Demografía y Economía en España: Estructura, Evolución y Retos Actuales

Estructura, Evolución y Problemática de la Población en España

La población es uno de los recursos más valiosos de un país. Su estudio, a través de la geografía de la población y la demografía, permite conocer las características y necesidades futuras de la sociedad. En España, la estructura de la población presenta un claro envejecimiento debido a la baja natalidad y la alta esperanza de vida.

Estructura por Sexo y Edad

Sexo

Actualmente, España tiene una sex ratio de 96 hombres por cada 100 mujeres. Este desequilibrio se debe a la superioridad numérica masculina al nacer y la emigración masculina, mientras que las mujeres viven más tiempo, especialmente en la edad avanzada.

Edad

La población se divide en jóvenes (0-15 años), adultos (16-64) y mayores (más de 65 años). Los jóvenes constituyen solo el 16% de la población, mientras que los ancianos superan el 18%. Este envejecimiento se debe a la baja natalidad desde 1975 y el aumento de la esperanza de vida, con importantes diferencias regionales.

Evolución Demográfica desde 1960

En las décadas de 1960 y 1970, España experimentó un “baby boom” debido a la mejora económica, lo que llevó a un rápido crecimiento de la población. Sin embargo, a partir de los 80, la natalidad comenzó a disminuir debido a factores como la crisis económica, cambios políticos y sociales, y la incorporación de la mujer al trabajo. A pesar de una ligera recuperación de la natalidad en el siglo XXI gracias a la inmigración, la crisis económica de 2007 detuvo este repunte.

Problemática Actual y Retos

España enfrenta serios desafíos debido al envejecimiento de su población, lo que afecta la economía y aumenta los gastos en pensiones, sanidad y cuidados a los mayores. La población disminuirá en el futuro y continuará el envejecimiento, lo que generará un aumento de la tasa de dependencia y una desaceleración económica. Para abordar estos problemas, serán necesarias medidas políticas y sociales para asegurar la viabilidad del Estado de bienestar en los próximos años.

Actividad Económica y Población en España

El estudio de la población es fundamental para prever las necesidades sociales y económicas de un país. En España, se ha analizado la estructura de la población a través de diversos indicadores demográficos para comprender su evolución y los efectos futuros que podrían generar en la actividad económica.

Población Activa y su Evolución

La población activa se define como la población entre 16 y 64 años que participa en el mercado laboral, diferenciándose entre los ocupados (con empleo) y los desocupados (en busca de empleo). La tasa de actividad ha experimentado varias fases:

  • En los años 60, disminuyó debido a la emigración masculina.
  • En los 70, continuó cayendo debido a la crisis económica y el retraso en la edad mínima para trabajar.
  • En los años 90, la tasa de actividad aumentó gracias a la incorporación de la mujer al trabajo y a una mayor prosperidad económica.
  • En el siglo XXI, la tasa aumentó aún más debido a la inmigración y la mayor participación femenina, alcanzando casi el 60% en 2008, una cifra similar a la actual.

Las tasas de actividad varían por sexo, edad y territorio, siendo más altas en áreas con un dinamismo económico elevado (Madrid, Levante) y más bajas en zonas afectadas por crisis industriales o envejecimiento (interior peninsular).

Tasa de Dependencia

Este indicador muestra la relación entre la población activa e inactiva. Actualmente, España tiene una tasa de dependencia de alrededor del 53%, lo que indica una creciente carga para la población activa, especialmente debido al aumento de la tasa de paro desde 2008.

Distribución por Sectores Económicos

Desde los años 50, ha habido una transformación significativa en la estructura económica de España:

  • El sector primario (agricultura y ganadería) ha disminuido, representando solo un 4% de la población activa.
  • El sector secundario (industria) experimentó un auge en los años 60 y 70, pero ha retrocedido debido a la reconversión industrial y la crisis de la construcción de 2007, quedando con menos del 20% de la población activa.
  • El sector terciario (servicios) ha crecido de manera constante, ocupando más del 75% de la población activa y convirtiendo a España en una economía terciarizada.

Retos Económicos y Demográficos

España enfrenta una población envejecida y baja natalidad, lo que genera retos sociales y económicos. El descenso de la tasa de actividad y el aumento de la tasa de dependencia incrementarán el gasto social y presionarán el sistema de bienestar. Para mantener el sistema de pensiones, se necesita aumentar la población activa, especialmente con inmigración. Además, el envejecimiento de la población transformará el mercado laboral, creando más demanda de productos y servicios para mayores. La creciente terciarización de la economía también puede generar desequilibrios si no se atienden adecuadamente los sectores primario y secundario.