Glosario de Arte Románico

Términos Arquitectónicos

TÍMPANO: Espacio situado en la portada de las iglesias románicas, delimitado por el dintel y las arquivoltas. Suele tener relieves a veces divididos en franjas. Las esculturas se adaptan a la ley del marco.

TROMPA: Estructura arquitectónica que permite convertir un espacio cuadrado o poligonal en una base circular u octogonal para soportar una cúpula.

ARCO PERALTADO O REALZADO: Típico de la arquitectura prerrománica y que se seguirá utilizando durante el periodo románico. Arco de medio punto elevado mediante un peralte o varias dovelas rectas.

ARCO FAJÓN: Arco que se dispone transversalmente a la bóveda de cañón, dividiéndola en tramos y transmitiendo los empujes a los muros laterales o a los contrafuertes.

JAMBA: Espacios que enmarcan las puertas y las ventanas en los edificios. Pueden ser de piedra o de ladrillo y en el románico suelen llevar relieves o columnas adosadas. Sostienen el dintel o el arco.

MANDORLA: Aureola en forma de almendra que rodea la figura completa de Cristo o la Virgen María en el arte religioso.

PANTOCRÁTOR: Representación característica de Cristo durante el Románico. Aparece Cristo dentro de la mandorla mística y rodeado por los símbolos de los 4 evangelistas. Aparece sentado con un libro en una mano y haciendo el símbolo de la trinidad.

TETRAMORFOS: Representación iconográfica compuesta por cuatro elementos. La más extendida de éstas, representada repetidamente en el arte desde el Románico, es la cristiana relacionada con un pasaje del Apocalipsis de Juan que describe a cuatro ángeles zoomorfos que rodean al Pantocrátor y que los estudiosos han interpretado como los cuatro evangelistas: el ángel, o el hombre alado se asocia a Mateo, ya que su Evangelio comienza haciendo un repaso a la genealogía de Cristo, el Hijo del Hombre; el león se identifica con Marcos, porque su Evangelio comienza hablando de Juan el Bautista, «Voz que clama en el desierto», dicha voz sería como la del león; el toro sería Lucas, ya que su Evangelio comienza hablando del sacrificio que hizo Zacarías, padre de Juan el Bautista, a Dios; el águila ha sido asociada a la figura de Juan, ya que su Evangelio es el más abstracto y teológico de los cuatro.

PARTELUZ: Elemento vertical que divide un vano. Suele ser una columna o un pilar y lleva alguna imagen de Cristo o de la Virgen asociado.

DEAMBULATORIO: Espacio situado detrás del altar mayor, prolongación de las naves laterales. Espacio muy característico de las iglesias de peregrinación.

GIROLA: Espacio similar al deambulatorio, que rodea el altar mayor en las iglesias, permitiendo el paso de los fieles.

ESPADAÑA: Parte superior de la fachada de las iglesias que a veces se utiliza como campanario cuando no hay una torre para alojar las campanas. Tiene varios vanos de donde cuelgan las campanas. Son muy comunes en las iglesias rurales románicas.

FORMERO (ARCO): Arco que separa los tramos de una nave en una iglesia, apoyándose en las columnas o pilares.

ISOCEFALIA: Término aplicable tanto a la escultura como a la pintura donde todas las figuras tienen la misma altura formando un friso. Se utilizó primero en el arte Bizantino y posteriormente en el románico tanto en escultura como en pintura.

CIMBORRIO: Torre de planta poligonal o cuadrada cubierta con cúpula. Suele situarse en el crucero de las iglesias. Este cimborrio suele descansar sobre pechinas o trompas. Interiormente la cúpula suele estar reforzada de arcos. Son características las de Zamora y Salamanca.

CLAUSTRO: Patio interior y galería que rodea una iglesia o un monasterio. Espacio distribuidor de diferentes dependencias dentro de un monasterio. Solía tener jardines y una fuente. Un espacio para pasear y reflexionar.

CONTRAFUERTE: Elemento estructural exterior que se adosa a los muros de un edificio para contrarrestar el empuje de las bóvedas.

CRUCERO: Espacio donde se cruzan la nave principal de una iglesia y el brazo del transepto. Suele estar cubierto con cúpula y en el exterior suele aparecer un cimborrio.

APOCALIPSIS: Libro escrito por San Juan Evangelista en el que se relata su visión acerca del Juicio final y el advenimiento de la Jerusalén Celeste.

BESTIARIO: Conjunto de representaciones de animales reales o fantásticos, con un sentido simbólico o moralizante, muy común en el arte medieval.

BÓVEDA DE CAÑÓN: Tipo de bóveda que tiene por sección una media circunferencia.

BÓVEDA DE ARISTAS: Es la formada por el cruce perpendicular de dos bóvedas de cañón.

CABECERA: Parte de la iglesia donde se sitúa el altar mayor. En el románico suele tener forma semicircular o poligonal.

ABOCINADO: Cualquier ventana o vano cuya anchura disminuye hacia el interior. Es típico de las portadas y ventanas del románico y del arte gótico.

AJEDREZADO: Motivo decorativo que alterna dos colores o materiales, formando un patrón similar al de un tablero de ajedrez.

ARQUIVOLTA: Se trata de todos los arcos que se sitúan en una portada. Suelen ir decreciendo hacia el interior. Son característicos del románico y del gótico. Pueden ir solos o con esculturas adheridas a dichos arcos.

BANDA: Franja horizontal que recorre un muro, generalmente decorada con relieves o pinturas.

BÓVEDA AGALLONADA: Es un tipo de bóveda con forma de cañón apuntado, que presenta surcos o nervios longitudinales que dividen la superficie en secciones cóncavas, creando un efecto de “acanalado” o “gallones”. Se utiliza en la arquitectura románica y gótica para proporcionar decoración y reforzar la estructura de los edificios religiosos como iglesias y catedrales.

LINTERNA: Este elemento arquitectónico tiene forma cilíndrica y es puesto sobre una cúpula. Como norma general, posee vanos para permitir la penetración de luz, y sobre ella se dispone un elemento que sirva de remate, tales como una cruz. Tenemos ejemplos de este elemento en catedrales como Santa Maria dei Fiori.

El Arte Románico en Europa

El arte románico en Europa, que floreció entre los siglos XI y XII, se caracteriza por una serie de rasgos distintivos que reflejan la espiritualidad y las creencias de la época. Las construcciones románicas, especialmente iglesias y monasterios, presentan una planta basilical con una nave central y dos laterales, arcos de medio punto y muros gruesos. Esta arquitectura se diseñó con una intención espiritual y funcional, destacando la importancia de la religión en la vida medieval.

La escultura y la decoración son elementos clave del arte románico. Los capiteles de las columnas, los tímpanos sobre las puertas y los frisos exteriores suelen estar decorados con esculturas que representan escenas religiosas y simbólicas. La simplicidad y la expresión simbólica son características comunes de la escultura románica. Además, aunque menos común que la escultura, la pintura mural también se utilizaba para decorar paredes y techos con representaciones religiosas y narrativas. El arte metalúrgico y ornamental también floreció en el período románico, con la creación de objetos litúrgicos como cruces, cálices y relicarios, así como elementos ornamentales como candelabros y puertas de iglesias.

Francia

En Francia las iglesias más relevantes son la Abadía de Cluny, un edificio de proporciones monumentales y formado ya planta de cinco naves y que fue increíblemente influyente en el desarrollo del románico. Además de Saint Sernin de Toulouse, que se construyó en memoria del mártir Saturnino y de ella destaca su gran cimborrio de varios pisos.

Alemania

De Alemania destaca la catedral de Worms, de tres naves y un transepto en cuyo centro se levanta una gran cúpula, además destaca sus torres circulares de grandes dimensiones y que se encuentran en los extremos del pórtico principal.

Inglaterra

Del románico en Inglaterra son relevantes la catedral de Ely, que destaca por su enorme cimborrio y su gran número de arcos ciegos en su exterior con función decorativa, y la catedral de Durham, con una planta variante de la benedictina y una nave de ocho tramos y dos laterales. Asimismo, esta iglesia inició la tendencia del alargamiento de las iglesias y la ampliación del transepto además de introducir la bóveda de ojivas con nervios de refuerzo.

Italia

Por otra parte, en Italia destacan la catedral de Módena en la cual se encuentran junto a la fachada dos poderosos contrafuertes y un gran rosetón, además de que tiene muros decorados con las arcadas de una galería con vanos; y el conjunto monumental de Pisa, que constituye de un baptisterio, una catedral y el campanile. La catedral cuenta con unas grandes arcaturas e incrustaciones policromadas. El campanile, más conocido como la torre de Pisa, se construyó en el siglo XVI y cuenta con las mismas galerías logias de la catedral. Por último, del baptisterio destaca su gran cúpula, sus arcos ciegos y su galería de arcadas.

España

Por último, en España destacamos la iglesia de Santiago de Compostela. Esta catedral finaliza la ruta de peregrinación establecida por los monjes de Cluny y se considera la cumbre del románico español. De ella destaca su fachada oeste, el Pórtico de la Gloria, articulado entorno a un parteluz con la estatua de Santiago. En el tímpano se aprecian representaciones del Juicio Final y el Apocalipsis con Cristo rodeado de Evangelistas.

La Escultura del Periodo Románico

La escultura del periodo románico pertenece al momento histórico de la Alta Edad Media, teniendo en el siglo XI su momento de mayor expansión por todo el continente europeo y en Tierra Santa. Estuvo íntimamente ligada a la arquitectura y la religión, siendo trabajada principalmente en piedra, centrándose en los tímpanos de los pórticos de entrada, pero también en los capiteles de las columnas, estando decoradas con temas bíblicos.

Destaca la escultura en las portadas de las catedrales y las iglesias, en las que se trata el tímpano, el espacio entre el dintel y el arco de una puerta, como núcleo escultórico. De esta forma, el tímpano usado para impresionar a los creyentes con imágenes de temáticas bíblicas representadas en él y como mucho horror vacui. Cómo Cristo en Majestad, que representa la figura de Cristo entronizado dentro de la mandorla bendiciendo con la mano derecha y un libro en la izquierda, acompañado por el tetramorfos, los símbolos de los cuatro evangelistas.

Por otra parte, rodeando el tímpano encontramos las arquivoltas, el conjunto de arcos que enmarca una portada; las jambas, los parámetros laterales de un pórtico; el dintel, piedra que se coloca sobre una portada; y el parteluz, una pequeña columna que divide verticalmente una puerta. Asimismo, estos elementos fueron fundamentales en la escultura románica, eran decorados con relieves geométricos o figurativos de tipo religioso. Además, era habitual encontrar el tema de los veinticuatro ancianos del apocalipsis y encontrar la imagen de la Virgen en el parteluz.

Su escultura se caracterizó por someter a las figuras a un antinaturalismo, de manera que no presentan estudio anatómico. Además, están totalmente adaptadas al marco arquitectónico, de manera que se doblan y alargan cuando los elementos de construcción así lo requieren.

También se hace notar la rigidez e inexpresividad de las figuras, algo que podría vincularse como influencia de los romanos que a su vez se influenciaron de los griegos o una influencia directa de los griegos. A su vez, encontramos una falta de perspectiva y una ausencia de fondos y movimiento, sin embargos estos fondos eran bastamente rellenados, es decir, horror vacui. Volviendo a la perspectiva, representaban los personajes según la norma de perspectiva jerárquica, en la que a mayor importancia que tenga el personaje, mayor será el tamaño con el que se le representa. Por último, tienen una tendencia a la geometrización y a la simetría de las formas, una clara influencia del arte musulmán que tuvo tanto impacto en la cultura en la península. Cabe destacar de igual manera, a pesar de que prácticamente no se conserva a día de hoy, la policromía de los relieves.

Ejemplos Más Representativos Escultura

En el caso de Europa, los ejemplos de relieves escultóricos más representativos se encuentran en las portadas de acceso de numerosas iglesias y monasterios. Algunos de los más destacados en los que se representa la escena del Pantocrátor son en los tímpanos de Santa Magdalena de Vézelay, en el que encontramos a Jesús dentro de una mandorla mientras envía a los apóstoles el Espíritu Santo, que se representa con unos haces de luz, y les concede el don de lenguas para que anuncien el Evangelio a todas las naciones; y de Santa Fe de Conques, en el que se ilustra la llegada del Juicio Final, relatada en el Evangelio de San Mateo. Mientras en la península Ibérica sobresalen ejemplos como los relieves de los capiteles del Monasterio de Santo Domingo de Silos, los cuales cuentan con una variada temática que trata temas bíblicos, animales, quiméricos, vegetales; y el de Santa María de Ripoll. También habrá importantes ejemplos como el tímpano de la Catedral de Jaca, con el crismón y el bestiario. No obstante, los ejemplos más importantes se hallan en la Catedral de Santiago de Compostela, con dos portadas principales: la Puerta de Platerías donde se representan escenas bíblicas de la Pasión de Cristo y sus tentaciones en el desierto, al igual que alegorías como la mujer adúltera con la cabeza de su amante en sus manos; y el Pórtico de la Gloria, del final del periodo románico, donde se adivinan ya características de transición al gótico, como naturalismo en las formas y en el que se representa la segunda venida de Jesucristo a la tierra.

El Arte Prerrománico: Arte Visigodo (s. V-VIII)

Los visigodos entraron en la Península Ibérica en el siglo V, cuando fueron desplazados de la Galia por los francos. Posteriormente, en el siglo VI, Leovigildo, rey de los visigodos, unificó bajo su mandato la mayor parte de la península y estableció la capital del reino en Toledo. De esta forma iniciaron la primera etapa del arte prerrománico en la península, el arte visigodo (s. V-VIII).

La arquitectura visigoda continuó con la tradición constructiva del arte romano y paleocristiano con el uso de elementos como la planta basilical y los órdenes arquitectónicos, aunque incorporaron elementos constructivos nuevos como el arco de herradura, que era más cerrado que el usado posteriormente por los árabes. Además, asumieron influencias bizantinas como el iconostasio, una pequeña mampara del presbiterio que separa al cura de los creyentes en una iglesia y el uso de cúpulas en sus edificios sosteniéndolas sobre pechinas. También destacaron sus capiteles de influencia romana, una especia de corintio con hojas esquematizadas, y los de influencia bizantina, que eran troncocónicos con cimacio.

Asimismo, estos capiteles los adornaban con relieves poco profundos y a dos alturas, representando en ellos escenas con figuras con fin pedagógico. Los visigodos construyeron iglesias de poco tamaño, sin embargo, este reducido tamaño contrastaba con el notable grosor de los muros y la poca cantidad de vanos que se podían encontrar en ellos. Por otro lado, sus plantas eran extremadamente variadas, yendo desde cruciforme a basilical, normalmente con tres naves y techos planos. Estas naves estaban separadas por arcos y estaban ricamente decoradas con celosías geométricas. Mientras, los muros solían estar hechos de grandes bloques de piedra rectangulares y con techumbres de madera. Cabe destacar también el uso de pequeños pórticos en los laterales o a los pies de las iglesias.

Ejemplos Más Representativos

Entre las obras más importantes de esta etapa encontramos Santa María de Quintanilla de las Viñas, una iglesia perteneciente a la segunda mitad del siglo VII. Este edificio es de planta basilical con tres naves separadas por pilares. Se puede destacar en su exterior la decoración con relieves roleos, formas vegetales enroscadas; y en su interior los relieves biselados con imágenes cristianas estilizadas que buscan el simbolismo.

El Arte Prerrománico: Arte Asturiano (s. VII – X)

El arte asturiano se desarrolló durante los siglos VII – X en la zona de Asturias y Galicia y fue la segunda etapa del arte prerrománico en la Península Ibérica. Constó de tres periodos, el periodo prerramirense, el periodo ramirense y el periodo posrramirense.

Las iglesias asturianas mantuvieron la planta basilical con una o tres naves además del transepto con iconostasio visigodo, la tribuna y los ábsides rectangulares. Cabe destacar que el ábside principal normalmente tenía una cámara secreta para esconder un tesoro y a la cual solo se puede acceder desde el exterior. En cuanto a los materiales, los muros solían estar hechos con sillares, bloques de piedra tallados de manera irregular. Destacó el uso de la bóveda de cañón; el arco de medio punto romano; los arcos peraltados, específico del arte asturiano; los capiteles sogueados; los arcos ciegos, que servían de forma decorativa; y los arcos fajones, que cortan las bóvedas de cañón en sentido transversal y sirven para reforzarlas. Estas bóvedas eran, además, sujetadas por medio de contrafuertes.

Asimismo, sustituyeron las columnas por pilares, sin capitel la mayor parte del tiempo, y usaron ventanas geminadas ornamentadas ricamente con celosías y molduras. Esta decoración estaba también presente en el exterior, pero en este caso era decoración con frescos.

Ejemplos Más Representativos

El periodo prerramirense corresponde al reinado de Alfonso II (792-842) y durante esta fase se siguen los modelos y formas romanas como el arco de medio punto. De esta etapa podemos destacar San Julián de los Prados, una iglesia construida por orden de Alfonso II que cuenta con una planta basilical de tres naves separadas entre si mediante arcos de medio punto.

Posteriormente inició el periodo ramirense, este periodo comprende todo el reinado de Ramiro I (842-850) y es la etapa de plenitud del arte asturiano. Dentro de esta etapa encontramos edificios como Santa María de Naranco, una iglesia construida para servir como salón del trono del rey Ramiro I. Su planta es rectangular y se divide en dos pisos. A su vez destaca por su verticalidad, armonía y las soluciones constructivas que encontramos en él, cómo los arcos fajones.

El Arte Prerrománico: Arte Mozárabe (s. X – XI)

El arte mozárabe es la tercera etapa del arte prerrománico y se desarrolló entre los siglos X y XI como consecuencia a la relación entre la comunidad cristiana y musulmana peninsular.

La arquitectura mozárabe recibió influencia visigoda y musulmana en el uso del arco de herradura, en su caso más cerrado que el visigodo; el uso de bóvedas de cañón; los arcos geminados; y, para sostener los edificios, contrafuertes muy sólidos. En sus edificios están presentes espacios de gran verticalidad, esto se logra a través de columnas que actúan de cortinaje para romper con la horizontalidad. Las iglesias solían tener una planta basilical o de cruz griega (influencia tanto visogoda como musulmana) y raramente tenían fachada, mientras, los muros eran muy gruesos y encontrábamos una rica decoración con temas visigodos y vegetal. Cabe destacar el uso de bóvedas de crucería de tipo califal y agallonada en los edificios.

Ejemplos Más Representativos

Dentro del arte mozárabe podemos destacar edificios como San Cebrián de Mazote, la mayor iglesia mozárabe que se conserva a día de hoy. Posee una planta basilical de tres naves separadas por arquerías de herradura. Asimismo, las naves se cubren con techumbre plana de madera mientras que el resto de los espacios utilizan el sistema abovedado para cubrirse con bóvedas de arista y agallonadas.

Se debe destacar también la iglesia de San Miguel de Escalada, que se construyó sobre los restos de una iglesia visigoda anterior a finales del siglo IX. Es de planta basilical con tres naves cubiertas con techumbre de madera y un transepto que se abre a una cabecera de tres ábsides de planta de herradura. Cabe destacar su pórtico techado y con doce arcos de herradura que posteriormente influenció ampliamente el románico de Castilla.

La Pintura Románica

Características Generales

La pintura románica estuvo muy supeditada a la arquitectura, de manera la pintura románica se manifestó de dos maneras, la pintura mural al fresco, que decoraba los muros, las bóvedas y los ábsides; y la pintura al temple sobre tabla, que decoraba los frontales de altar.

En ambos tipos predominaba la temática religiosa, siendo muy común el uso de iconografía simbólica. Se basaron principalmente en las historias del Antiguo y del Nuevo Testamento, que proporcionaron múltiples motivos de inspiración. Volviendo a la temática, era común la representación del Cristo en Majestad, mostrando a Cristo entronizado bendiciendo con una mano, y de Marietas Maire, representando a la Virgen María con el Niño Jesús.

En cuanto a las características, es posible encontrar características generales similares comunes a la de la escultura románica, como la adaptación de las figuras al espacio físico; el horror vacui; la rigidez y hieratismo; la ausencia de perspectiva y tendencia a crear fondos monocromáticos en vez de paisajes; además de la jerarquía y la tendencia a la geometrización. Sin embargo, la pintura resalta por su cuenta en la variedad cromática de tonalidades, algo que en la escultura románica se ha perdido con el tiempo; y la definición de las formas mediante zonas de color uniforme y delimitación de los contornos de trazos oscuros.

Ejemplos Más Representativos

A lo largo de los siglos XI y XII es posible diferenciar en la pintura mural dos líneas pictóricas distintas: El estilo franco románico se localiza en el oeste de Francia y en Castilla, donde llega por las rutas de peregrinación. Esta corriente muestras un naturalismo escénico más evidente, en el que destacan por el detalle, la expresividad, el movimiento y la espontaneidad, así como una predilección por los fondos claros. Entre las obras más importantes de este estilo encontramos los frescos de la abadía de Saint-Savin-sur-Gartempe, en los cuales se representan temas como el Juicio Final; y los frescos del Panteón de los Reyes de San Isidoro de León, en el cual las pinturas al temple que decoran los tramos de las bóvedas representan ciclos anuales de la liturgia, y de los cuales podemos destacar las pinturas de la Anunciación y del Pantocrátor.