Naturaleza: Definición y Alcance
La naturaleza se refiere al conjunto de todos los seres que forman el universo. Son considerados naturales porque no han sido producidos por el hombre. La naturaleza englobaría todo lo no artificial. Un ordenador, por ejemplo, no sería parte de la naturaleza porque es una fabricación propia del ser humano. Una segunda acepción del término hace referencia al principio intrínseco que caracteriza a un ser y lo distingue de otro. Gracias a ese principio intrínseco, los seres actúan de un modo determinado según su naturaleza.
Naturaleza y Ser Humano: Una Relación Compleja
En la primera definición ofrecida —naturaleza como conjunto de todos los seres que forman el universo— está incluido el ser humano porque forma parte de ella y está sujeto a las leyes que la naturaleza marca. No obstante, el ser humano es libre e inteligente y, aunque no pueda suprimir las leyes de la naturaleza que le afectan, sí puede transformarlas. En la segunda definición —naturaleza como principio intrínseco que caracteriza a un ser o grupo de seres— también está incluido el ser humano, porque posee ese principio intrínseco que le hace comportarse como tal y diferenciarse de otros seres. Habría que discutir, en primer lugar, qué se entiende por naturaleza humana, es decir, determinar con claridad cuál es ese principio común a todos los seres humanos y qué manifestaciones tiene. Y, en segundo lugar, debemos preguntarnos por qué el ser humano no se muestra capaz de ser consecuente con sus capacidades y se deja llevar.
Diferencias entre Seres Inertes y Seres Vivos
Una diferencia fundamental radica en el movimiento. Los seres inertes no son capaces de moverse por sí mismos, cosa que el ser vivo sí puede hacer, por lo que posee un grado de perfección superior al de los inanimados. Otra diferencia clave es la inmanencia, es decir, aquella acción que permanece en los seres vivos después de ejecutarla. La inmanencia está relacionada con la unidad. Si un árbol pierde sus hojas, no deja de ser un árbol; pero, sin embargo, si un ser humano pierde su corazón, ya no sería un ser humano. Por tanto, la unidad en los seres inertes es relativa y la inmanencia es facultad exclusiva de los seres vivos.
Teoría Aristotélica del Alma: Grados de Perfección
Los grados de perfección propios del ser humano están relacionados con la forma de los seres vivos: el alma. Según Aristóteles, el alma distingue varias funciones: nutritiva, sensitiva e intelectiva. Algunos seres vivos poseen tan solo una de estas facultades, la nutritiva, que es propia de las plantas. Gracias a esto, las plantas son capaces de alimentarse por sí mismas. En el reino animal, aparte del alma nutritiva, también existe el alma sensitiva, que permite a los animales tener cierto conocimiento sensible de la realidad, así como el movimiento. En los seres humanos se reúnen estos dos tipos de almas más la intelectiva, que da al hombre la capacidad de pensar, querer, atender, etc.
Características Distintivas del Ser Humano
- El ser humano es capaz de expresar opiniones y conocimientos a través del lenguaje, que se diferencia de posibles lenguajes animales.
- Forma parte de la naturaleza, aunque es capaz de adaptarla a sus necesidades.
- Tiene conciencia científica y desarrolla aplicaciones técnicas.
- Posee la capacidad de relacionarse con los demás de manera afectiva: el conocimiento emocional.
- Es un ser metafísico que tiene conciencia de sus saberes y se cuestiona el porqué último de su existencia.
- Posee un cuerpo que le permite la realización de su capacidad intelectiva. Sin el cuerpo no sería posible que el ser humano pudiese pensar, por lo que sin uno el otro no puede existir.
Libertad Humana y Condicionamiento Natural
El ser humano es libre a pesar de su condición natural. Aunque forma parte de la naturaleza y esta no es libre, el hombre es un ser vivo privilegiado ante el resto de animales. Posee unas características propias que lo hacen distinto del resto. Por esta razón, aunque el ser humano esté condicionado por la naturaleza, no está determinado por ella. Por ejemplo, las leyes de la naturaleza dicen que todos los cuerpos son atraídos hacia la tierra (la ley de la gravedad). Sin embargo, el ser humano ha conseguido, a través de su conocimiento intelectivo y científico, ser capaz de volar, lo que demuestra que, aunque la naturaleza te condicione a que tus pies estén siempre tocando el suelo, no estás determinado a que no puedas permanecer y desplazarte en las alturas.
La Carga Genética y la Libertad
La carga genética no anula la libertad humana. La carga genética es algo que modifica o diferencia a cada individuo de otro en sus rasgos físicos y, por tanto, naturales, con lo que no altera ni anula la libertad, como ya se ha dicho anteriormente.
Relación entre Cultura y Sociedad
La cultura y la sociedad van unidas porque el hombre es un ser que no puede subsistir en soledad y, por tanto, necesita la compañía de sus semejantes para realizar cualquier manifestación humana y, en consecuencia, social y cultural. Por el mismo motivo por el que ningún ser humano piensa igual, existe una pluralidad de culturas, que también es debida en gran parte a los diferentes lugares geográficos en que se dan las sociedades. Por ejemplo, no piensan igual sobre el trato de la mujer las tribus de algunos lugares de África que los países islámicos o, en el otro extremo, la sociedad occidental. Por tanto, la cultura es relativa a un lugar y tiempo concretos.
Homogeneización Cultural en la Era Digital
Hoy en día, gracias a los avances técnicos, la comunicación entre cualquier punto es posible en muy corto espacio de tiempo. Una canción puede ser la más escuchada en todo el mundo, aunque no por eso todos los seres humanos comparten la misma cultura. Al mismo tiempo que todo el planeta puede estar de acuerdo en tal o cual cuestión, también surge de manera natural el amor por las costumbres propias, por lo que la pluralidad en la cultura es algo inevitable y natural.
Diferencias Culturales y Etnocentrismo
Las diferencias culturales pueden derivar en etnocentrismo. Lo que para una cultura puede ser símbolo de honor, para otras se puede presentar como un signo de aberración, aunque esto es llevado al extremo. Normalmente, toda cultura que provenga de la manifestación humana debe ser respetable tanto como otra cualquiera.
Culturas Heterogéneas y Convivencia
Debido a las inmigraciones, varias culturas coexisten en los mismos espacios geográficos y sociedades. De esto podemos observar el carácter de apertura hacia otros modos de pensar del ser humano, que se enriquece y engrandece de este hecho. Hay un ambiente cordial y pacifista, aunque hay hechos culturales no aceptados por todas las culturas, como por ejemplo la circuncisión femenina o la libertad de los hombres a venderlas, que suponen la degradación de la mujer.
Características que Definen la Cultura
- La cultura se transmite a través del lenguaje, ya sea oral, escrito, manifestaciones artísticas como cuadros y música, juegos y gestos, que no son otra cosa que símbolos. Por lo que decimos que la cultura es simbólica.
- La cultura también es tradición e historia, pues se transmite de unos a otros en una misma sociedad a lo largo de los siglos.
- Implica un proceso educativo con contacto con toda la sociedad y es, por esto, una derivación del hecho cultural humano.
- Como la naturaleza es aprovechada por el hombre para su subsistencia, el ser humano la venera y cuida. Por tanto, decimos que la cultura es ecológica, aunque no es el ser humano dueño de esta, sino su benefactor.
Cultura y Naturaleza: ¿Complementarias o Incompatibles?
La cultura es un producto humano y la utiliza como herramienta para adaptar el medio en el que vive a sus necesidades, pues no es un ser adaptado, mientras que animales y plantas sí son capaces de adaptarse. A través del cultivo de su mente, ha construido casas para hacer su vida más confortable, ha ido creando mobiliario y hasta los cuadros y esculturas son expresión de la cultura, que no es más que algo natural, ya que procede del hombre y este es natural. Así que todo lo que proviene de la naturaleza es natural, aunque en el caso de la expresión cultural humana se puede decir que es superior a la propia naturaleza, pues gracias a la cultura podemos tener una visión más amplia de la realidad. Por ejemplo, gracias a la ciencia que estudia el universo y a la técnica para conseguir vehículos que puedan viajar por el espacio, tenemos una visión de nuestro planeta que, en un hipotético estado natural del ser humano, no hubiésemos podido observar. Por tanto, la cultura es una prolongación de la naturaleza y no algo antinatural.