Transformaciones Agrarias y Desamortización en la España del Siglo XIX

Introducción

El siglo XIX, el siglo de la industrialización, vio a la industria convertirse en la actividad económica principal, lo que condujo a un aumento significativo de la producción. Al final del siglo, las relaciones sociales capitalistas se habían consolidado. La España de 1900 era muy diferente a la de 1800, experimentando profundos cambios en su economía y sociedad. Mientras que en 1800 predominaban los pequeños núcleos agrícolas, en 1900 surgieron ciudades populosas con mercados, teatros y una atmósfera moderna. La sociedad evolucionó, el clero perdió sus privilegios y emergieron nuevas clases sociales.

1. Transformaciones Agrarias: Estancamiento y Progreso Agrícola

Los cambios en la agricultura fueron lentos, marcados por una crisis caracterizada por malas cosechas y mortalidad debido a la imposibilidad de gestionar los excedentes.

1.1. Proteccionismo Agrario

La agricultura española estuvo protegida de la competencia exterior. Esto llevó a un aumento de la superficie cultivada y de la producción. Se implementaron leyes liberadoras, se utilizaron nuevos abonos y se abandonaron las tierras de cultivo de cereal (menos rentables) para disminuir los costos, abaratar los precios y competir con los cereales rusos y americanos.

1.2. Cambios Introducidos en la Agricultura (1820-1869)

  • Adaptación al mercado nacional e internacional (vid y cítricos).
  • Adaptación a la tierra y al clima. Norte: patata y maíz; Castilla y Andalucía: cereales; Mediterráneo: viñedo.
  • Aumento de la superficie cultivada e incremento de la producción global, aunque disminuyeron los rendimientos. La producción de cereales aumentó un 50% y la de vid se triplicó.

1.3. Principales Cultivos

1. Trigo:

Aumento de su superficie, pero con irregularidad en las cosechas. La creación del ferrocarril permitió conectar distintas zonas productoras. Las tarifas arancelarias encarecían el grano extranjero, perjudicando a la población.

2. Vid:

Su superficie se triplicó, extendiéndose desde la periferia hacia el interior. El vino se convirtió en el principal producto de exportación español.

3. Olivo:

Se mantuvo gracias a la demanda hispanoamericana. El único sector que se capitalizó fue el de los cítricos en el Levante, donde se mejoró el riego y se introdujeron fertilizantes, triplicando las exportaciones.

En conclusión, la agricultura española se caracterizó por la falta de inversiones y mejoras técnicas.

2. Doble Desamortización Eclesiástica y Civil

2.1. Antecedentes

Característica de la mentalidad ilustrada, las tierras vinculadas (manos muertas) eran mal explotadas, lo que contribuyó al atraso español. El Estado, agobiado por los gastos de las guerras, se vio obligado a recurrir a la desamortización. La primera desamortización afectó a los bienes de la Iglesia, que se vendieron en subasta pública. También se incluyeron los bienes de la Compañía de Jesús y los Colegios Mayores. Sin embargo, la deuda pública no dejó de crecer y las tierras fueron a parar a grandes propietarios.

Durante el reinado de José I Bonaparte, se produjo una desamortización de bienes del clero y la aristocracia que se resistieron a la dominación francesa. Las Cortes de Cádiz iniciaron tímidamente una desamortización de bienes de comunidades religiosas extinguidas, la Inquisición, los jesuitas y las Órdenes militares. Se restauró la mitad de las tierras a los ayuntamientos, pero el proceso quedó interrumpido por el regreso de Fernando VII.

2.2. Desamortización de Mendizábal

Introducción:

Durante la Regencia, la tierra estaba en manos de la Iglesia, la nobleza, el Estado o los municipios, con una explotación poco eficiente. El proceso de transferir la tierra a otros propietarios para una mejor explotación se denominó desamortización, un elemento esencial en la transición de la sociedad del Antiguo Régimen al liberalismo.

Sus particularidades:
  • Se promulgó mediante una serie de leyes.
  • Se centró en los bienes de la Iglesia, olvidándose de los municipios.
  • Afectó de lleno al clero regular.
  • Conectó la desamortización a la reforma del clero.

El plan de Mendizábal, poco original, radicalizó los objetivos del Trienio Liberal, aplicándolos a las necesidades económicas del Estado durante la guerra carlista. Se llevó a cabo de forma atropellada, buscando:

  • Solucionar los apuros de la Hacienda y la deuda.
  • Impulsar una reforma agraria en beneficio de los campesinos.
  • Reformar la Iglesia.
  • Ampliar la base social del nuevo régimen liberal.

Se publicaron dos decretos. Se declararon propiedad nacional los bienes raíces, rentas, derechos y acciones de los institutos religiosos, que se subastaron públicamente. Mendizábal esperaba que las tierras fueran a manos de agricultores medios, pero hubo dos tipos de compradores.

Consecuencias:

Algunos consideran que la desamortización de Mendizábal fracasó, ya que puso en contra del régimen isabelino a la Iglesia, el campesinado, sectores liberales y al grupo ilustrado. Los principales beneficios fueron para la Hacienda Pública.

2.3. La Posterior Desamortización de Bienes Eclesiásticos

Con Espartero se completó el proceso desamortizador. La desamortización de los bienes del clero regular afectó a inmuebles y tierras declarados bienes nacionales y subastados. Otra ley se ocupó de las necesidades de la Iglesia y sus ministros con la contribución estatal del culto y clero. Estuvo en vigor tres años, pero Narváez interrumpió la desamortización, que luego se completó con el ministro Pascual Madoz.

2.4. La Desamortización Civil de Madoz

Buscando completar la obra de Mendizábal, Madoz compensó a la Iglesia con títulos de deuda y la enajenación de bienes propios. Los bienes servirían para reducir la deuda del Estado. Esta ley estuvo en vigor 14 meses. Madoz argumentó la desamortización municipal, que produjo un desequilibrio social. Isabel II vetó la ley, pero finalmente fue aprobada. Esto tuvo graves consecuencias para los municipios, dificultando el acceso a la tierra para los campesinos.

2.5. Consecuencias del Doble Proceso Desamortizador

Sociales:
  • No se creó una clase media campesina.
  • Se liquidó el poder económico de los sectores estamentales.
  • Se proporcionó una base territorial a la burguesía.
  • Los bienes de la Iglesia pasaron a la burguesía.
  • Aumentó la miseria de los campesinos.
  • Surgío una nueva oligarquía.
Económicas:
  • Aumentaron las tierras cultivadas.
  • No hubo renovación técnica.
  • Apenas se produjo una revolución agraria.
  • Los ayuntamientos perdieron ingresos.