Crisis Demográfica, Económica y Política en la Baja Edad Media

A finales del siglo XIII, la población española era de 5 millones de habitantes. Sin embargo, en la primera mitad del siglo XIV, las hambrunas y epidemias, junto con la peste negra de 1348, provocaron un descenso demográfico significativo. En el siglo XV, las consecuencias de la crisis se manifestaron en el estancamiento demográfico y la consolidación de la autoridad demográfica del Reino de Castilla.

La principal actividad económica era la agricultura de subsistencia, mientras que en las tierras abandonadas se desarrollaba la ganadería ovina trashumante, lo que llevó a la creación de La Mesta. La artesanía era escasa, y Sevilla se destacaba por la exportación de aceites, vinos y mercurio de Almadén. En la Corona de Aragón, se produjo un desarrollo de la industria textil, formándose gremios y una poderosa burguesía.

Se produjeron conflictos políticos por el enfrentamiento entre los reyes y la nobleza, así como conflictos sociales. En Castilla, se libró la guerra civil entre Pedro I y Enrique II de Trastámara. En la Corona de Aragón, las cortes estaban controladas por la nobleza. Hubo movimientos antiseñoriales debido al aumento de la presión de la nobleza sobre los campesinos.

Expansión de la Corona de Aragón en el Mediterráneo

La expansión se originó por el comercio de exportación con distintos puntos del Mediterráneo. Para organizar este sistema comercial, se establecieron consulados en distintas ciudades del Mediterráneo en el siglo XIII. La expansión territorial se intensificó en el último cuarto del siglo XIII, con la incorporación de Sicilia, Córcega y Cerdeña. Roger de Flor lideraba a los almogávares, quienes conquistaron los ducados griegos de Atenas y Neopatria. En el siglo XIV, la expansión se frenó.

Rutas Atlánticas: Portugal y Castilla

A principios del siglo XV, los portugueses comenzaron la exploración del Atlántico. El infante Don Enrique el Navegante incentivó la exploración de la costa atlántica de África. Esto fue posible gracias a la carabela, el astrolabio y la brújula. Se conquistaron Ceuta, Azores, Madeira y Cabo Verde. En 1487, Bartolomé Días descubrió el Cabo de Buena Esperanza, y en 1498, Vasco da Gama llegó a la India.

Castilla se había centrado en la conquista de las Islas Canarias, que estaban pobladas por los guanches. La conquista se inició en 1402 con la toma de Lanzarote, Fuerteventura y El Hierro. A mediados del siglo XV, se conquistaron Gran Canaria y La Gomera, y a finales de siglo, Tenerife y La Palma.

Unión Dinástica: Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón

El matrimonio de Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón significó la unión dinástica de los reinos peninsulares, con Castilla como el reino principal. En la Concordia de Segovia (1475), se estableció que ambos reyes gobernarían Castilla. Tras la muerte de Isabel, su hija Juana gobernó Castilla, y Fernando se retiró a Aragón.

Conquista del Reino Nazarí e Incorporación del Reino de Navarra

La unidad religiosa y la conquista de Granada fueron objetivos clave de la política real. Se logró formar un ejército permanente y se utilizó la artillería.

Práctica del Despotismo Ilustrado: Carlos III

Carlos III es el representante del despotismo ilustrado en España. Siguió las ideas de naturaleza, razón y progreso científico, así como el derecho de los pueblos a la felicidad.

Reformas Sociales y Económicas

• En el ámbito social, destaca el decreto sobre la honestidad de todas las profesiones.
• En el ámbito económico, se observa la influencia de la fisiocracia, con la elaboración de censos.
• Se promovieron las tendencias liberales, finalizando el monopolio de los gremios, aunque el mercantilismo seguía teniendo un peso importante.
• En el siglo XVIII, se crearon las primeras manufacturas.
• Se mejoró el comercio interior, suprimiendo las aduanas interiores y creando la Red de Caminos Reales.
• Se liberó el comercio con América en 1778.
• Se estableció el Banco de San Carlos en 1782, el primero en emitir billetes en España.

Evolución de la Política Exterior Española en Europa en el Siglo XVIII

La política de los Borbones se centró en dos objetivos principales: recuperar las posesiones europeas perdidas tras el Tratado de Utrecht y defender el imperio americano. Se realizaron una serie de alianzas con Francia, conocidas como los Pactos de Familia. Isabel de Farnesio obtuvo el reino de Nápoles y Sicilia para su hijo Carlos. Durante el reinado de Carlos III, se recuperó Menorca, pero no Gibraltar. En 1789, estalló la Revolución Francesa. Los ministros de Carlos IV negociaron para defender a Luis XVI. El comercio colonial se hundió tras la ejecución de Luis XVI. En 1800, se firmó el Tratado de San Ildefonso con Napoleón. En la batalla de Trafalgar (1805), España perdió su poder naval y la posibilidad de defender su imperio colonial.

Política Borbónica en América

Los Borbones reforzaron el control para conseguir más ingresos. Tomaron medidas administrativas, como la introducción del intendente y la formación de un ejército permanente compuesto por criollos y mestizos. Se expulsó a los jesuitas de Paraguay en 1767. Cádiz fue, durante el siglo XVIII, el principal puerto comercial con América. Se obligó a consumir productos de España y a exportar materias primas a la península. Se promovieron compañías de comercio y la introducción de navíos de registro. La mayor presión fiscal, junto con la reducción del poder político de los criollos, provocó protestas.

Baja Edad Media: Crisis de los Siglos XIV y XV

Castilla

Se produjo un aumento del poder de los reyes en Castilla, lo que llevó a la creación de instituciones políticas:

• El Consejo Real, constituido por nobles, eclesiásticos y juristas.
• La Audiencia, con sede en Valladolid.
• Se estableció el sistema de regimientos y se creó la figura del corregidor.
• Las Cortes de Castilla reunían a nobles, eclesiásticos y representantes de las ciudades, quienes aprobaban subsidios.

Las ciudades fueron el principal apoyo de los reyes frente a la nobleza.

Corona de Aragón

En las Cortes de Aragón, el poder de los reyes era menor. La Corona de Aragón estaba formada por tres reinos: Aragón, Cataluña y Valencia. Por eso, los reyes nunca tuvieron tanto poder como los de Castilla. En 1283, las Cortes de Aragón y Cataluña hicieron jurar a Pedro III el Privilegio General, que concedía poderes a los nobles de ambos reinos, incluidos los malos usos. Este sistema se conoce como pactismo. En el siglo XVI, las Cortes Catalanas obligaron al rey a aceptar la existencia de una diputación permanente de las Cortes, la Generalitat.