Arquitectura Española del Renacimiento
Panorama Histórico Cultural
El Renacimiento comenzó a introducirse en España desde Italia durante el reinado de los Reyes Católicos, desarrollándose luego durante los reinados de Carlos V y Felipe II en el siglo XVI. En el terreno político, lo más destacado fue la unión de los reinos de Castilla y Aragón; la integración de Navarra y Granada dentro del reino de Castilla; el reforzamiento de la autoridad real frente a las cortes, los municipios, las órdenes militares y la nobleza; la creación del tribunal de la Inquisición, etc.
En el terreno cultural, el desarrollo del humanismo se vio favorecido por la expansión de la imprenta, la fundación de nuevas universidades y la difusión del erasmismo antes de que las obras de Erasmo fueran condenadas por el Concilio de Trento. Entre los principales humanistas españoles destacan Fernando Rojas, a quien se le atribuye La Celestina; Garcilaso de la Vega; el poeta Juan Boscán; en la literatura mística, Juan de la Cruz, fray Luis de León…
Características Generales
La introducción del Renacimiento en España fue consecuencia de las estrechas relaciones mantenidas con Italia. La implantación de este estilo se vio favorecida por la llegada de artistas italianos a España y por la formación que adquirieron en Italia algunos artistas españoles.
Este nuevo estilo tuvo que luchar con el gótico y el mudéjar para implantarse. La arquitectura española sigue los pasos de la italiana. Los dos primeros tercios del siglo XVI corresponden al quattrocento italiano. Este periodo se denomina en España Plateresco. El último tercio del siglo XVI se corresponde con el cinquecento italiano y se denomina estilo Herreriano.
Durante el Renacimiento se construyeron una gran variedad de edificios, tanto religiosos como civiles.
La primera etapa del Renacimiento se caracteriza por la riqueza decorativa que cubre las fachadas. Durante esa época se usan mucho las columnas abalaustradas, que tienen un carácter decorativo. Como elementos decorativos destacan los grutescos, los emblemas, los festones, florones…
Evolución y Etapas. Ejemplos más Significativos.
Primer Tercio del Siglo XVI (Plateresco)
Durante el primer tercio del siglo XVI se desarrolló el estilo plateresco. Lo inició el arquitecto Lorenzo Vázquez, que realizó una serie de obras para la familia Mendoza. En Toledo destaca Pedro Gumiel, arquitecto que trabajó para el Cardenal Cisneros y que realizó la sala capitular de esta catedral. También en Toledo trabajó Enrique Egas, que proyectó el Hospital de Santa Cruz. Este edificio se convirtió en modelo para otros hospitales. Similares a esta construcción son los hospitales de Granada, Sevilla y Santiago. En Ávila trabajó Vázquez de la Zarza, que realizó la decoración del trascoro de la catedral. En Burgos, Francisco de Colonia realizó la Puerta de la Pellejería en la catedral. En Sevilla, Diego de Riaño realizó la fachada del ayuntamiento.
Segundo Tercio del Siglo XVI (Plateresco Purista)
Durante el segundo tercio del siglo XVI se desarrolló la etapa purista del Plateresco, que se caracteriza por una mayor pureza o sencillez en cuanto a la decoración. Otra cumbre de Rodrigo Gil de Hontañón es la fachada de la Universidad de Alcalá. En Burgos, Diego de Siloé realizó la Escalera Dorada de la catedral. Andrés de Vandelvira trabajó fundamentalmente en la provincia de Jaén. En Granada, Pedro Machuca realizó el Palacio de Carlos V en la Alhambra. Alonso de Covarrubias realizó en Toledo el Hospital de Afuera.
Último Tercio del Siglo XVI (Herreriano)
En el último tercio del siglo XVI se desarrolló el estilo Herreriano. Este estilo se caracteriza por la disminución de los elementos decorativos y el triunfo de unas estructuras arquitectónicas de líneas severas y sencillas. El edificio más representativo es el Monasterio de El Escorial, que se caracteriza por su severidad y monumentalidad. Las obras estuvieron dirigidas por Juan Bautista de Toledo y, después de su muerte, por su ayudante Juan de Herrera, creador del estilo Herreriano, caracterizado por la ausencia de elementos decorativos en los muros exteriores, el interés por los volúmenes y formas geométricas… Herrera también proyectó la Catedral de Valladolid y la Lonja de Sevilla. Entre los continuadores de este estilo destaca Francisco de Mora, que también trabajó en la construcción del Monasterio de El Escorial.
Escultura Española del Renacimiento
Panorama Histórico Cultural y Características Generales
La entrada del Renacimiento en España estuvo condicionada por las estrechas relaciones políticas entre España e Italia. A esto hay que añadir la formación de artistas españoles en Italia y la llegada de escultores renacentistas a España.
Como materiales se utiliza el bronce, la piedra, el mármol y el alabastro en los sepulcros, la madera (especialmente de pino) en los retablos y la de nogal en las sillerías del coro. La escultura de madera generalmente va policromada. Normalmente se doran y se pintan las vestiduras. Las partes desnudas se pintan al óleo del color de la carne.
En cuanto a los tipos de esculturas, principalmente destacan los retablos, tumbas y sillerías del coro. El retablo se decora con escenas del Antiguo y Nuevo Testamento. Las sillerías del coro se cierran habitualmente por el lado que da al altar por medio de una reja. Las sillerías constan de dos pisos de asientos. Las tumbas pueden ser de exentas o de pared. El muerto es representado en forma yacente y la muerte se representa como algo suave y se alude a ella por medio de símbolos. La temática de la escultura es mayormente de índole religiosa, aunque también se cultivan los temas mitológicos o profanos.
En el primer tercio del siglo XVI, la escultura mantiene un marcado goticismo. En el segundo tercio del siglo XVI, la escultura adopta las formas renacentistas. Finalmente, en el último tercio del siglo XVI, el arte se hace más sereno y equilibrado.
Evolución y Etapas. Obras más Representativas
Primer Tercio del Siglo XVI
Durante el primer tercio del siglo XVI trabajaron en España algunos artistas italianos. Entre los escultores españoles destaca Vasco de la Zarza; su principal obra es el sepulcro conocido como El Tostado. Bartolomé Ordóñez realizó la sillería del coro de la Catedral de Barcelona. Diego de Siloé, arquitecto y escultor, trabajó junto con Vigarny en el retablo de la capilla del Condestable en la Catedral de Burgos y realizó el sepulcro de Alonso Fonseca en la iglesia de Santa Úrsula en Salamanca.
Segundo Tercio del Siglo XVI
En el segundo tercio del siglo XVI destaca en la ciudad de Valladolid:
- Alonso Berruguete: Trabajó en el retablo de Mejorada del Campo, en el sepulcro del Cardenal Tavera… Como escultor estuvo influido por Donatello, Miguel Ángel, Da Vinci y por la escultura de la antigüedad clásica del Laocoonte.
- Juan de Juni: Estuvo influido por el arte francés, italiano y español. Se le considera un antecedente de la escultura barroca. En sus obras destacan sus rostros expresivos, angustiados y apasionados. Sus composiciones escultóricas también destacan por su simetría y pronunciados escorzos. Entre sus obras sobresale El Entierro de Cristo.
- Gaspar Becerra: Pintor y escultor, se caracteriza por sus figuras muy musculosas. Su principal obra es el retablo de Astorga. Como artista va a poner las bases para el desarrollo del manierismo en España.
Último Tercio del Siglo XVI
En el último tercio del siglo XVI, en la escultura, surgió en la corte un foco artístico cortesano que tuvo como centro los trabajos desarrollados en torno a El Escorial. Este foco se caracteriza por ser un arte más frío. Así, los retablos adquieren un esquema monumental de dos, tres o cuatro cuerpos, los grutescos desaparecen de los frisos y columnas, y la arquitectura del retablo se vuelve más sencilla. En las imágenes hay una mayor serenidad y se busca una belleza ideal. Dentro de la corte destacan Pompeyo y León, que se distinguen por sus retratos de Carlos V y Felipe II.