La comunicación

El lenguaje: Un código por el cual las ideas sobre el mundo se expresan a través de un sistema convencional de señales arbitrarias de comunicación.

El hablar: es un proceso de respiración, fonación, resonancia y articulación.

Desarrollo normal del lenguaje

Los niños que emplean estructuras como “abelo” por “abuelo”, etc.; gradualmente aprenden a reemplazarlo con las formas adultas apropiadas.

Etapas del desarrollo del lenguaje

• Etapa prelingüística: Las primeras respuestas de los niños son: el llanto, movimientos físicos involuntarios asociados al susto, sorpresa, agrado o disgusto. La discriminación auditiva gruesa se inicia con el reconocimiento de la voz materna, asociándola a una sensación de bienestar fisiológico.
• Etapa preescolar:
  • La palabra reemplaza los objetos físicos por objetos tangibles.
  • La expresión competente exige un control audiofonético.
  • Se inicia por la asociación del contenido del discurso según la entonación del hablante.
  • Debe incluir competencia mínima de los órganos de fonación y la discriminación fonética.
• Etapa escolar:
  • El niño logra perfeccionar su articulación.
  • La amplitud de su vocabulario revela las adquisiciones en relación con su noción corporal, espacial, rítmica y de coordinación ojo-mano.
  • A los siete años la mayoría de los niños tendrán las bases para la construcción de una estructura del lenguaje muy parecida a la de los adultos.

Definición de los trastornos de la comunicación

Las diferencias en el desarrollo de las habilidades de comunicación se convierten en trastornos de la comunicación cuando cumplen los siguientes niveles:

Niveles de los trastornos de la comunicación

• La transmisión y/o percepción de los mensajes es incorrecta.
• La persona padece una desventaja económica, educativa o social.
• Se produce un impacto negativo en el desarrollo emocional de la persona.
• El problema ocasiona daños físicos o amenaza la salud de la persona.

Se habla de trastornos de la comunicación cuando las perturbaciones del lenguaje o la voz afectan negativamente el rendimiento académico del niño.

Trastornos de la comunicación: Tipos

• Trastornos del habla:
  • Trastornos de la articulación.
  • Trastornos de la voz.
  • Trastornos de la fluidez.
• Trastornos del lenguaje:
  • Trastornos del lenguaje receptivo.
  • Trastornos del lenguaje expresivo.

Trastornos del habla

El habla es anormal cuando difiere tanto de los demás que llama la atención, entorpece la comunicación y ocasiona incomodidad al hablante o a sus interlocutores.

Trastornos de la articulación

La respiración y la voz deben ser modeladas para formar palabras.

Trastornos de la articulación: Tipos

• Apraxia: es cuando el niño piensa una cosa y dice otra, presenta desórdenes a nivel del discurso provocados por alteraciones neuromusculares.
• Disartria: es el trastorno en la articulación de determinados fonemas al hablar, con dificultades para el movimiento bucal.
• Dislalia: problemas de articulación ocasionados por alteraciones o malformaciones en el aparato fonador, pueden ser por sustitución, omisión o inserción.

Tipos de dislalia

• Por sustitución: Ejemplo: Pego por perro.
• Por omisión: Ejemplo: bazo por brazo.
• Por inserción: Ejemplo: martrillo por martillo o radaton por ratón.
• También encontramos rotacismos (r), lambdacismo (l), gamacismo (c-g-k-q) y deltacismo (d-t).

Trastornos de la voz

Se denomina disfonía a cualquier tipo de voz defectuosa o desagradable.

Tipos de trastornos de la voz

• Trastorno de la fonación.
• Trastorno de la resonancia (hipernasalidad, hiponasalidad).

Trastornos de la fluidez: Tipos

• La taquilalia, verborrea, logorrea: es el impulso de emitir rápida e incesantemente vocablos, aunque el sentido y la relación no sean correctos.
• Ecolalia: repetición de palabras o frases de lo que escucha, aunque no tengan sentido para él.
• Disglosia: dificultad de la producción oral debido a alteraciones anatómicas y fisiológicas de los órganos articulatorios.
• El confusionismo: trastorno donde el habla se emite tan rápido que los sonidos se pronuncian mal.
• Estereotipia verbal: es el intercalar rítmicamente en el discurso la misma palabra o frase absurda.
• La bradilalia: supresión de la expresión oral durante un tiempo muy prolongado.
• La disfemia o tartamudez: se piensa que se debe a que el cerebro presenta dificultades para controlar el ritmo y duración de los movimientos del habla.
• La tartamudez o disfemia: repeticiones rápidas de consonantes o vocales, especialmente al comienzo de las palabras y en partes enteras de la palabra.

Trastornos del lenguaje

La disfunción o discapacidad del desarrollo de la comprensión y/o uso del sistema de símbolos oral, escritos y de otros tipos.

Tipos de trastornos del lenguaje

• Trastornos del lenguaje receptivo.
• Trastornos del lenguaje expresivo.

Trastornos del lenguaje receptivo

• La alexia: se define como un síntoma de la afasia que consiste en la dificultad para comprender el lenguaje escrito.
• La dislalia audiógena: es la audición incorrecta.

Trastornos del lenguaje expresivo

• La afasia: trastorno que afecta el empleo del código lingüístico, incapacidad para recuperar, formular y decodificar símbolos convencionales que constituyen el lenguaje.
• La disfasia: incapacidad parcial de utilizar el lenguaje simbólico.
• La agrafia: incapacidad de escribir que tiene una persona normalmente instruida y sin parálisis.
• La disgrafía: dificultad para aprender a escribir sin que existan problemas de parálisis.
• La amimia e hipermimia: es la pérdida de la capacidad de comunicarse a través de gestos.
• Mutismo selectivo: es una afección médica en la cual el niño puede hablar bien y deja de hacerlo generalmente en la escuela o en escenarios sociales.
• Escritura temblorosa: de origen emocional y cuando es orgánico se acompaña de omisión o repetición de letras o sílabas.

Causas de los trastornos de la comunicación

• Orgánicas.
• Funcionales.
• Órgano-funcionales.
• Ambientales.
• Psicológicos.

¿Cómo se detecta un trastorno de la comunicación?

• Dificultad evidente y específica en la compresión del lenguaje.
• Dificultad para explicar o dar respuestas.
• Pronunciación de palabras sin conocimiento de su significado.
• Vocabulario limitado.
• Dificultad para discriminar ciertos sonidos.
• Desgano para hablar, así como leer en voz alta.
• Mejor comprensión cuando lee en silencio que oralmente.
• Desempeño escolar deficiente.

Intervención

• Educación auditiva.
• Educación rítmica.
• Ejercicios sensoriomotores.
• Ejercicios de relajación y respiración.
• Actividades audiovisuales.
• Conversación dirigida.

Estrategias de intervención

El maestro debe tener presente los siguientes principios para ayudar al niño con trastorno del lenguaje:

1. Integración en programas.
2. Construir referencias.
3. Enseñar a través de recepción y expresión.
4. Proveer una instrucción para la ampliación de conceptos.
5. Complementar con ayudas visuales.

Principios correctivos a tener en cuenta ante un trastorno de la fluidez

1. Coordinación con los programas de terapias del lenguaje.
2. Fomentar la interacción oral.
3. Propiciar la retroalimentación.
4. Brindar oportunidades para el discurso.
5. Permitir la lectura y respuesta escritas.

¿Cómo tratar los trastornos de la comunicación en el aula?

1. Adaptarse siempre al niño, tratando de andamiar, de favorecer su desarrollo.
2. Partir de los intereses, experiencias y competencias del niño.
3. Hacer comentarios acerca de la actividad que se va a realizar.
4. Evitar corregir o hacer repetir constantemente al niño en sus producciones erróneas e incompletas.
5. Darle más tiempo para que pueda expresarse.
6. Reforzar sus éxitos favorecerá su autoestima y seguridad personal.
7. Hacer preguntas abiertas que posibiliten respuestas diversas y ayudar con preguntas de dos o tres opciones.
8. Utilizar todos los medios para facilitar la comprensión del lenguaje.
9. Tener en cuenta que estos niños pueden encontrarse inseguros en situaciones orales.
10. Utilizar todo tipo de representaciones visuales que apoyen el tema del que se habla.
11. Utilizar siempre que sea posible situaciones de juego.

Autismo

Etimológicamente, el término autismo proviene de la palabra griega eautismos, cuyo significado es “encerrado en uno mismo”. Su introducción en el campo de la psicopatología fue obra del psiquiatra suizo Bleuler. El autismo es un trastorno del desarrollo que persiste a lo largo de toda la vida. Se manifiesta en los niños regularmente entre los 18 meses y 3 años de edad y da lugar a diferentes grados de alteración del lenguaje y la comunicación, de las competencias sociales y de la imaginación. Tiene características como: regresión maduracional, expresión facial no convencional, motricidad estereotipada.

Kanner describió el síndrome como “autismo infantil”, para explicar una especie de “psicosis infantil”. Este concepto ha ido cambiando y en la actualidad se habla de síndrome autista para designar “una alteración evolutiva del desarrollo que puede definirse como dificultades de la comunicación verbal y gestual, alteraciones de la interacción social recíproca y un repertorio muy restringido de actividades e intereses y patrones repetitivos de conducta”.

Clasificación del autismo

El autismo varía grandemente en severidad. Los casos más graves se caracterizan por una completa ausencia del habla de por vida, comportamiento extremadamente repetitivo, no usual, autodestructivo y agresivo.

Causas del autismo

Sus causas son desconocidas a pesar de que desde hace muchos años se le reconoce como un trastorno del desarrollo. Sin embargo, muchos investigadores creen que es el resultado de algún factor ambiental, que interactúa con una susceptibilidad genética. Unidad biopsicosocial indivisible.

Comportamiento en 11 casos de autismo: 8 niños y 3 niñas

• Incapacidad para mantener relaciones interpersonales.
• Incapacidad para hablar, lenguaje no comprensible.
• Excelente memoria de repetición.
• Temor a sonidos fuertes y movimientos de objetos.
• Utilización inadecuada de pronombres.
• Ecolalia.

Diagnóstico del trastorno autista según DSM III (Manual de diagnóstico y estadístico de trastornos mentales)

• Inicio antes de los 30 meses.
• Evidencia clara de no dar respuestas a los demás.
• Graves deficiencias en el desarrollo del lenguaje.
• Si hay lenguaje se da la ecolalia, lenguaje metafórico e inversión de pronombres.
• Respuestas extrañas a cambios en el contexto.
• Ausencia de ideas delirantes, alucinaciones y otros trastornos de la esquizofrenia.

Características del trastorno autista según DSM IV (Manual de diagnóstico y estadístico de trastornos mentales)

• Padecen deficiencia mental CI: de 35 a 49.
• Presentan síntomas de hiperactividad, rabietas, impulsividad, agresividad.
• Reducido campo de atención.
• Presentan trastornos en el sueño.
• Presentan crisis epilépticas.
• Su incidencia es mayor en varones que en hembras.

Evaluación psicológica del autismo

• Permite ubicar al niño/a en un medio psicoeducativo estructurado.
• Permite detectar deficiencia mental severa o profunda, con tendencia autista (diagnóstico diferencial).

Instrumentos de evaluación

• AAEP del modelo TEACCH: Instrumento de psicodiagnóstico, para jóvenes y adultos autistas. Evalúa: comunicación, relaciones sociales, autonomía, conducta en el trabajo, aptitudes domésticas.
• CARS; Childhood Autism Rating Scale: este instrumento evalúa: relación con otras personas, imitación, relación con el cuerpo, con los objetos, adaptación al cambio, angustia, nerviosismo, comunicación verbal y no verbal, entre otros.
• PEP, Perfil psicoeducativo: Permite el diagnóstico de las funciones mentales del niño. Evalúa: imitación, percepción, motricidad, cognición, socialización, lenguaje comprensión/expresión.

Cada niño con autismo es diferente uno de otro, sin embargo, se han establecido algunos comportamientos muy similares, tales como:

• Lenguaje poco o nulo, o bien pierde el habla.
• Ecolalia, repite lo mismo o lo que oye (frases o palabras).
• Actúa como si fuera sordo, pero no soporta ciertos sonidos o luces muy fuertes como por ejemplo, la licuadora o el microondas.
• No mira directamente a los ojos.
• Se obsesiona con los objetos sin razón alguna.
• No muestra ningún interés por los juguetes y/o no los usa adecuadamente.
• Tiende a reunir objetos o los pone en línea.
• Muestra total desinterés por su entorno y en las relaciones sociales con los demás.
• No responde a su nombre.
• No obedece ni sigue instrucciones.
• Cuando quiere algo, no lo pide, toma la mano de alguien dirigiéndola a lo que desea.
• Rechaza el contacto físico. No le gusta que lo toquen o carguen.
• Aleteo de manos (como si intentara volar) en forma rítmica y constante.
• Gira o se mece sobre sí mismo.
• Se queda quieto observando un punto como si estuviera hipnotizado.
• Camina de puntitas (como ballet).
• Puede ser un niño hiperactivo (muy inquieto) o pasivo (demasiado quieto).
• Muestra agresividad y/o puede ser en ocasiones autoagresivo (se golpea a sí mismo).
• Tiene una gran obsesión por el orden y la rutina, rechaza los cambios.
• Se enoja mucho y hace rabietas sin razón aparente o porque no obtuvo algo.
• Sonríe sin razón aparente (como si viera fantasmas).
• En ocasiones, estos niños, además de ser autistas, tienen algún otro trastorno del desarrollo (retraso mental, motriz, Síndrome de Down, etc.).

Solo un pequeño segmento de niños con autismo llega a mostrar alto grado de inteligencia; su falta de aprendizaje se hace evidente, debido precisamente a su pobre o nula comunicación. Se han probado varios tratamientos para el autismo, algunos han tenido mayor éxito que otros. De los tratamientos con mejores resultados se encuentra el de modificación de conducta, es el más aceptado porque tiene la capacidad de mantener bajo control instruccional al niño y lograr centrar su atención. Aun así, es importante mencionar, que está comprobado que el mejor avance se logra con una mezcla o variedad de tratamientos, algunos de ellos encaminados al desarrollo de áreas específicas (por ejemplo, el habla). Los padres, ya sea asesorados por los especialistas o bien documentándose e investigando en diferentes medios, son quienes finalmente pueden elegir el mejor tratamiento para su hijo, basándose en las posibles ventajas o desventajas que tenga cada uno de ellos y según sea su caso en específico.

Autismo: Definición y características

El autismo es una condición de origen neurológico de aparición temprana, generalmente aparece antes de los tres años de edad, que puede estar asociado o no a otros cuadros. Las personas con autismo presentan características como desviaciones en la velocidad y secuencia, desviaciones en las relaciones sociales, lenguaje y comunicación, además de problemas sensoperceptivos y cognitivos y ocasionan rutinas estereotípicas, resistencia al cambio, e interés restringidos, todo lo cual interfiere en su interacción con las personas y su ambiente.

El autismo como uno de los trastornos del desarrollo más severos y profundos

El autismo se le considera uno de los trastornos en el desarrollo más severo y profundo, ya que están comprometidas 5 áreas de desarrollo (física, social, motora, emocional, lenguaje). Se dice que presentan conductas regresivas ya que el niño autista puede consolidar conductas acorde a su edad y retroceder la misma en cualquier momento. Así mismo, puede saltar la secuencia del desarrollo ya que en un niño autista su desarrollo se manifiesta de manera diferente.

Confusión entre autismo y esquizofrenia

Kanner llegó a confundir el autismo con esquizofrenia debido a que las conductas observadas eran semejantes (gira o se mece sobre sí mismo, muestra agresividad y/o puede ser en ocasiones autoagresivo (se golpea a sí mismo)), siguió investigando hasta dar a conocer que no era el mismo trastorno ya que la esquizofrenia es un trastorno mental, y el autismo un trastorno en el desarrollo.

Especialistas para niños con problemas de lenguaje

Un niño con problemas de lenguaje debe ser atendido por un terapista de lenguaje y un foniatra. Si el niño tiene 3 o 5 años, se debe remitir a un centro de desarrollo infantil.

Evaluación de un niño con autismo

• Psiquiatra: establece si hay trastorno mental o de desarrollo y los medicamentos que debe recibir.
• Psicólogo: determina el C.I del niño para saber si está por encima o por debajo del promedio.