Adaptación en el Entrenamiento Deportivo
La adaptación se refiere a las modificaciones de los órganos y sistemas del deportista, provocadas por el tipo específico de ejercicio físico practicado. El objetivo es adecuar las capacidades funcionales del organismo a las cargas y al tipo de trabajo realizado en el entrenamiento.
Ley de la Intensidad Óptima del Estímulo (Ley del Umbral)
Existe un umbral de intensidad mínimo, por debajo del cual el estímulo no produce respuesta adaptativa; es decir, no entrena, al no excitar adecuadamente las funciones del organismo. Este umbral depende fundamentalmente del nivel de rendimiento del deportista.
Síndrome General de Adaptación (SGA)
El Síndrome General de Adaptación (SGA) describe las fases de respuesta del organismo ante el estrés del entrenamiento:
- Fase de Alarma: Conjunto de cambios agudos a nivel cardiovascular, respiratorio y metabólico que permiten responder ante el estímulo agresor. El organismo reacciona de forma espontánea tratando de adaptarse a la nueva situación provocada por el estrés.
- Fase de Resistencia: Si la acción de los estímulos persiste o se repite en el tiempo, el organismo lucha por volver a su equilibrio original, superándolo, adaptándose y adquiriendo un estado de resistencia. Esta fase significa la recuperación de la fase de alarma y existe una respuesta eficaz. El organismo supera los estímulos estresantes y el individuo ve aumentadas sus reservas por encima del nivel inicial, siendo capaz de contrarrestar el estrés de forma rápida.
- Fase de Adaptación: Si el estímulo deja de aplicarse (no se va a entrenar), el organismo recupera el nivel de adaptación original. Si continúa aplicándose ese estímulo, se convertirá en estable lo que, de otra manera (estímulo que deja de aplicarse), sería pasajero.
La Supercompensación
La supercompensación es la respuesta específica del organismo a unos determinados estímulos, acumulando niveles superiores a los iniciales.
Principios del Entrenamiento Deportivo
Los siguientes principios son fundamentales para un entrenamiento efectivo y la optimización del rendimiento:
Principio de Unidad Funcional
El organismo funciona como un todo indisoluble; cada uno de sus órganos y sistemas están interrelacionados entre sí, hasta el punto que un fallo en cualquiera de ellos hace imposible continuar la práctica deportiva.
Principio de la Multilateralidad
En los primeros años del entrenamiento y en los inicios de una temporada debe predominar el trabajo general y polifacético, dejando paso posteriormente al entrenamiento especializado en una disciplina.
Principio de la Especialización
Se debe comenzar realizando un entrenamiento general y multilateral, que posteriormente dejará paso al entrenamiento específico en una disciplina concreta, porque la mejora del rendimiento es más elevada cuando se utilizan ejercicios específicos de la actividad elegida. Los ejercicios específicos provocan adaptaciones funcionales y morfológicas específicas al tipo de actividades a las que se expone al organismo.
Principio de la Sobrecarga
Es necesario que el estímulo de entrenamiento (la carga) sea de una duración e intensidad suficientes para que sobrepase el umbral de entrenamiento y se produzcan adaptaciones orgánicas y mejoras en el rendimiento.
Principio de la Continuidad
Estímulos de entrenamiento muy separados en el tiempo no entrenan. Los estímulos de entrenamiento deben repetirse de forma continuada para lograr mejoras en el rendimiento. Estímulos muy cercanos en el tiempo sobreentrenan.
Principio de la Progresión
Sólo la elevación gradual y progresiva de las cargas logra mejorar la capacidad de rendimiento físico del deportista.
Principio de la Recuperación
Los periodos de recuperación son esenciales tanto en el transcurso de una sesión de entrenamiento (recuperaciones entre series y bloques de ejercicios) y durante toda la planificación (ya lo sabíamos por el Síndrome General de Adaptación y la Ley de la Supercompensación).
Principio de Individualización
El entrenamiento debe ser individualizado; es decir, adaptado a las características propias y específicas de cada individuo, dado que cada sujeto es diferente a los demás y no existen dos sujetos exactamente iguales.
Principio de la Variedad
Los estímulos aplicados en los programas de entrenamiento deben ser variados para evitar la monotonía y la adaptación estándar, permitiendo así mejorar los resultados.
Principio de la Participación Activa y Consciente en el Entrenamiento
Si la persona conoce las razones por las que el entrenador le entrena de cierta manera, si sabe lo que hace y el por qué lo hace, eso repercutirá positivamente en la motivación e implicación del deportista en la tarea a desarrollar.