procedentes del medio externo con el que están en contacto.
- Térmica: las arcillas poseen una alta capacidad calorífica, que se incrementa al mezclarse con agua. Transmiten el calor paulatinamente, de ahí su propiedad de conductividad térmica, especialmente al mezclarse con agua, y su uso como agente termoterápico (temperatura indiferente = 40°C; a esta temperatura se percibe como indiferente, no quema). Una cierta cantidad de arcilla mezclada con agua hasta formar una pasta maleable almacena mucho calor y tarda en transmitirlo.
- Plasticidad: las arcillas se deforman sin romperse al aplicar presión y mantienen la deformación al cesar la presión. Esto ocurre cuando se mezclan con agua. La cantidad de agua necesaria para que la arcilla alcance una gran plasticidad se denomina agua de plasticidad. El agua envuelve las partículas laminares, produciendo un deslizamiento entre ellas y ejerciendo un efecto lubricante, de ahí su capacidad para deformarse y moldearse.
Aplicaciones de las Arcillas
- Emplastos: mezcla de agua y arcilla en un recipiente no metálico para evitar el intercambio de iones. Pueden ser:
- Totales: se recubre el cuerpo con arcilla durante 20 minutos a 40°C sobre la piel y se cubre con otra tela impregnada de arcilla.
- Parciales: se aplica sobre la piel o una tela, evitando las zonas sensibles, y se cubre con otra tela. Temperatura: 38-39°C.
- Baños: se diluye polvo de arcilla en una bañera a 40°C durante 20 minutos.
- Cosméticos: las arcillas actúan como emulgentes y gelificantes.
- Peloides: los peloides contienen arcilla, pero también se pueden mezclar con arcilla antes de su aplicación.
Efectos e Indicaciones de las Arcillas
- Absorbentes de toxinas y productos de desecho. Tienen efectos purificantes.
- Limpieza cutánea por su efecto absorbente, eliminando células muertas, desechos cutáneos, etc.
- Efecto remineralizante de la piel gracias a la propiedad del intercambio iónico.
- Tratamiento del acné: actúan sobre la piel grasa por su efecto astringente, al que se añaden efectos antisépticos y antiinflamatorios.
- Tratamiento anticelulítico: por su alto contenido en cationes, absorben los edemas, actúan como antiinflamatorios y activan la circulación venosa y linfática, potenciando el efecto drenante.
- Tratamiento antienvejecimiento: inducen la reestructuración de la dermis, favoreciendo la producción de colágeno y elastina. Esto es posible gracias al aporte de selenio, silicio, zinc y manganeso, que poseen propiedades antioxidantes. El selenio y el manganeso favorecen la producción de ácido hialurónico y aclaran las manchas cutáneas.
Tipos de Arcillas
- Caolinita: arcilla blanca común, que en los cosméticos aparece como caolín.
- Esmectitas: arcilla verde, utilizada por su propiedad emulgente, que aporta viscosidad.