La Primera Guerra Mundial (1914-1918)
El conflicto bélico conocido como la Primera Guerra Mundial se desarrolló entre 1914 y 1918, con repercusiones en los cinco continentes. La guerra estalló en Europa, inicialmente entre las potencias europeas, muchas de las cuales poseían colonias en todo el mundo. Esto provocó enfrentamientos en otros continentes, con la intervención de Japón y Estados Unidos, convirtiendo un conflicto europeo en una guerra mundial.
El Inicio de la Guerra
El detonante se produjo en los Balcanes en 1914, con el asesinato del archiduque Francisco Fernando de Habsburgo y su esposa en Sarajevo. Los autores del atentado pertenecían a círculos terroristas y nacionalistas eslavos. Este hecho proporcionó a Austria-Hungría la excusa para exigir a Serbia una serie de condiciones que implicaban la intervención austriaca en sus asuntos. La negativa serbia llevó a Austria-Hungría a declarar la guerra. A partir de esta declaración, el resto de las potencias se sumaron a la contienda en cumplimiento de alianzas y acuerdos previos.
Causas de la Guerra
Las causas reales del estallido de la guerra se resumen en:
- Una diplomacia occidental basada en el uso de la fuerza.
- Gobiernos generalmente autoritarios y poco democráticos.
- Intereses económicos, tanto en Europa como en ultramar, considerados intereses nacionales.
- Una constante carrera armamentística entre las potencias.
La Guerra Total y sus Consecuencias
Este conflicto bélico marcó el inicio de la era de la guerra total, donde todos los recursos de un país se destinaban a la victoria. El objetivo era la rendición incondicional del enemigo.
Consecuencias Económicas y Sociales
La mayoría de los países beligerantes implementaron una economía de guerra planificada y dirigida por el estado. Esto aumentó el poder de las organizaciones obreras. La financiación del conflicto generó un gran endeudamiento, tanto con particulares como con países extranjeros.
Secuelas Físicas y Psicológicas
Las secuelas fueron terribles. La Primera Guerra Mundial marcó el inicio de las limpiezas étnicas, genocidios y deportaciones de minorías nacionales o culturales.
Crisis Ideológica
Se impuso una censura total sobre la actividad intelectual. El movimiento socialista y pacifista se dividió entre quienes apoyaban a sus gobiernos y quienes buscaban una revolución universal.
La Revolución de 1905
La derrota en la guerra ruso-japonesa provocó un descontento general en Rusia, dando lugar a la Revolución de 1905. La manifestación pacífica del Domingo Sangriento en San Petersburgo fue brutalmente reprimida por el ejército, dañando la imagen del zar y desencadenando una oleada de huelgas. Las protestas obreras exigían mejoras laborales y cambios políticos. Los liberales buscaban una monarquía parlamentaria. También hubo revueltas campesinas por la tierra y protestas de minorías nacionales con fines autonomistas y secesionistas. Tras la revolución, se mantuvo la Duma.
Lenin y los bolcheviques extrajeron las siguientes conclusiones:
- La burguesía se mostró débil.
- El campesinado podía ser un aliado de los obreros.
- Un partido disciplinado debía sustituir a las fuerzas sociales y políticas inoperantes.
La Revolución de 1917
En 1917, nuevas huelgas en Petrogrado, iniciadas por obreras textiles, exigían paz, pan y reformas políticas. Se formó un soviet de obreros y soldados, junto con otros dirigidos por mencheviques y socialrevolucionarios. La Duma estableció un gobierno provisional presidido por Lvov, que obligó al zar a abdicar. Kerenski asumió la presidencia con el objetivo de convocar elecciones para una asamblea constituyente. Se estableció un doble poder: el del gobierno y el de las asambleas populares (soviets).
Ante la guerra, el socialismo se dividió entre quienes apoyaban a sus gobiernos y quienes, como Lenin, buscaban aprovechar el conflicto para la lucha de clases. Lenin propuso las Tesis de Abril. El gobierno de Kerenski se negó a aceptar las peticiones de reparto de tierras y negociaciones de paz.