El Sexenio Democrático (1868-1874): De la Revolución Gloriosa a la Restauración Borbónica

El Sexenio Democrático (1868-1874)

De la Revolución Gloriosa a la Restauración Borbónica

Finalizado el reinado de Isabel II, tras la Revolución de “La Gloriosa”, se inicia el Sexenio Democrático, cuyas etapas son: Gobierno Provisional de Serrano, la Primera República y el reinado de Amadeo I. Tras el Sexenio, surge la Restauración Borbónica.

La Revolución Gloriosa

La crisis política, económica-financiera y social durante el gobierno moderado de Narváez provoca la firma del Pacto de Ostende entre progresistas, unionistas y demócratas. Se acordó el destronamiento de Isabel II y el veto a los Borbones.

El 17 de septiembre de 1868, la Revolución “La Gloriosa” se inició con la sublevación del almirante Topete en Cádiz, apoyado por Prim y Serrano. Se producen levantamientos populares y la organización de juntas revolucionarias locales.

En la batalla del puente de Alcolea, Serrano venció a las tropas gubernamentales comandadas por el marqués de Novaliches. Isabel II huyó a Francia.

Intentos democratizadores

Se estableció un Gobierno Provisional presidido por Serrano; destacaban el general Prim, Topete y Sagasta. Este gobierno elaboró un programa político conforme a principios democráticos.

Las Cortes quedaron compuestas de forma muy heterogénea; estaban representados todos los partidos, predominando los diputados unionistas, demócratas, progresistas, isabelinos y republicanos.

Estas Cortes se encargaron de elaborar y aprobar una nueva Constitución que sustituyó a la de 1845. La Constitución de 1869 estableció la forma de gobierno de España como Monarquía democrática, hereditaria y parlamentaria. Se estableció una Declaración de Derechos Humanos que garantizaba la libertad personal, la inviolabilidad del domicilio y correspondencia, el derecho de reunión y asociación, etc.

El gobierno inició la búsqueda de un nuevo rey, mientras Serrano se convertía en regente hasta el nombramiento del rey.

Serrano encargó a Prim la búsqueda de un nuevo rey. Descartados los Borbones (el duque de Montpensier fue candidato), se intentó con Fernando de Coburgo, de Portugal, pero no aceptó el trono. El candidato prusiano Leopoldo de Hohenzollern fue vetado por Francia. Fue la casa de Saboya quien accedió al trono español en la figura de Amadeo de Saboya.

Monarquía democrática de Amadeo de Saboya (1871-1873)

El general Prim fue asesinado. La brevedad del reinado se debió a diversas causas:

  • La oposición de sectores políticos republicanos, alfonsinos y carlistas.
  • Un ambiente de hostilidad casi general hacia el nuevo rey, considerado como un intruso.
  • La agitación del mundo obrero, que se incorpora con fuerza a la sociedad y se organiza a través de movimientos y protestas contra el gobierno por sus pésimas condiciones de trabajo.

A nivel político, se vivió un periodo de inestabilidad. Fue bajo la presidencia de Manuel Ruiz Zorrilla cuando la situación del país se tornó insostenible (levantamiento de la marina de El Ferrol, guerra carlista, guerra de Cuba).

Aconteció la cuestión de los artilleros: la oficialidad en Vitoria no aceptó las órdenes del general Hidalgo, considerado responsable de la ejecución de los sargentos del cuartel de San Gil. Esta situación provocó la renuncia de Amadeo I al trono.

I República (1873-1874)

Se proclamó la República democrática, nombrando a Figueras como presidente del Poder Ejecutivo. En el gobierno figuraban Pi y Margall, Salmerón y Castelar. En los once meses que duró la República se sucedieron cuatro presidentes:

  • Estanislao Figueras: partidario de una república unitaria. Se dio la Tercera Guerra Carlista, así como la intervención en Cuba. En Andalucía y Levante surgió el cantonalismo, en abierta oposición al poder central.
  • Pi y Margall: partidario del Estado federal, llegó a proclamar la República Democrática Federal. Su principal tarea fue la elaboración de la Constitución federal de 1873, “non nata”. Junto a esta Constitución se realizó una Declaración de Derechos. Este proyecto no fue aprobado.
  • Nicolás Salmerón: su problema fue el movimiento cantonal, que afectó a Andalucía, Valencia, etc. Salmerón recurrió al ejército para combatir el cantonalismo. El general Pavía sometió varios cantones en Andalucía y el general Martínez Campos puso fin al cantonalismo valenciano. Su negativa a firmar unas penas de muerte le llevó a la dimisión.
  • Emilio Castelar: llevó a cabo un giro conservador en la República. Quería restablecer la unidad nacional y el orden social. Reorganizó el ejército y se apoyó en los militares para obtener éxitos inmediatos sobre el cantonalismo y el carlismo. Se mostró autoritario al clausurar las Cortes. Una moción de confianza, exigida por la oposición federalista, hizo perder a Castelar por 100 votos a favor y 120 en contra.

El 3 de enero de 1874, las Cortes contemplaron con asombro la llegada de las fuerzas del general Pavía, quien protagonizó un golpe de Estado, disolviendo el Congreso de los Diputados cuando se estaba procediendo a nombrar al quinto presidente de la República, Eduardo Palanca.

República del 74 (enero-diciembre)

Se confió la presidencia del gobierno al general Serrano. Etapa de transición que anunciaba la restauración de los Borbones en el hijo de Isabel II, el príncipe Alfonso. Eran más los generales y políticos que apoyaban al partido alfonsino, dirigido por Cánovas del Castillo, que pretendía la restauración pacífica de la monarquía.

El general Martínez Campos precipitó los acontecimientos, protagonizando el pronunciamiento de Sagunto. Alfonso XII fue proclamado rey de España.