Vanguardias Europeas y Españolas del Siglo XX: Expresionismo, Futurismo, Cubismo y Más

Vanguardias Europeas: Definición y Características

Las vanguardias son una serie de movimientos artísticos que se desarrollaron en Europa en el primer tercio del siglo XX. Surgieron en Francia como reflejo de la lucha, reivindicando la renovación del arte y la literatura, y la rebeldía contra las normas establecidas para crear nuevas formas estéticas. Los llamados “ismos” alcanzaron su apogeo en los años 20, pero en los años 30 desaparecieron, siendo perseguidos y prohibidos.

Rasgos Comunes de las Vanguardias

  • Ruptura y revolución contra el arte del pasado.
  • Antisentimentalismo: el artista vanguardista, al igual que el romántico, se considera un ser superior.
  • Búsqueda de la originalidad y la novedad, rechazando normas y tradiciones.
  • Provocaciones y búsqueda de nuevas técnicas expresivas.
  • Arte para minorías.
  • Movimientos cortos, con manifiestos que reflejan una conciencia de grupo.
  • Derivación hacia el fascismo o el comunismo en algunos casos.
  • Diversidad y contradicción entre los diferentes “ismos”, con frecuencia enfrentándose a la vanguardia anterior.

Principales Vanguardias Europeas

Expresionismo

De origen alemán, se extendió desde finales del siglo XIX hasta 1930. Aunque no rompe del todo con la tradición anterior, sus principios son:

  • Mayor importancia a las realidades internas desde el punto de vista del autor.
  • Intención de impactar al público.
  • Presencia de personajes extraños, caricaturas, rasgos distorsionados, situaciones ridículas.
  • Uso libre del lenguaje.

Autores importantes: Nietzsche, Kafka, Ibsen, Brecht y Strindberg.

Futurismo

Creado por Marinetti, se caracteriza por:

  • Olvido del pasado y enfoque en el futuro.
  • Admiración por los progresos técnicos.
  • Desprecio por lo sentimental y humano.
  • Influencia de Nietzsche en la valoración de la acción y la violencia.
  • Destrucción de la ortografía y la sintaxis (supresión de adjetivos, estilo rápido y dinámico).

Aunque no produjo grandes obras, abrió las puertas a nuevos temas y movimientos vanguardistas.

Cubismo

Creado por Apollinaire en 1913, se basa en:

  • Descomposición y recomposición de la realidad mediante planos y collage.
  • Importancia de la disposición tipográfica.
  • Antisentimentalismo y humor.

Dadaísmo

Dadá representa el intento de balbuceo infantil. Un grupo de emigrados, liderados por Tzara, componían poemas con palabras escogidas al azar o recitaban sílabas sin sentido. Sus características son:

  • Negación absoluta de todo, incluso del arte y la literatura.
  • Actitudes anárquicas y destructivas.
  • Rechazo de las tradiciones.
  • Promoción de la duda, la burla y el humor corrosivo.
  • Lucha contra el sentido común y la lógica.
  • Cualquier cosa puede ser arte, ya que lo importante es la creación.

Surrealismo

Es el movimiento más importante. Sus características son:

  • La función del arte debe ser explorar el subconsciente.
  • Búsqueda de un conocimiento que sobrepase la realidad visible.
  • Escritura automática: sin control de la razón ni preocupación estética o moral.
  • Imágenes visionarias o metáforas surrealistas basadas en la asociación libre de ideas y palabras.

Temas: los sueños, lo misterioso, objetos y seres extraños, la magia, el humor negro y el fetichismo.

Vanguardias en España

Creacionismo

Propone la creación de realidades distintas. El poema debe ser autónomo y autoexplicativo. Se crean imágenes basadas en la relación arbitraria que el poeta establece. Poetas influyentes: Larrea y Gerardo Diego.

Ultraísmo

Recoge elementos futuristas y cubistas. Propone ir más allá de la estética dominante. Incorpora temas y motivos del creacionismo, futurismo y cubismo. Propone la supresión de la anécdota y el sentimentalismo en la poesía, con una tendencia al juego y la evasión. Influyó en poetas de la Generación del 27 y en autores hispanoamericanos como César Vallejo y Borges.

Ramón Gómez de la Serna

Fue el máximo impulsor de las vanguardias en España. Fundó la tertulia del café Pombo y dirigió la revista Prometeo. Su obra, caracterizada por su singular personalidad, dio origen al “Ramonismo”. Se mostró como un nihilista que respondía a la sociedad caótica y carente de valores con extravagancia. Escribió novelas, ensayos, artículos periodísticos, teatro, cuentos y greguerías, que él mismo definió como “metáfora + humor”.

Defendía la idea de que una obra corta no tenía por qué ser inferior y promovía lo novedoso y el arte deshumanizado. La greguería, un género breve, rompía con la solemnidad y parodiaba las convenciones, presentando una visión personal y humorística de la realidad.

Obras destacadas: Ramonismos (definición de su estética), Automoribundia (autobiografía). Su literatura, con novelas y ensayos que reflejan el ambiente madrileño, marca la transición entre la austeridad de los prosistas de la Generación del 98 y el renacimiento del humorismo.