Transformaciones Económicas y Sociales en España Durante el Sexenio Democrático (1868-1874)

Transformación Económica

El siglo XIX y comienzos del XX fue una etapa de industrialización y surgimiento de una nueva sociedad burguesa capitalista. En España, las transformaciones fueron lentas, con un crecimiento lento y atrasado. La evolución económica se divide en dos etapas:

  • De 1860 a 1870: mayor estancamiento, baja de precios y escaso crecimiento del país, debido a la guerra y la pérdida de las colonias.
  • De 1870 a 1901: ritmo de crecimiento más rápido, la población crece, con mayor concentración en la periferia. A partir de la mitad del siglo XIX comenzó el éxodo rural y el crecimiento de las ciudades. La población en 1914 era mayoritariamente rural, solo Cataluña tenía tasas más europeas.

Transformaciones Agrarias

La agricultura era la actividad económica más importante. Era necesario cambiar el sistema de propiedad de la tierra e introducir innovaciones técnicas, de cultivos y de gestión.

Cambios en la propiedad:

  • Desamortizaciones de Mendizábal (1836): principalmente afectó a la Iglesia, el diezmo fue suprimido en 1837. Se critica que los fondos obtenidos se desviaron hacia la compra de tierras que podrían haber sido invertidos en la industrialización y el ferrocarril.
  • Desamortización de Madoz (1855): eliminó la propiedad comunal municipal, lo que agravó la situación económica del campesino que aprovechaba esas tierras.

Resultados de las desamortizaciones:

En conjunto, se creó una nueva oligarquía terrateniente, pero no se creó una clase media rural. No aumentó el número de propietarios. Sí aumentó la superficie cultivada y la producción, pero no mejoró la productividad.

Innovación técnica y de cultivos:

La reforma agraria aumentó la superficie de explotación de 10 a 16 millones de hectáreas. Se centró en la trilogía mediterránea, descendió la ganadería y las crisis agrarias eran constantes.

Minería y Fuentes de Energía

Entre 1868 y 1914 aumenta la demanda de minerales energéticos. La Ley de Minas (1868), (desamortización del subsuelo) permitirá la llegada de capital extranjero y la venta de minas a cambio de un canon anual (Riotinto-cobre), o la explotación estatal (Almadén-cinabrio).

Sector Industrial

Industria textil catalana:

El sector algodonero fue el principal. Desde el siglo XVIII existía actividad comercial, manufacturera y artesanal basada en la lana, y las fábricas de indianas del XVIII. Desde 1830 se inicia la modernización (primera máquina de vapor en la fábrica Bonaplata de Barcelona), pero el crecimiento fue limitado por la incapacidad de atraer inversiones del sector bancario, el desfase tecnológico y la fiebre del algodón provocada por la Guerra de Secesión de EEUU (1861-65).

La siderurgia vasca:

Se estableció junto a las minas de hierro. Las primeras fábricas estaban en Málaga, luego en Asturias y por último en Vizcaya, donde la familia Ybarra fundó en 1882 la “Sociedad de Altos Hornos y fábricas de Hierro y Acero” de Bilbao. En 1885, instaló el primer convertidor Bessemer en España. En 1902 se fusionó con “La Vizcaína” creando la empresa más poderosa de España.

Transporte: creación de la red ferroviaria.

Transformaciones Sociales

Lento crecimiento demográfico:

11,5 millones de habitantes en 1800, 18,6 en 1900 y 23,5 en 1930, con alta natalidad y alta mortalidad.

Pervivencia del modelo demográfico antiguo:

Se mantuvo la natalidad y la mortalidad alta -especialmente la infantil- con bajo crecimiento vegetativo. Las malas condiciones higiénico-sanitarias, las epidemias y las enfermedades infecciosas, junto con la crisis de subsistencia en algunas regiones, explican la elevada mortandad.

Migraciones:

Poco notables hasta 1880. Se paralizarán en 1914 (Iª Guerra Mundial). La emigración fue a América y África del Norte. En 1853 se suprimieron todas las trabas legales que antes había a la emigración. El apogeo se produjo entre 1882 y 1914. Las migraciones interiores fueron del campo a la ciudad, y de las ciudades del interior a la periferia (especialmente Madrid). Estas migraciones provocaron a comienzos del siglo XX importantes desequilibrios regionales.

Cambios Sociales

Desaparición de los estamentos y nacimiento de una nueva sociedad de clases, igualitaria ante la ley, pero desigualitaria ante la propiedad y la riqueza. El dinero fue la base de la diferenciación social.

La clase dirigente:

Formada por la vieja aristocracia, las altas jerarquías del clero, del Ejército, la Administración, y también la alta burguesía. Acaparaban los cargos de poder.

Las clases medias:

Un grupo bastante heterogéneo. A ellas pertenecían los pequeños propietarios rurales, campesinos propietarios de tierras, médicos, abogados, profesores, pequeños comerciantes y empresarios. Eran un sector clave para asentar el poder de las clases dominantes. Todos los partidos políticos y la prensa se dirigían a ella.

Clases populares:

Compuesta por campesinos, artesanos, trabajadores de servicios, clases bajas urbanas y trabajadores de fábricas: el proletariado.

Movimiento Obrero

Durante la mayor parte del siglo XIX, los trabajadores del campo y la ciudad manifestaban su descontento de forma tradicional. Hasta principios del siglo XIX, el bandolerismo (más en Andalucía) y el motín eran las formas de protesta más comunes. A veces, la ira se dirigía contra un colectivo: propietarios, clero, etc. Con la industrialización y la extensión del sistema liberal, los trabajadores comenzaron a usar nuevas formas de lucha y organización.

En España, la organización del movimiento obrero puede dividirse en tres etapas:

  • Hasta 1868: se lucha por la libertad de asociación.
  • Sexenio Democrático (1868-1874).
  • Después del Sexenio.