Constitución de 1869
La gloriosa Constitución de 1869. El Pacto de Ostende, en el que se unieron contra el gobierno y la monarquía para establecer un nuevo sistema político, dicho pacto desencadena en la Gloriosa Revolución del 68 iniciada por Topete en Cádiz, apoyado por Serrano y Prim, su movimiento que se extendería rápidamente por toda España mediante levantamientos populares y la organización de juntas locales hasta que con el triunfo de la Gloriosa se formaría un gobierno provisional presidido por Serrano en el cual se construirían una junta superior y se formarían cortes constituyentes. Dichas cortes promulgarían la primera constitución democrática de España, la Constitución de 1869 donde destacan la soberanía nacional, el sufragio nacional y el establecimiento de la monarquía, como sistema de gobierno, limitando los poderes del rey. Documento jurídico político. Es un fragmento 1 de julio de 1869. El primer párrafo cuenta la introducción, los 3 primeros apartados derechos de los españoles en el 21 estado confesional y el 26 derecho. Últimos soberanía nacional y separación de poderes.
Ley Moyano de Educación
Nos encontramos ante un fragmento de la Ley Moyano de Educación, datada en el 1857. Es un texto jurídico, político de carácter legislativo. Fuente primaria porque su autor fue el ministro Claudio Moyano que rigió el sistema educativo en las tres etapas que conocemos hoy en día: primaria, secundaria y superior. Este texto va dirigido a la nación española. Podemos contextualizar este texto en el momento en el que O’Donnell comienza a gobernar desmantelando la obra progresista pero manteniendo las leyes de imprenta, ayuntamientos y desamortización. Lo que provoca que la reina lo destruya nombrando a Narváez. Este hasta su dimisión en 1856, volverá al moderatismo pero, al fraude electoral y derogará las modificaciones que se habían introducido en la Constitución de 1845. No obstante nuestro actual sistema educativo arranca de la transformación de la Ley Moyano de Educación.
Liquidación del Imperio Colonial: Cuba y Filipinas, el Desastre del 98 y sus Repercusiones
Durante la época de la Restauración, España contaba únicamente como colonias las islas de Cuba, Puerto Rico y Filipinas consideradas los últimos restos del gran imperio español formado durante la época de los Habsburgo. La mayoría de estas colonias de dicho imperio habían alcanzado su independencia durante el desastroso reinado de Fernando VII convirtiéndose en repúblicas independientes gobernadas por las minorías criollas, quedando tan solo estas. Iniciaron sus movimientos independentistas a finales del siglo XIX. Estos movimientos comenzaron tras el primer intento insurreccional en Cuba que la firma de la Paz de Zanjón no había logrado disipar. Este sentimiento nacionalista se vio acrecentado con el descuido desde la administración central en España, que se mostraba indiferente ante las distintas peticiones de los cubanos de tener un representante en las Cortes, participar en el gobierno de la isla, la libertad de comercio y la abolición de la esclavitud, peticiones que fueron denegadas por el gobierno español y tan solo durante el gobierno de Sagasta se consiguió concretar la abolición formal de la esclavitud de 1888. Esta falta de reformas estimuló los deseos de emancipación de la isla, fundándose en 1893 de mano de José Martí el Partido Revolucionario Cubano, cuyo objetivo era la independencia cubana total. Esta idea logró un importante apoyo exterior, especialmente en EEUU ante lo que la guerra volvió a estallar mediante un levantamiento general denominado el Grito de Baire. El momentáneo presidente del gobierno español, Cánovas, envió un ejército al mando del general Martínez que trató de reprimir la rebelión y ante su ineficacia fue sustituido por el general Weyler, quien se mostró inflexible con los rebeldes aplicando la pena de muerte tanto a militares como civiles. Tras el asesinato de Cánovas, Sagasta asumió la presidencia del gobierno, e introdujo rápidamente algunas reformas buscando la reconciliación con los isleños, reformas que llegaron tarde y no fueron aceptadas por los independentistas, quienes se negaron a aceptar el fin de la guerra. Fue entonces cuando EEUU decidió intervenir directamente enviando el acorazado Maine, que estallaría poco después siendo culpada directamente España, estallando así una guerra internacional en la que España era consciente de su inferioridad militar. Al considerar humillante la retirada, decidió participar siendo la flota española derrotada rápidamente y comenzando así la ocupación estadounidense de la isla. Paralelamente a este conflicto se produjo la rebelión de las islas Filipinas, en las que los intereses económicos españoles eran muchos menores que en Cuba, pero aun así existía una notable producción del tabaco que servía como enlace para el comercio con Asia. Esta rebelión filipina comenzó con la fundación de la Liga Filipina, y con el apoyo de Norteamérica, quienes también estuvieron presentes como libertadores, derrotando también a la escuadra hispana, y obligando a España a firmar el Tratado de París en 1898 por el cual España perdía Cuba, Puerto Rico y las islas Filipinas.
Constitución de 1837
Comentario: se trata de un fragmento de la Constitución de 1837. Texto jurídico y político, de fuente primaria puesto que está redactado por las Cortes y firmado por el rey. El autor se trata de un colectivo: las Cortes, las cuales son un órgano constitucional español. Esta constitución fue promulgada para la nación española durante la regencia de María Cristina de Borbón. Fue iniciativa del Partido Progresista para aprobar un consenso entre los dos partidos principales que permitían la alternancia de los dos partidos liberales sin que se vieran obligados a cambios en la constitución en cada cambio de gobierno, lo cual permite una estabilidad política, optándose por soberanía nacional, separación de poderes, reconocimiento de derechos individuales y convocatoria de Cortes por el monarca. A raíz de la creación de esta constitución se promulgan algunas leyes progresistas, se adoptaron medidas con el mercado de la tierra y sobre todo se aprobó la desamortización de Mendizábal por la que se pusieron en venta las tierras expropiadas a la Iglesia. Esta constitución nacida el 18 de junio de 1837 terminó el año 1845, momento en el que se crea otra constitución. Este fragmento se presenta en tres títulos: de los españoles, de las Cortes y del rey, que a su vez explica unos artículos en donde podemos apreciar algunas ideas básicas de la constitución, como por ejemplo el artículo 2 se refiere a la libertad de imprenta, el artículo 11 se refiere a la obligación de practicar la religión católica como única religión de la nación o el artículo 13 donde se explica que las Cortes son bicamerales y que están divididas en Congreso y Senado.
Medios de Transporte
Carreteras y Caminos
Las primeras obras de reforma de trazado de carreteras comenzaron en 1840, lo que permitió mejorar la red viaria, aunque no de forma suficiente. Si en 1840 había 9000 km de carreteras, hacia 1865 había 16000 y al final 36000 aunque solo 16000 eran de primer o segundo orden. La mayoría parte de la red era deficiente. Se fue sustituyendo el medio de transporte tradicional y se redujo notablemente la duración de los viajes. El transporte marítimo también mejoró durante el siglo XIX mediante tres cambios: la mejora y ampliación de los puertos, el perfeccionamiento de la navegación.
Transporte Marítimo
- Mejora y ampliación de los puertos
- Perfeccionamiento de la navegación