La Democracia

Tipos de Democracia

Etimológicamente, democracia procede del griego y significa gobierno del pueblo. Según cómo se entienda el concepto de “pueblo” y la manera en que este ejerce su gobierno, podemos distinguir dos tipos de democracia:

• Democracia directa: El pueblo toma directamente las decisiones políticas y ejerce el gobierno. Ejemplo: la antigua Atenas. Actualmente, este tipo de democracia sería impensable, ya que el gran tamaño de los Estados modernos y el elevado número de votantes la harían imposible.
• Democracia indirecta: El ciudadano se expresa a través de su voto. Actualmente, el modelo que impera es el de la democracia indirecta o representativa, aunque existen diferentes formas de Estado. Por ejemplo, España es una monarquía parlamentaria, en la que el rey ejerce la función de jefe de Estado y el mando supremo de las Fuerzas Armadas, y posee además la potestad de sancionar las leyes presentadas por el Gobierno y el Parlamento. El poder reside en el pueblo, que lo ejerce a través de sus representantes en el Parlamento o Cortes Generales. Existen otros modelos, como el francés, que es una república, donde el Presidente, elegido por votación, es también el jefe de Estado.

Criterios Democráticos

Según Russell Hardin, los criterios que actualmente justifican la elección de la democracia como forma de gobierno son cuatro:

1. Bienestar (Estado del bienestar)
2. Igualdad
3. Deliberación (todos los ciudadanos tienen derecho a voto)
4. Autonomía (esa participación favorece el desarrollo de la autonomía personal)

Riesgos de la Democracia

• Degenerar en demagogia: Los políticos intentan convencer a los ciudadanos para que los voten y, normalmente, convencen los mejores oradores, y a veces los charlatanes y embaucadores. Cuando el apoyo popular se consigue mediante propaganda y mentiras, ha triunfado la demagogia.
• Fomentar la uniformización: El concepto de igualdad mal entendido puede llevar a un deseo de igualar y uniformizar a todos los ciudadanos.
• Convertirse en una dictadura de la mayoría: A nivel estrictamente político, los votos del 90 % de la población pueden ahogar los intereses del 10 %, que no encuentra mecanismos efectivos para llevar a cabo sus aspiraciones. Aunque también hay que recordar que existe libertad de expresión y cualquier ciudadano puede expresar su opinión.
• La escasa participación: La mayor parte de las personas solo interviene en la gestión pública cuando vota en unas elecciones. Para muchos pensadores, la apatía y la indiferencia que padecen las democracias actuales se deben a la escasa o pobre participación de la ciudadanía en la gestión pública. Por esta razón, muchos pensadores reclaman la necesidad de democratizar aún más los actuales sistemas democráticos.

La Ciudadanía

Origen y Evolución del Término

Ciudadanía significa pertenencia a una ciudad. En la Antigüedad, la ciudad era una comunidad política, así que ser ciudadano significaba participar en la vida política de la propia comunidad. En la actualidad, las comunidades políticas han evolucionado y configuran los modernos Estados, de manera que suele decirse que los ciudadanos pertenecen a un Estado.

Evolución del concepto de ciudadanía:

• Democracia ateniense: El concepto surge en Atenas. Aquí solo eran considerados ciudadanos los varones libres y nacidos en antiguas familias de la ciudad. Así pues, la ciudadanía era una noción muy restringida.
• Imperio Romano: Se profundizó en la noción de ciudadano, de manera que las leyes detallaban con exactitud los privilegios y deberes de un ciudadano. Este poseía derechos públicos y privados. Los esclavos y extranjeros quedaron siempre excluidos de la ciudadanía.
• Tras la Revolución Francesa: Se publican los Derechos del Hombre y del Ciudadano, y se reconocía, por primera vez, la categoría de ciudadano sin distinción de clase social, a la vez que se proclamaba su libertad e igualdad, pero no desaparecía la discriminación de sexos: la mujer continuaba sin poseer derechos de ciudadanía.
• Democracias actuales: Son considerados ciudadanos todos los hombres y las mujeres mayores de edad.

Fundamentación Filosófica

Filosóficamente, la ciudadanía se ha entendido de tres maneras:

• Ciudadanía como un deber (Aristóteles): Para el filósofo, la ciudadanía se basaba en el deber y comportaba ante todo unas obligaciones jurídicas. En la actualidad, los filósofos republicanos mantienen una concepción similar a esta y subrayan la importancia de los deberes cívicos.
• Ciudadanía como un derecho: En la concepción moderna del ciudadano, este tiene derecho a participar en la vida política y a defender, dentro de la legalidad, sus intereses particulares, incluso frente al interés político general del Estado.
• Ciudadanía más allá de derechos y deberes: En la filosofía política más reciente, el concepto de ciudadanía no alude únicamente a una condición legal, ni siquiera a una suma de derechos y deberes, sino que la ciudadanía ha de ser un ideal normativo, de modo que hay que entenderla como el principio que rige la sociedad y que debe orientarla hacia una situación en la que los ciudadanos tengan una participación plena, efectiva e igual en los procesos políticos.

Los Derechos Humanos

Son todos aquellos derechos que posee el ser humano por el simple hecho de pertenecer a la especie humana. Son consecuencia de la indudable e inherente dignidad que posee toda persona y de la que no puede ser desposeída ni privada.

Características y Tipos

Estos se incluyen dentro del derecho subjetivo, ya que expresan la autorización que poseemos como personas a exigir y a realizar ciertas cosas, como por ejemplo el respeto hacia nuestra libertad.

Rasgos

• Son inherentes a la naturaleza humana, ya que no pueden ser otorgados ni cancelados por ninguna institución ni Estado.
• Son universales, puesto que son válidos para toda persona en cualquier tiempo y lugar, independientemente de su posición social, religión, raza o sexo.
• Son ideales que deben orientar e inspirar el código legal de todo Estado que se considere de derecho.

Tipos

• Derechos civiles: Amparan a los individuos de las arbitrariedades del Estado y protegen el ámbito privado del público. Ejemplo: derecho a la vida. Esto se da en cualquier Estado de derecho.
• Derechos políticos: Garantizan que el poder esté efectivamente en manos del pueblo. Ejemplo: derecho a elecciones periódicas y al sufragio universal. Se da en los Estados democráticos de derecho.
• Derechos económicos y sociales: Promueven condiciones de vida adecuadas e iguales para todos los individuos. Ejemplo: derecho al trabajo. Se da en el Estado social y democrático de derecho. Aparece redactado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU.
• Derechos sobre la paz y el medio ambiente: Amplían la tabla de derechos a los seres vivos en general. Ejemplo: derechos de los animales, de un medio ambiente limpio. No existe ningún Estado que, por el momento, los ratifique, ya que todavía no están reconocidos.

Los Derechos de la Mujer y del Niño

Históricamente, la mujer no ha sido considerada una ciudadana con plenos derechos hasta épocas muy recientes. Durante la Antigüedad y la Edad Media, se consideraba que la mujer tenía capacidad para ocuparse de la casa y de la familia, pero no de los asuntos públicos o políticos. Sin embargo, los ideales liberales de la Edad Moderna, con su énfasis en la libertad e igualdad, acabaron por influir en las mujeres, que tomaron conciencia de su situación y empezaron a luchar por el reconocimiento de sus derechos en igualdad.

Momentos históricos de dicha lucha

• Siglo XVIII: Los ideales de la Ilustración favorecieron que algunas mujeres reclamaran sus derechos de ciudadanas.
• Siglo XIX: En Estados Unidos y Gran Bretaña surgió el movimiento sufragista, que reclamaba el sufragio universal.
• Siglo XX: Las mujeres del mundo occidental lograron el derecho a voto y, a medida que avanzaba el siglo, fueron conquistando los mismos derechos que los hombres en numerosos países. El feminismo de los años setenta logró las últimas conquistas hasta la proclamación de la plena igualdad ante la ley de hombres y mujeres en la Asamblea General de la ONU.
• Siglo XXI: Actualmente, los países occidentales reconocen la igualdad jurídica de la mujer, aunque a nivel social aún no sea plenamente efectiva. Por ejemplo, aún existe desigualdad salarial, y la conciliación familiar y profesional es dificultosa. En los países subdesarrollados todavía no se ha conseguido ni siquiera la igualdad jurídica, pues en muchos de ellos la discriminación de la mujer sigue siendo legal: no tienen permitido votar, ni tener posesiones.

Los Derechos del Niño

En 1959 se aprobó la Declaración de los Derechos del Niño, ya que la ONU llegó a la conclusión de que, a causa de las necesidades especiales de los niños, debían ser enunciados de manera particular y específica.