Descripción

Esta escultura de bulto redondo representa a un David adolescente, de pie y en cuerpo entero, tras su victoria sobre Goliat. El joven pisa la cabeza decapitada del gigante con una expresión pensativa, sosteniendo en sus manos la espada de Goliat y la honda con la que lo derribó. Se aprecia un marcado contraste entre la serena firmeza del rostro de David y el gesto desmadejado de Goliat. David luce un sombrero de paja típico de la Toscana, del que asoman mechones de cabello, y una corona de hojas de amaranto, símbolo del heroísmo griego. Donatello elige representar el pasaje bíblico del enfrentamiento entre David y Goliat en el momento posterior a la batalla, cuando el joven ya ha salido victorioso, de ahí su pose relajada y en contrapposto.

La obra fue realizada en bronce fundido y pulido. Originalmente, se ubicó en el patio del palacio de los Médicis, pero tras la expulsión de Piero de Médicis, fue trasladada al patio del Palazzo Vecchio, sede de la señoría de la república. Actualmente, se encuentra en el museo del Bargello de Florencia.

Elementos Formales

La textura de la superficie es lisa y pulida, imitando la apariencia de la piel humana, lo que aporta verosimilitud a la escultura y una sensación de blandura y tersura.

La escultura puede ser contemplada desde múltiples puntos de vista. El contrapposto y la cabeza ligeramente girada rompen con la ley de la frontalidad.

La postura de la figura transmite una composición reposada y serena, casi estática, reflejando una gran serenidad interior tras la victoria.

Elementos No Formales

La composición es plenamente figurativa, buscando la belleza ideal en la imagen de un David adolescente. El cuerpo de David se representa como el de un dios olímpico, un joven de anatomía blanda, apenas desarrollada, que adopta la postura clasicista del contrapposto, apoyando el peso del cuerpo sobre la pierna derecha, cuya cadera sobresale recreando la curva praxiteliana. El rostro imberbe del joven David expresa serenidad, contrastando con el vencido Goliat, cuyo rostro barbudo, de facciones marcadas y maduras, contrasta con las de su oponente.

Clasificación de la Obra

La obra pertenece al Renacimiento italiano, específicamente al periodo del Quattrocento.

Es el David de Donatello, realizado por el autor alrededor de 1440.

Contenido y Función

Esta obra, que recrea el momento posterior a la lucha bíblica entre David y Goliat, marcó el regreso del desnudo como tema artístico tras casi mil años de ausencia en la historia del arte occidental. El tema bíblico se convierte en una excusa para representar el desnudo como lo hacían los escultores clásicos. David aparece como un Apolo, y la influencia de Praxíteles es evidente tanto en la pose como en el modelado del cuerpo, de ambigua sexualidad.

Algunos interpretan el encargo de esta obra por parte de los Médicis a Donatello como una alusión al enfrentamiento entre Florencia, representada por el joven David con el sombrero característico de los campesinos florentinos, y el ducado de Milán, representado por la cabeza decapitada de Goliat. La inscripción en la obra confirma esta teoría: “Pro Patria fortiter dimicantibus etiam adversus terribilissimos hostes di i praestant auxilium“, que significa “A los que valientemente lucharon por la madre patria, los dioses darán su ayuda incluso ante los más terribles enemigos“.

Más allá de la interpretación política, el tema de David, recurrente en el Renacimiento y el Barroco, simbolizaba el triunfo de Cristo sobre la muerte y el pecado.

Contexto Histórico

La obra se enmarca en la plenitud del Quattrocento. Fue un encargo de Cosme de Médicis, prominente figura florentina que, al devolver el poder a la República de Florencia, se identificó con el personaje bíblico. Se trata de un símbolo de la victoria sobre sus enemigos, asociando a David con la figura de Cosme regresando del exilio como un triunfador.

El tema de David es un clásico del arte italiano. Varios artistas aportaron su visión del tema. El de Verrocchio es más audaz y viste a su David, el de Miguel Ángel simboliza la tensión previa al estallido, y el de Bernini (ya Barroco) representa a David en el instante fugaz en que dispara su honda.

El Autor

El autor, Donato di Niccolò di Betto Bardi (1386-1466), conocido como Donatello, es el escultor más representativo del Quattrocento italiano. Discípulo de Ghiberti, a quien llegó a superar, y protegido de Brunelleschi (con quien estudió las ruinas clásicas de Roma), es un renovador de la escultura europea, especialmente de la técnica del fundido en bronce. Se dedicó al estudio del ser humano como centro y razón de ser del Universo, tratando de penetrar en su psicología. Sus obras más destacadas son la Cantoría de la Catedral de Florencia, el David aquí comentado, el San Jorge de Orsanmichele (en Florencia) y la estatua ecuestre del Condottiero Gattamelata (en Padua).

El periodo histórico en el que se enmarca esta obra tiene como protagonista al hombre (antropocentrismo), el humanismo, la recuperación de los saberes clásicos (filosofía, historia, latín, griego, etc.) y la aparición del estado moderno. El David de Donatello es un perfecto resumen de los valores y saberes que el Renacimiento pretende recuperar.