El Teatro desde Mediados del Siglo XX
1. El Teatro en los Años Cuarenta
El impacto de la Guerra Civil sobre el género teatral fue tremendo. En los años 40 se escribe un teatro realista y comprometido, pero la censura impidió en muchas ocasiones su representación.
1.1. El Teatro Burgués y el Teatro de Humor
El teatro de este periodo está condicionado por la sociedad burguesa del momento y dirigido a su ideología. Representa una realidad falsificada, formalmente es anticuada y desprecia experimentaciones. Desde el punto de vista de las representaciones teatrales, varias son las corrientes:
- El teatro cómico heredero del sainete, lleno de situaciones tópicas y chistes lingüísticos.
- El teatro histórico-político que invitaba a olvidar la realidad inmediata y cantaba glorias y héroes del pasado. Es un teatro paralelo al cine histórico de la época (Alba de América, Locura de amor).
En la creación dramática son dos líneas las que sobresalen en estos años:
- El drama burgués con autores como Joaquín Calvo-Sotelo, José López Rubio, Edgar Neville y el propio Benavente. Ya sean comedias de evasión o dramas ideológicos, defienden valores conservadores, encuadrados en obras de correcta construcción y elegantes diálogos.
- El teatro de humor es lo más interesante del periodo. Enrique Jardiel Poncela tratará de crear una comicidad de lo inverosímil, caracterizada por la ruptura de las formas tradicionales del humor, por su deseo de romper con la lógica, por su huida del tópico y por su libre concepción de la técnica teatral y del espacio escénico. Obras más conocidas: Un marido de ida y vuelta, Eloísa está debajo del almendro.
- Miguel Mihura escribió en 1932 Tres sombreros de copa. El humor cercano al absurdo, la burla corrosiva de los hábitos burgueses y provincianos y la sonrisa dolorosa que provocaron sus situaciones resultaban muy osados cuando fue escrita y también cuando fue representada. Pero Mihura ya se había decantado por comedias como El caso de la señora estupenda, Maribel y la extraña familia o Ninette y un señor de Murcia.
1.2. El Teatro Realista de Protesta y Denuncia
La década de los 50 se abre con tres importantes estrenos: Historia de una escalera de Antonio Buero Vallejo; Tres sombreros de copa de Miguel Mihura; Escuadra hacia la muerte de Alfonso Sastre. Buero y Sastre junto a Lauro Olmo son los nombres claves de esta generación realista.
- Sus temas abordan problemas de obreros o gentes humildes, muchas piezas nunca llegaron al escenario, por lo que puede hablarse de un teatro soterrado.
- Estéticamente, predomina el realismo: la escena imita espacios cotidianos, con rasgos costumbristas, y el lenguaje se esfuerza por reproducir el habla correspondiente a las distintas clases sociales.
Hay diferencias entre los autores. Alfonso Sastre emplea formas y temas diversos: el enfoque metafísico de Cargamento de sus sueños; la denuncia del militarismo en Escuadra hacia la muerte. Por su parte, Lauro Olmo en La camisa crea un drama proletariado con elementos tomados del sainete de Arniches.
1.3. La Obra Teatral de Antonio Buero Vallejo
El dramaturgo de mayor interés es Antonio Buero Vallejo. Su producción, desde Historia de una escalera, está marcada por el compromiso ante los temas humanos más universales ya sean de tipo existencial o social.
- Su género preferido es la tragedia. Con ella pretende la catarsis del espectador ya que le muestra los problemas pero no les ofrece soluciones.
- El diálogo ocupa un papel importante. El lenguaje de los protagonistas se caracteriza por su densidad, hondura y precisión.
- Los aspectos espectaculares del teatro también adquieren importancia. El espacio escénico suele estar descrito con minuciosidad, porque los objetos, su disposición y el ambiente adquieren una significación concreta. En algunas obras, como El tragaluz aparecen varios espacios simultáneamente en escena.
Entre sus obras destacan los dramas históricos, como Un soñador para un pueblo. También son frecuentes los dramas de personajes con taras, cuyas limitaciones físicas simbolizan las limitaciones humanas para enfrentarse con la realidad. El concierto de San Ovidio o La fundación.
2. El Teatro desde los Años 60 hasta la Actualidad
En la década de los 60 surge un movimiento de renovación como el teatro épico de Bertolt Brecht, el teatro underground, el teatro del absurdo.
2.1. Nuevas Formas de Expresión Dramática
Surgen los grupos de teatro independiente cuya actividad renovadora se desarrolla al margen de los circuitos culturales establecidos, a pesar de los obstáculos políticos y económicos que se encuentran. Los grupos más destacados son: Els Joglars, Tábano, Los Goliardos y el Teatro Experimental Independiente.
Características generales de estos grupos:
- La creación colectiva de la obra, en la que todo el grupo aporta ideas para la creación y en la que la improvisación desempeña un papel importante.
- La escasa valoración del texto, que permite potenciar los aspectos más espectaculares del teatro, inspirados en el cabaret, la revista.
- Los enfoques críticos que no se limitan a lo político y a lo social.
- La ruptura de las convenciones escénicas del espacio y tiempo. Se abandona el teatro a la italiana, por ejemplo, buscando la participación del espectador trasladando butacas al patio.
Los autores no olvidados se enfrentaron con más obstáculos ya que continuaron siendo fuertemente críticos y sus novedades estéticas no fueron aceptadas por un público y una crítica muy conservadores. De ahí que podamos hablar de un teatro soterrado o subterráneo.
- Francisco Nieva etiqueta su creación como teatro furioso. El simbolismo, los elementos oníricos y la raíz dadaísta caracterizan obras como La carroza de plomo candente.
- Fernando Arrabal. Su teatro pánico, provocador y rebelde, recoge elementos de las vanguardias y del teatro del absurdo. Los hombres del triciclo se estrenó en España, pero fracasó. Solo a partir de 1977 se conocieron títulos como Pic-nic, Fando y Lis, El cementerio de automóviles y El arquitecto y el emperador de Asiria.
2.2. El Teatro desde 1975
Tras el fin de la dictadura se producen dos tendencias en el teatro español: la primera consistió en montar obras de autores consagrados; la segunda se proponía los textos silenciados del pasado inmediato. Como reacción, se regresa a un tipo de teatro más convencional y accesible al público. Entre los autores más destacados se encuentran los siguientes:
- El autor de más éxito en los años 80 es Antonio Gala quien alterna el simbolismo con dramas realistas o recreaciones históricas. Sus protagonistas son generalmente mujeres y sus temas tratan sobre conflictos individuales: el amor, la soledad. Los verdes campos del Edén, Anillos para una dama y Samarkanda.
- José Luis Alonso de Santos cultiva una comedia que refleja aspectos de la sociedad actual en La estanquera de Vallecas y Bajarse al moro.
- El actor Fernando Fernán Gómez también dentro del realismo alcanzó un triunfo con Las bicicletas son para el verano.
- José Luis Sanchis Sinisterra es un autor que combina el teatro tradicional y las formas contemporáneas, en obras que reflexionan sobre la naturaleza del propio teatro: Ñaque, o de piojos y actores, ¡Ay, Carmela! o Valeria y los pájaros.
El panorama de estos últimos años es variado y cambiante. Predomina el teatro comercial e institucional, pero también surgen autores y grupos que realizan nuevas propuestas escénicas.
Tendencias del teatro actual:
- El teatro de compañías institucionales: realizan montajes de obras consagradas y contribuyen a difundir el patrimonio teatral histórico.
- El teatro comercial: continúan con la tradición de la comedia burguesa.
- El teatro de humor: sigue cosechando éxitos, monólogos cómicos, comedias mudas, adaptaciones de comedias cinematográficas.
- Los nuevos autores: destaca la presencia de mujeres dramaturgas.
- La abundancia de grupos teatrales: sobreviven en difíciles condiciones.
- El teatro musical: este género, prolifera hoy en día con gran éxito. Se adaptan obras internacionales (Cats, Los Miserables) o se crean obras propias (Hoy no me puedo levantar).