Historia de España: Reinado de Isabel II, Dictadura de Primo de Rivera, Hispania Romana, Monarquía Visigoda y Al-Ándalus

Isabel II: El Reinado Efectivo, los Grupos Políticos y las Constituciones

Tras las regencias de María Cristina de Borbón y Espartero, marcadas por la inestabilidad política y la Primera Guerra Carlista, **Isabel II** comenzó su reinado con solo 13 años en 1843, casándose con su primo carnal Francisco de Asís de Borbón, en un matrimonio impuesto que resultó en relaciones conflictivas. Su reinado consolidó el sistema liberal en España, aunque con frecuentes crisis políticas y sociales.

El Predominio de los Moderados (1843-1854)

Con el inicio del reinado efectivo de **Isabel II**, los moderados se hacen con el control del gobierno, apoyados por la reina, por las clases dominantes y dirigidos por el General Narváez. Este periodo, conocido como la **Década Moderada**, se caracteriza por la promulgación de la **Constitución de 1845**. También se prioriza el mantenimiento del orden social a través de la creación de la **Guardia Civil** y la disolución de la **Milicia Nacional**. Además, se lleva a cabo una reforma fiscal que busca modernizar el sistema tributario y aumentar los ingresos del Estado. Y por último, se firma un acuerdo con la Santa Sede, el **Concordato de 1851** que restablece las relaciones entre el Estado español y la Iglesia Católica. A pesar de algunos logros, el gobierno moderado se caracteriza por su autoritarismo y la represión de las protestas sociales. A partir de 1854, el reinado de Isabel II experimenta una serie de cambios políticos que reflejan la creciente oposición al gobierno moderado y la búsqueda de alternativas.

El Bienio Progresista (1854-1856)

En 1854, el pronunciamiento del general O’Donnell derroca al gobierno moderado e inicia el **Bienio Progresista**. Durante este periodo, se intenta ampliar la participación política y se restablece la Milicia Nacional. Se elabora una nueva constitución, la **Constitución de 1856**, de carácter progresista, que no llega a entrar en vigor debido a la caída del gobierno. Se lleva a cabo la **Desamortización de Madoz**, que afecta a bienes del clero y de los municipios. Las dificultades de los progresistas durante este bienio fueron constantes y los gobernantes tuvieron enormes problemas para contener la inflación. Así, O’Donnell rompió su colaboración con Espartero provocando la caída de los progresistas y facilitando el regreso de los moderados al poder cuando el general Narváez recuperó la presidencia del gobierno en 1856. Tras el Bienio Progresista, el general O’Donnell funda la **Unión Liberal**, un partido centrista que intenta conciliar las posturas de moderados y progresistas. Durante su gobierno (1858-1863) se buscó la estabilidad política y el desarrollo económico. Además se lleva a cabo una política exterior intervencionista, con acciones militares en Marruecos, México y otros países. A pesar de algunos éxitos, la Unión Liberal no logra resolver los problemas de fondo del sistema político español.

El Fin del Reinado (1863-1868)

A partir de 1863, los moderados regresan al poder, pero el descontento popular aumenta debido al autoritarismo del gobierno y la represión de las protestas. Desde 1865, los gobiernos moderados dirigidos por el general Serrano, desarrollaron una actuación extremadamente represiva y autoritaria. Abusaron de su poder, actuaron al margen de la Constitución y destituyeron de la Universidad a profesores demócratas y republicanos como, entre otros, Nicolás Salmerón y Emilio Castelar por impartir en sus clases teorías contrarias al catolicismo y a la monarquía. Así, los progresistas liderados por el general Prim, y demócratas reaccionaron preparando nuevos pronunciamientos y concertando el **Pacto de Ostende** (Bélgica) en el verano de 1866 para reunir fuerzas. Poco después, miembros de la Unión Liberal se incorporaron a esta alianza. En 1868, la **”Revolución Gloriosa”** pone fin al reinado de Isabel II, que se exilia a Francia. Se inicia el **Sexenio Democrático**, un periodo de experimentación política que intentará construir un sistema más democrático en España.


La Dictadura de Primo de Rivera y el Final del Reinado de Alfonso XIII

Debido al desastre de Annual, el descontento del ejército, el desprestigio del rey y su desconfianza en el sistema constitucional de la restauración sumado a la profunda crisis el 13 de Septiembre de 1923 el capitán general de Cataluña, **Miguel Primo de Rivera** dio un golpe de estado que contó con el apoyo de los sectores empresarios. La opinión pública lo acogió favorablemente o se mostró pasiva. Con ideas sacadas de contexto de Joaquín Costa se denominó *Cirujano de Hierro* y prometió poner fin a los principales problemas sociales como el caciquismo o el desgobierno. Ante esto Alfonso XIII le llamó para formar gobierno con el cargo de presidente y ministro iniciando el **Directorio Militar (1923-1925)** que proclamó el estado de guerra que duraría dos años suspendiendo la constitución de 1876 e instaurando medidas como la disolución de cortes, la represión contra la CNT y el PCE o la ilegalización del catalán y las manifestaciones. Se llevó a cabo una reforma de la administración con la aprobación del estatuto municipal que dio lugar a un nuevo caciquismo. En Cataluña se aprobó el estatuto provincial acabando con la mancomunidad.

Entre (1925-1930) Primo de Rivera instauró un **Directorio Civil** construyendo un régimen inspirado en las dictaduras autoritarias y de corte corporativo como la dictadura fascista de Mussolini. Se creó el partido de la **Unión Patriótica** el cual fue un mero instrumento constitucional. En 1926 se anunció la convocatoria de una **Asamblea Nacional Consultiva** que fue controlada por el gobierno. La política económica se caracterizó por el intervencionismo estatal y el nacionalismo económico. Además creó monopolios estatales y obras públicas lo que aumentó el gasto público que produjo la emisión de deuda pública.

La relativa tranquilidad se debió a la represión y a reformas sociales. Las bases de la organización corporativa nacional eran los comités de cada uno de los oficios. Su misión era resolver pacíficamente los conflictos. La colaboración de la UGT con la dictadura hizo que Indalecio Prieto se opusiera a ella. A Partir de 1926 la dictadura empezó a perder apoyos, un grupo de militares participaron en el pronunciamiento La Sanjuanada, la oposición republicana aumento llegando a formarse nuevos partidos como la Derecha Nacional Republicana, los estudiantes protagonizaron manifestaciones en 1931 los partidos de izquierdas catalanes se agruparon en Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), también se constituye la Federación Anarquista Ibérica (FAI), la oposición del PSOE a la dictadura se produciría más tarde. Todo esto obligó a Primo de Rivera a dimitir en enero de 1930 lo que provocó una crisis política en la que se vio implicado el monarca debido a su apoyo a la dictadura.

Alfonso XIII entregó la formación de gobierno al General Damaso Berenguer regresando a la senda del turnismo. La oposición al régimen se unió en el **Pacto de San Sebastián** (agosto de 1930) formado por republicanos nacionalistas y socialistas. Para contener la agitación social se declaró el estado de guerra, esto no evitó que la guarnición militar de Jaca se sublevaron llegando a proclamar la república la cual fracasó. En 1931 Berenguer dimitió y fue sustituido por el almirante Aznar que convocó elecciones municipales en el 12 de abril, republicanos y socialistas se presentaron coaligados a las elecciones y plantearon como un plebiscito a favor o en contra de la república. El triunfo de esta coalición en las grandes ciudades fue interpretado como un rechazo a la monarquía y dio paso a la proclamación de la república el 14 de abril de 1931.


La Hispania Romana

La Conquista romana de la Península tiene lugar entre el S.III y I a.C. en el contexto de las Guerras Púnicas y civiles, se divide en 3 fases:

  1. Primero, durante la segunda Guerra Púnica (218-197 a.C.), se toma Sagunto y Publio Cornelio Escipión derrota a Anibal, sometiendo así el sur y el este peninsular;
  2. Segundo, la conquista del interior (197-29 a.C.) se dificulta por la oposición de los pueblos celtíberos;
  3. Por último, la conquista de la Cornisa cantábrica (29-19 a.C.), en la que destacan las Guerras Cántabras.

Tras la conquista se inicia el proceso de romanización donde asimilan la cultura y las formas de vida romanas. A nivel económico, se impone un sistema de producción esclavista, con características coloniales, destaca la triada mediterránea y la minería en Sierra Morena. A nivel social, se distinguen ciudadanos romanos, hombres libres, libertos y esclavos. Era una sociedad eminentemente urbana, como podemos ver en el trazado de sus calles o en los espacios de ocio. A nivel cultural, introducen el latín, el cristianismo, el derecho romano, el arte (Acueducto de Segovia o el teatro de Mérida) y cabe destacar la figura de Séneca en la cultura romana.


La Monarquía Visigoda

En el S.III d.C. invaden la P.Ibérica los pueblos germánicos, entre ellos los visigodos, que entraron como aliados de Roma expulsando a suevos, vándalos y alanos en el S.V y que se asentaron en Hispania (capital en Toledo) tras la derrota de Vouillé (507) en la Galia. Crearon el primer Estado político independiente y unificado en la P.Ibérica.

Estaba unificado territorialmente: Leovigildo expulsa a los suevos en el S.VII. Jurídicamente, Recesvinto crea el *Liber Iudiciorum*, que supone las mismas leyes para todos y su principal legado. Religiosamente, Recaredo se convierte del arrianismo al catolicismo. Políticamente hay dos instituciones centrales: monarquía electiva, el Rey tiene apoyo de dos asambleas, el Aula Regia (de tipo consultivo y formada por magnates) y el Officium Palatinum (formada por los hombres de mayor confianza del Rey); y los Concilios, que estaban formados por el clero. Esta unión Iglesia-Estado supuso la sacralización de la figura del Rey y la obtención de tierras por parte del clero, comportándose como miembros de la nobleza.



Los Reyes Católicos: Unión Dinástica e Instituciones de Gobierno. La Guerra de Granada

El reinado de los Reyes Católicos supuso el inicio de la Edad Moderna. Este matrimonio, entre Isabel de Castilla y Fernando de Aragón en 1469 supuso una unión dinástica, pero no política, manteniendo las leyes e instituciones de cada reino.

Crearon un fuerte poder político por medio de la unidad territorial (conquista de Granada en 1492 y anexión de Navarra en 1512) y el fortalecimiento de su autoridad (imposición sobre los nobles, creación de un cuerpo de funcionarios, empleo de la diplomacia y creación de un ejército profesional). Sentaron las bases del Estado Moderno y de la Monarquía Autoritaria con una serie de instituciones: el Consejo Real/de Castilla (1480), órgano supremo de gobierno y tribunal superior de justicia; Chancillerías (tribunales superiores) y Audiencias (tribunales inferiores); las Cortes Castellanas, con un poder en decadencia desde 1480; la Santa Hermandad, como un cuerpo de vigilancia y policía rural; la Hacienda Real o Contaduría, para recaudar impuestos; la Inquisición (1478), tribunal eclesiástico con jurisdicción en ambos reinos; los virreyes, como delegados del rey en cada reino; los corregidores en la administración local.

La Guerra de Granada (1481-1492), culminó el proceso de Reconquista y logró la unidad territorial, las guerras civiles dentro de Granada contribuyeron a la victoria castellana. A pesar del vasallaje a los Reyes de Castilla, la frontera era fruto de tensiones.

Al-Ándalus: Evolución Política

Entendemos por Al Ándalus al Estado musulmán que se estableció en la Península Ibérica entre 711 y 1492. Llegaron con la victoria de Tarik en la Batalla de Guadalete (711) contra el Reino Visigodo (liderado por Don Rodrigo), y su avance fue imparable hasta la Batalla de Covadonga (722) y la de Poitiers (732).

A lo largo de los años el territorio andalusí experimenta distintas etapas políticas:

  • El Emirato dependiente de Damasco (714-756), con el emir a la cabeza;
  • El Emirato independiente (756-929), proclamado por Abderramán I y políticamente independiente pero no religiosamente;
  • El Califato de Córdoba (929-1031), proclamado por Abderramán III, al que sucede su hijo Al-Hakam II y más tarde Hisham II, ejerciendo el poder militar Almanzor, quien transformó el Califato en una dictadura militar, reafirmando el poder musulmán frente a los reinos cristianos. Al morir Almanzor, las luchas internas entre bandos rivales se intensificaron, provocando la desintegración del Califato en numerosos Reinos de Taifas en el año 1031.

Hubo diversos intentos de unificación, pero todos ellos fracasaron. Los almorávides entre 1090 y 1145 lo lograron tras su victoria en Sagrajas (1086), pero este poder no se consolidó y surgieron los segundos reinos de taifas. Más tarde, los almohades lograron una segunda unificación pero que tras la Batalla de las Navas de Tolosa (1212), se convirtieron en los terceros reinos de taifas (1232-1492).