El Antifranquismo y la Agonía de la Dictadura: Un Análisis Histórico

El Antifranquismo y la Agonía de la Dictadura

En la década de 1960, el antifranquismo experimentó una recomposición significativa, impulsada por las transformaciones sociales y la necesidad de las organizaciones opositoras de encontrar nuevas formas de enfrentarse a la dictadura. El objetivo principal era desacreditar al régimen, denunciando las precarias condiciones de vida y la falta de libertades políticas.

Reorganización del Antifranquismo

Grupos de Oposición Política

Durante la década de 1960, el antifranquismo se reorganizó, adaptándose a las transformaciones sociales. Las organizaciones opositoras buscaron nuevas estrategias para desafiar la dictadura, enfocándose en denunciar las precarias condiciones de vida y la ausencia de libertades políticas.

La Reactivación de los Nacionalismos

En Cataluña, surgieron nuevas organizaciones nacionalistas de izquierda y se constituyó la Asamblea de Catalunya (1971), una organización unitaria de entidades opositoras. En 1974, se creó Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) liderada por Jordi Pujol. En el País Vasco, el PNV mantuvo su presencia, pero en 1959 apareció ETA (Euskadi Ta Askatasuna – Euskadi y Libertad).

El Nuevo Movimiento Obrero

Entre 1960 y 1975, los conflictos laborales se intensificaron, extendiéndose tanto a las zonas de tradición obrera como a las nuevas ciudades industriales. Estos conflictos se originaron en reivindicaciones laborales y demandas de libertades políticas. La respuesta del régimen fue represiva. En 1964, se creó Comisiones Obreras (CCOO), que tuvo un gran éxito en las elecciones sindicales de 1966, lo que llevó a su ilegalización. En 1972, se detuvo a su dirección y se juzgó en el Proceso 1001, con severas condenas a sus dirigentes, incluyendo a Marcelino Camacho. A partir de 1967, sindicalistas vinculados a las Juventudes Obreras Cristianas se separaron de CCOO y fundaron la Unión Sindical Obrera (USO).

Protestas Estudiantiles y Ciudadanas

La protesta estudiantil se volvió casi permanente, con la lucha contra el SEU y la creación de sindicatos democráticos de estudiantes que se oponían a la dictadura. El régimen respondió con una dura represión, lo que radicalizó el movimiento. A partir de 1968, el impacto del Mayo francés radicalizó el movimiento estudiantil, convirtiendo las universidades en centros de continua contestación y rebeldía.

La Agonía de la Dictadura

Los Últimos Gobiernos Franquistas

Las tensiones internas favorecieron a las posiciones más inmovilistas, paralizando los proyectos de reforma. En junio de 1973, Carrero Blanco fue nombrado presidente del gobierno, pero fue asesinado por ETA. A partir de ese momento, las diferencias entre los inmovilistas (el búnker) y los aperturistas (que creaban asociaciones políticas dentro del Movimiento) se agudizaron. En enero de 1974, se formó un nuevo gobierno presidido por Carlos Arias Navarro, que intentó unir a aperturistas e inmovilistas con el “Espíritu del 12 de febrero”, pero no convenció a ninguna de las facciones franquistas. Ante la falta de reformas, los ministros aperturistas abandonaron el gobierno, evidenciando la incapacidad del franquismo para democratizarse.

El Incremento de la Movilización Popular

A partir de 1973, la conflictividad social (obrera, estudiantil y vecinal) aumentó, y la oposición se organizó. Se crearon organismos para reivindicar el sistema democrático e impedir la continuidad del franquismo. En 1974, se constituyó en París la Junta Democrática (integrada por CCOO, partidos de izquierda y personalidades de la derecha democrática). En 1975, el PSOE formó la Plataforma de Convergencia Democrática (demócrata-cristianos, UGT y PNV). Sus programas proponían un gobierno provisional, una amnistía y elecciones libres. También se produjo un recrudecimiento de la violencia, con ETA incrementando sus atentados y la aparición de terrorismo ultraizquierdista (FRAP y GRAPO). Arias intensificó la represión, ejecutando a dirigentes anarquistas.

El Conflicto del Sáhara

El proceso de descolonización africano sorprendió a España, ya que Francia no informó a España de su acuerdo con Marruecos. Tras un breve conflicto armado en 1957, España cedió el territorio de Ifni a Marruecos en 1969 y concedió la independencia a Guinea Ecuatorial en 1968. Se celebró un referéndum sobre la autodeterminación del Sáhara (propuesta de la ONU y el Frente Polisario). En 1975, el rey Hassan II organizó la Marcha Verde, una invasión pacífica del Sáhara. El gobierno de Arias cedió y el 14 de noviembre se firmó el Acuerdo de Madrid, entregando el territorio a Marruecos y Mauritania.

La Muerte de Franco: El Fin de la Dictadura

En un contexto de condena internacional de la represión franquista, de agudización de las tensiones internas y de crisis provocada por el Sáhara, el 20 de noviembre de 1975 falleció el general Franco. A pesar de la intención de mantener el futuro de España “atado y bien atado”, la imposibilidad de un franquismo sin Franco se hizo evidente.