Todo esto hizo que la derecha organizase en torno a la CEDA de Gil Robles, cuyo programa electoral se basaba en desmontar todas las reformas del gobierno, sobre todo la ley agraria. La extrema derecha, imitando el nazismo y el fascismo, se organiza en torno a la Falange de José Antonio, que se unirá a las JONS de Ledesma. La izquierda, partidaria de la radicalización de la lucha, también se opuso al gobierno pidiendo la revolución social. El gobierno republicano convocó elecciones en las cuales triunfó la derecha debido al desgaste del gobierno, a la unidad de la derecha frente a la división de la izquierda, al voto femenino y al abstencionismo obrero dirigido por la CNT.

2. Bienio Radical Cedista o Derechista (nov. 1933 – feb. 1936)

Bienio rectificador por parte de la derecha o bienio negro por parte de la izquierda. Se puede dividir en 2: a) hasta octubre del 34, gobierno de los radicales. b) octubre del 34 hasta febrero del 36, gobierno radical-cedista. Alcalá Zamora encarga el gobierno al radical Alejandro Lerroux, aunque la CEDA fue el partido más votado. La CEDA solo accedió a apoyar al gobierno si este rectificaba las reformas anteriores, sobre todo la reforma agraria.

1. Reforma agraria: libre contratación de braceros, devolución de parte de la tierra expropiada a los antiguos dueños, se modifican los jurados mixtos a favor de los patronos.
2. Reforma militar: se les da destinos claves a los generales antirrepublicanos y ascensos a los militares africanistas.
3. Paralización del Estatuto Vasco y Catalán.
4. En educación: se paraliza la secularización de la enseñanza, la construcción de escuelas y la enseñanza mixta.

Con todo esto, el país queda dividido en 2. Por un lado, la derecha formada por los monárquicos que integran a la alta burguesía y la nobleza, por la Falange Española y de las JONS de José Antonio, de corte fascista, y la CEDA de Gil Robles, que integra clases medias y la derecha católica. La izquierda empieza a reconstruirse tras el fracaso. La izquierda republicana de Azaña, el PSOE de Largo Caballero y Prieto. El Partido Comunista Español abandonó su enfrentamiento con el PSOE para formar junto a él un frente antifascista. Solo la CNT se mantuvo al margen. La UGT, como protesta por la anulación de las reformas agrarias anteriores, organizó una huelga de campesinos en la época de siega que duró 12 días y fue duramente reprimida, con muertes y miles de detenciones.

La izquierda obrera preparó un movimiento obrero revolucionario que llevó al país a la huelga general y a la insurrección armada. En octubre del 34, seguida en Madrid, País Vasco, Cataluña, pero en Asturias fue donde los obreros se levantaron en armas. Tras hacerse con el control de la provincia, establecieron un orden revolucionario que controlase el poder y la producción. El gobierno entregó plenos poderes al General Franco, quien, utilizando tropas de la Legión y regulares, logró hacerse con la situación después de muchos muertos, heridos y detenidos, entre ellos Azaña. Tras el fracaso de la revolución, la CEDA salió fortalecida, obteniendo 5 ministros en el gobierno de Lerroux. Gil Robles, el nuevo ministro de defensa, nombró al general Franco como jefe del estado mayor y a otros como Mola, Goded o Fanjul, los colocó en los principales puestos de mando.

Todos estos militares habían estado a favor del golpe de estado de Sanjurjo, lo que creó una desconfianza por parte de la izquierda en Zamora. Todos estos problemas, más los derivados de la corrupción en los que se vieron implicados varios ministros, hicieron que Lerroux dimitiera, por lo que Alcalá Zamora disolvió las Cortes y convocó elecciones. Las elecciones del 36 y el Frente Popular. La izquierda, tras el pacto del Frente Popular, aparecía unida y estaba formada por partidos y sindicatos de izquierdas. La CNT no participó, pero no hizo campaña de abstención. Su programa estaba basado en poner en marcha las medidas del 1er bienio, la amnistía y las garantías constitucionales. Por otro lado, monárquicos y CEDA, su programa era el rechazo al marxismo y a las reformas.

Victoria para el Frente Popular. La derecha triunfó en la España rural del interior y del norte, y la izquierda en las grandes ciudades y en las zonas mineras y de latifundio. Las nuevas Cortes destituyeron a Alcalá Zamora y pusieron a Manuel Azaña como presidente de la República y a Casares Quiroga como nuevo Jefe del Gobierno. Medidas: (amnistía política, restablecimiento de las medidas vinculadas a la reforma agraria, restablecimiento del estatuto, se autorizó a la IRA a expropiar algunas grandes fincas).

La Guerra Civil

Tras las elecciones en la primavera del 36, España se ve convulsionada por una oleada de violencia con asesinatos, saqueos, incendios… enfrentamientos entre las milicias de la Falange y milicias sindicales de izquierdas, a la vez que se va poniendo en marcha una conspiración civil y militar contra la República, formada por 2 grupos: (carlistas con sus milicias armadas, los requetés; y la Falange, que estaba formada por jóvenes violentos desengañados de la CEDA). La conspiración militar estaba en marcha con el único objetivo de restablecer el orden social tradicional. Contaba con el apoyo de todos los sectores sociales vinculados a la derecha. La iglesia también era favorable a una sublevación militar, la cual posteriormente legitimaría, dándole el carácter de cruzada frente al comunismo ateo.

El gobierno, enterado de la conspiración, tomó la ineficaz medida de alejar de la península a los principales cabecillas: Franco a Canarias, Goded a Baleares y Mola a Navarra. Este último era el director de la sublevación. El día señalado, Mola desde el norte y Franco desde el sur se dirigirían a Madrid. El golpe se precipitó por el asesinato del teniente Castillo por miembros de la Falange y la réplica del asesinato de Calvo Sotelo por miembros de la Guardia de Asalto. Casares Quiroga permaneció inactivo, creyendo que dicho pronunciamiento militar acabaría fracasando como otras veces había ocurrido. Pero el 17 de julio se levantó el ejército de Marruecos, el gobierno siguió inoperante y dos días más tarde la Guerra Civil Española era un hecho. Duraría 3 años, costaría miles de muertos y daría lugar a una gran represión. La victoria del llamado bando nacional truncará el proceso democrático iniciado en 1931 y se resolverá con la implantación de la férrea dictadura de Franco, que durará 40 años.