Evolución de la Producción Audiovisual y Radiodifusión: Adaptación a las Demandas Sociales

Relación entre la Evolución Histórica de la Producción Audiovisual y la Radiodifusión con las Necesidades y Características de los Productos Demandados por la Sociedad

Los inicios de la producción audiovisual tuvieron lugar una noche de 1895, cuando se organizó una demostración en el Gran Café de París, con la asistencia de 33 personas. Los hermanos franceses Lumière presentaron en público su invento, ofreciendo la primera proyección cinematográfica.

Se les ofrecieron grandes sumas de dinero para comprar su invento, pero rechazaron las propuestas ya que se dieron cuenta de la ventaja financiera que podrían obtener. Así, el cine sería explotado por concesionarios.

Para lanzar su cinematógrafo, proporcionaron gratuitamente los aparatos, las películas y hasta los operadores.

Georges Méliès quiso comprarles un cinematógrafo, pero ellos se negaron. Méliès construyó su propia máquina cinematográfica y proyectó las primeras películas en su teatro. Su estilo evolucionó rápidamente, creando películas parecidas a sus espectáculos de ilusionismo. Fue pionero en la utilización del truco de sustitución de elementos mediante el parado de la cámara, y en la exposición múltiple del negativo o doble sobreimpresión. Creó el primer estudio de cine, en el que se utilizaron sistemas mecánicos para ocultar mecanismos de puesta en escena.

A su vez, los hermanos Lumière formaron una empresa que contaba con una docena de empleados en 1884. En la primera década del siglo XX surgieron varios estudios en Estados Unidos y Europa. Nació así la industria más amplia y próspera de la humanidad.

En América se creó la industria de Hollywood, que desde el principio concentraba la producción, distribución y exhibición de las películas. En 1920, Estados Unidos produjo 796 largometrajes. En este año, el 80% de las películas proyectadas en Europa fueron estadounidenses. En los años 30 y 40, la época dorada de Hollywood, se forjó un sistema de estudios que, gracias al control global del mercado, constituye el origen de la posterior hegemonía del cine norteamericano. El potencial de los estudios de Hollywood radicaba en la integración vertical de todo el proceso de creación de una película. La industria cinematográfica estadounidense logró desarrollar un complicado sistema para controlar la producción, la distribución y la exhibición de las películas.

Durante los años 40, los productores independientes comenzaron a hacerse notar debido al aumento del público en las salas. Cada vez eran menos los actores que firmaban contratos en exclusiva con algún estudio, y llegados a 1950 casi todas las primeras figuras del cine contaban con su propia productora.

A pesar del éxito de los espectaculares formatos panorámicos, la popularidad y la influencia de Hollywood decayeron entre las décadas de los 50 y 60. Los estudios, dada la presión de las leyes antimonopolio, se desprendieron de las salas de exhibición y de otras empresas asociadas. En este progresivo declive tuvo mucho que ver la llegada de la televisión, que hizo revisar esquemas que hasta entonces parecían incuestionables para la industria. La televisión se convirtió en un duro competidor en cuanto a la forma de emplear el tiempo de ocio. Dada la progresiva pérdida de espectadores del cine, muchos técnicos cinematográficos se pasaron al mundo de la televisión. La industria comenzó a realizar telefilmes con el fin de adecuarse económicamente a los cambios y a vender para la televisión las películas antiguas.

En la actualidad, en el cine han cambiado las herramientas y los efectos que se utilizan. Con la elaboración de películas como el clásico “La guerra de las galaxias” de George Lucas en 1977, las técnicas digitales experimentaron un excelente desarrollo. Luego, en 1993, Jurassic Park causó un gran impacto entre el público por sus efectos digitales. La tecnología se desarrolló mucho más y se crearon producciones tan impresionantes como Titanic, Matrix, Pearl Harbour o El Señor de los anillos. Más recientemente, en el caso de Avatar, fue otro avance tecnológico el que contribuyó significativamente: las producciones en 3D.

Con la llegada del cine digital, la distribución será el sector que sufrirá una mayor transformación. La transmisión del cine por tecnología digital ya se está llevando a cabo. La compañía de telecomunicaciones Cisco y la cinematográfica 20th Century Fox realizaron en junio del 2000 el primer envío de una película, de costa a costa de los Estados Unidos, a través de una red IP diseñada con la última tecnología en cuanto a capacidad y seguridad. La experiencia permitió proyectar una película que se estaba transmitiendo desde el otro extremo de los Estados Unidos. Se trata de un gran avance en la industria cinematográfica, ya que se sustituirán los proyectores mecánicos por proyectores digitales capaces de emitir imágenes de alta definición. Así, los cines recibirán cada película y copiarán su contenido en su propio servidor.