Evolución de los Modos de Producción: Del Comunismo Primitivo al Capitalismo y Socialismo

La Secuencia Histórica de los Modos de Producción

La clasificación de los diferentes tipos de sociedades se basa en el grado de desarrollo de las fuerzas productivas y el género de las relaciones de producción resultantes de estas. Se distinguen cinco estadios de la evolución social hasta el presente:

  1. La comunidad primitiva: Destaca por la propiedad colectiva de la tierra, denominado comunismo primitivo.
  2. El modo de producción asiático: Las tierras son propiedad de la autoridad política suprema, normalmente de un déspota (despotismo oriental).
  3. El modo de producción antiguo o esclavismo: Basado en el antagonismo entre hombres libres y esclavos.
  4. Modo de producción feudal: Oposición entre señores o nobles y siervos.
  5. El modo de producción burgués o capitalismo: Se caracteriza por un desarrollo de las fuerzas productivas más avanzado que todos los demás tipos de sociedad, por la propiedad privada de los medios de producción y por el hecho de que los productores son propietarios de su fuerza de trabajo. Según Marx, el capitalismo cavará su propia tumba y de la oposición entre clase burguesa y proletariado emergerá un nuevo modo: el comunismo o socialismo.

El Capitalismo: Contexto Estático o Sincrónico

Adopta la teoría del valor-trabajo, según la cual el valor de las cosas viene determinado por la cantidad de trabajo necesario para producirla, por la cantidad de horas de trabajo necesarias para producir. Todas las mercancías se compran y venden por su valor y no pueden producir otro valor superior, excepto la fuerza de trabajo. El trabajo se compra por su valor y produce un valor superior al valor del trabajo. A la diferencia entre el valor del trabajo y el valor de la fuerza de trabajo, Marx la llama plusvalía.

Teoría de la Plusvalía

Se le denomina a la explotación. De acuerdo con la teoría, los beneficios empresariales tienen un origen en esta explotación del obrero y el capitalismo sería un sistema económico constitutivamente basado en la explotación, y esta no puede suprimirse más que destruyéndolo y sustituyéndolo por el socialismo.

El Capitalismo: Contexto Dinámico – Leyes del Movimiento del Sistema Capitalista

Marx estaba interesado en estudiar las leyes de movimiento de la inevitable marcha del capitalismo hacia su colapso y la victoria del comunismo revolucionario.

Primera Ley: Acumulación

La inversión continua por los capitalistas de parte de su ganancia en nueva producción. Esta acumulación continua tiene tres efectos nocivos sobre el sistema económico:

  1. Concentración del capital: Tendencia a la concentración de la producción en fábricas y empresas cada vez mayores. Para ampliar la escala de la producción, las empresas de mayor tamaño eliminan constantemente a las menores.
  2. Centralización del capital: Las empresas más pequeñas son absorbidas por las gigantes y eso tiende a la monopolización de la industria.
  3. Tasa decreciente de beneficio: Ya que, según Marx, todo el beneficio proviene de la explotación de la fuerza de trabajo del obrero y no del capital, este no aporta nada al beneficio del capitalista. La acumulación de más capital baja necesariamente su tasa de beneficio, razón por la cual el beneficio total queda dividido por el total del capital invertido.

Segunda Ley: Empobrecimiento

Los capitalistas de fábricas pequeñas que van siendo eliminadas se convierten en proletarios que pasan a trabajar en las fábricas mayores que las sustituyen. Entonces, los capitalistas son cada vez menos numerosos y más pobres, pues los salarios equivalen a lo estrictamente necesario para vivir. El paro es una característica normal del capitalismo, es lo que permite mantener los salarios a su justo nivel, ya que hay obreros que pedirán sueldos más altos.

Tercera Ley: Crisis y Depresiones

Cada vez más intensas hasta acabar en el colapso del sistema y la revolución proletaria consiguiente, son el resultado del subconsumo de los obreros. La producción capitalista supera la capacidad de consumo de los explotados. Las crisis no provienen de una falta de productividad, sino de un exceso de ella, de una superabundancia de la oferta que los consumidores no son capaces de absorber.

Segunda Teoría: Tasa Decreciente del Beneficio

El impulso incesante hace que los capitalistas acumulen, esto produce en la tasa de beneficio una tendencia a largo plazo de caída, pero cuando el beneficio decrece por debajo de determinada tasa se interrumpe el crecimiento del capital y causa una crisis. Esto es, el cese de la inversión de capital conduce a una recesión y se amplifica a una depresión general.

Tercera Teoría: Desproporcionalidad

La causa de la crisis del capitalismo reside en la incapacidad de este de ofrecer un mecanismo de coordinación de la producción y el intercambio que son caóticas. La propia dinámica del capitalismo es la autodestrucción y, de este modo, el capitalismo prepara el camino al socialismo. La concentración de capitalistas, al hacer cada vez menor el número de empresarios y mayor el de proletarios, tiene como resultado que el mantenimiento económico sea menor y que los que quedan desaparezcan.

Crítica

La teoría del valor-trabajo ha sido arrinconada por la economía moderna y se ha venido abajo la teoría de la plusvalía como producto de la explotación de los obreros. Por lo que las leyes tendenciales no se han verificado. El proletariado ha visto mejorar su nivel de vida y tampoco se ha realizado la división de la sociedad en dos únicas clases.