El corazón delator
Contexto histórico-literario
La época de Edgar Allan Poe coincide con el auge del Romanticismo, un movimiento ideológico y cultural del siglo XIX caracterizado por la libertad artística. La Revolución Francesa (1789) sienta las bases de este movimiento con las ideas de libertad, igualdad y fraternidad. El liberalismo se convertirá en la gran doctrina del siglo XIX, que defenderá la iniciativa privada y la ampliación del número de personas con derecho a voto. Aparece también una exaltación de los valores nacionales durante el Romanticismo. Así, la Guerra anglo-estadounidense de 1812, en la que los Estados Unidos intentan conquistar las colonias canadienses del Reino Unido, significa el nacimiento de un espíritu de unidad nacional en la joven nación. El comienzo del siglo XIX viene marcado por el poder militar de Napoleón Bonaparte, hasta su derrota en Waterloo (1815). Tras su caída y el Congreso de Viena (1815) se restablecen antiguas monarquías. A partir de ahora hasta mediados del siglo XIX la dinámica política se caracteriza de modo general por los enfrentamientos entre las tendencias absolutistas y liberales. Las ansias de libertad se extienden por todo el mundo. Desde el punto de vista social hay que destacar el relevante papel que irá adquiriendo la burguesía tanto en el orden político-ideológico como en el económico ya que irá desplazando a la nobleza y será la nueva clase dominante.
El Romanticismo se caracteriza por aspectos como la libertad artística, el rechazo de toda norma, la rebeldía, la evasión, el subjetivismo, la presencia de lo sobrenatural, del misterio… Estados Unidos recoge la influencia cultural europea, si bien es verdad que la literatura estadounidense tiene su propio signo. Poe será quien abra paso a una generación de autores estadounidenses que llevan su experiencia vital a la literatura. Entre ellos podemos destacar a los novelistas Hawthorne con La letra escarlata; Melville con Moby Dick; Mark Twain, con Las aventuras de Tom Sawyer y Las aventuras de Huckleberry Finn. En la poesía norteamericana sobresale Walt Whitman con Hojas de hierba.
Edgar Allan Poe
Edgar Allan Poe (1809 – 1849) fue un escritor, poeta, crítico y periodista romántico estadounidense, generalmente reconocido como uno de los maestros universales del relato corto. Sus padres murieron cuando era niño. Fue recogido por un matrimonio adinerado de Richmond, Virginia. Pasó un curso académico en la Universidad de Virginia y posteriormente se alistó, también por breve tiempo, en el ejército. Sus relaciones con los Allan se rompieron en esa época, debido a las continuas disputas con su padrastro, y acabó desheredándolo. Su carrera literaria se inició con un libro de poemas Tamerlane and Other Poems (1827). Por motivos económicos, pronto dirigió sus esfuerzos a la prosa, escribiendo relatos y crítica literaria para algunos periódicos de la época; llegó a adquirir cierta notoriedad por su estilo cáustico y elegante. Debido a su trabajo, vivió en varias ciudades. En Baltimore, en 1835, contrajo matrimonio con su prima Virginia Clemm, que tenía trece años de edad. En enero de 1845, publicó un poema que le haría célebre: “El cuervo”, escrito en forma de diálogo entre el pájaro y el propio autor. Su mujer murió de tuberculosis dos años más tarde. Murió el 7 de octubre de 1849, en la ciudad de Baltimore, cuando tenía apenas cuarenta años de edad. La causa exacta de su muerte nunca fue aclarada. La figura del escritor, tanto como su obra, marcó profundamente la literatura de su país y puede decirse que de todo el mundo. Ejerció gran influencia en la literatura simbolista francesa y, a través de ésta, en el surrealismo. Como narrador son especialmente importantes sus Narraciones extraordinarias. Los relatos más conocidos son: “Manuscrito hallado en una botella”, “El escarabajo de oro” (1843), “El corazón delator” (1843), “El gato negro” (1843), “La caída de la casa Usher” (1839) o los relatos policíacos “Los crímenes de la calle Morgue” (1841) y “La carta robada” (1844).
El corazón delator
En este cuento se narra cómo el protagonista se vuelve loco por el latir del ojo de un anciano al que cuida y cómo acaba por matarlo y descuartizarlo.
En cuanto al contenido de las obras de Poe predomina el terror, la fantasía, el misterio… En el caso de este cuento lo terrorífico se encuentra en el ojo del anciano, por eso el protagonista lo mata. El autor comienza indicando que no está loco. Para demostrarlo se enorgullece de su astucia para acometer el crimen de un anciano con el que convive. Comenta que la semana antes de matarlo fue especialmente amable con él. Al fin, una noche el narrador entra en la habitación del viejo y este se despierta. El protagonista enciende la linterna y al descubrir el ojo ahoga al viejo con un colchón mientras escucha los latidos de la víctima. El cadáver es descuartizado y escondido bajo las tablas del suelo de la casa. La policía acude a la misma. El asesino percibe los latidos del anciano cada vez más fuertes y pensando que los policías también los están escuchando y que se intentan burlar de él confiesa su crimen. Los temas que predominan en el cuento son la locura y la maldad del protagonista.
Podemos encontrar los siguientes aspectos formales:
- Una libertad de creación, alejada de cualquier regla, norma o precepto.
- La presencia del “yo” que conlleva a un mayor individualismo.
- Hay un deseo de evasión, provocado por el choque entre el escritor y el mundo que le rodea.
Este relato como todos los de Edgar Allan Poe destaca por su perfección formal, su dosificación de la intriga, por la capacidad de sorprender. Destaca también por el ambiente que crea, capaz de captar con fuerza al lector.