La Guerra del Pacífico
El gobierno del general de Tokio decidió hacer un ataque a Pearl Harbor el 7 de diciembre sin previa declaración de hostilidades. La mundialización de la guerra era un hecho al abrirse un nuevo espacio bélico. Roosevelt declaró la guerra a Japón, Alemania e Italia. Se iniciaba la guerra del Pacífico que tendría como principales protagonistas a Norteamérica y Japón.
El avance de Japón fue imparable hasta mediados de 1942, conquistó las colonias asiáticas de Inglaterra, Holanda y Francia y llegó a Filipinas. La derrota japonesa en Guadalcanal fue el punto de inflexión de la contienda en el Pacífico y anunció el declive de Japón.
Derrota Nazi
El potencial económico, bélico y humano de Gran Bretaña, Estados Unidos y la URSS se mostraba con claridad. Las ofensivas de los aliados obligaron a los alemanes a replegarse y a adoptar una estrategia defensiva. Se generalizaron los bombardeos masivos sobre ciudades alemanas, adquirió relieve la resistencia antifascista en los territorios ocupados. Mussolini fue encarcelado cuando se inició la campaña de Italia con el desembarco aliado en Sicilia y la preparación del ataque sobre el sur de la península. La formación del nuevo gobierno quería el armisticio con los aliados. 1945 significó el hundimiento final de Alemania y Hitler se suicidó el 30 de abril.
Derrota Japonesa
Tras la conquista de Guadalcanal, la acción de los norteamericanos se desarrolló en dos direcciones:
- Se dirigía desde Australia hacia Filipinas con la ocupación de Nueva Guinea y las Islas Salomón.
- Partía de Hawái y apuntaba hacia Japón por el este, con la conquista de las Islas Gilbert.
Ambas estrategias pretendían seguir ascendiendo hasta Japón, pero el avance era muy lento y Japón tenía una durísima resistencia. La recuperación americana no llegó hasta finales de julio de 1944 después de durísimos combates, y la de las Filipinas vino precedida de la sangrienta batalla de Leyte en que aparecieron los kamikazes suicidas japoneses. En noviembre de 1944 se iniciaron los bombardeos sobre Tokio y otras ciudades japonesas que se prolongaron hasta el verano de 1945. El nuevo presidente, al no ver que Japón no se rendía, lanzó la bomba atómica sobre Hiroshima y Nagasaki. El 2 de septiembre se producía la capitulación japonesa. La guerra había terminado.
Población Civil en la Guerra
No solo se convirtió en un objetivo bélico central, sino que hubo que organizarse en función de las necesidades de la guerra. El concepto tradicional de retaguardia desapareció a causa de los bombardeos que buscaban el terror en las ciudades, desmoralizar a la población y acabar con su capacidad de resistencia. La guerra tuvo una indisociable dimensión económica y social, ya que estaba bien planificada y requirió la intervención del estado en la vida económica para poner la producción, la ciencia y la técnica al servicio de las necesidades bélicas. Se desarrolló una tecnología de la muerte, implicó un gran aumento de la mano de obra en los países beligerantes. En algunos países significó la movilización masiva de la mujer y su incorporación al trabajo, mientras que Alemania recurrió a la explotación de los trabajadores extranjeros. La escasez de alimentos y bienes obligó a los países a organizar la penuria cotidiana.
Finalidad de Conquista Nazi
Tenían como finalidad la organización de los territorios europeos en beneficio de Alemania. En función de sus necesidades, impusieron formas de trabajo cuya máxima expresión fueron los campos de concentración y la incorporación forzosa de la población ocupada a tareas productivas. En consecuencia, los desplazamientos masivos, el hambre y una mortalidad extraordinaria se extendieron. Los alemanes encontraron activos colaboradores en los países ocupados.
El Holocausto Judío
Merece una atención especial tanto por sus dimensiones como porque derivó de una concepción ideológica y racial de la sociedad y no de una actividad de resistencia al nuevo orden. Los judíos fueron trasladados a campos de concentración, los jefes nazis reunidos en la conferencia de Wannsee aprobaron la solución final, es decir, su exterminio masivo. Fue entonces cuando los campos se convirtieron plenamente en espacios de la muerte para unos prisioneros esclavizados y sometidos a todo tipo de torturas.
El General de Gaulle
En el caso de Francia, donde la acción del exterior impulsada por él, se añadió la de los maquis en el interior y tuvo una importante intervención en la organización del desembarco en Normandía y la liberación de París.
Consecuencias
Demográficas
La guerra dejó tras de sí un rastro de devastación y horror como ningún otro conflicto del siglo XX. Más de 50 millones de seres humanos murieron a lo largo de las batallas, de los cuales la mitad correspondió a la URSS, le seguirían Alemania y Polonia, siendo Polonia quien experimentó las mayores pérdidas humanas no militares (el 95% del total). De ello se deduce el profundo impacto de la mortalidad entre la población civil, que representó algo más de la mitad de las víctimas totales. Por otra parte, es necesario contrastar un elevado número de víctimas indirectas de la guerra, aún por determinar, que se manifestó después de 1945 a causa de la desnutrición. También hubo muchos desplazamientos de la población, habituales durante el conflicto y continuaron en la posguerra, pero ahora se vincularon a la liberación de prisioneros y de trabajadores forzosos.
Económicas
La devastación se extendió también al ámbito material, y fue especialmente importante en la Europa oriental. En Europa occidental, las ciudades y las vías de comunicación fueron los elementos más afectados. En contrapartida, los países que habían quedado al margen de la contienda, como Canadá, Australia, Suecia o Estados Unidos, vieron incrementada su riqueza, en especial Estados Unidos. También la URSS, a pesar de las destrucciones, se transformaría en una gran potencia mundial. La reconstrucción de Europa parecía una empresa casi imposible si se atiende además a la situación de quiebra financiera de los estados y el desamparo en que había quedado la población civil.
El Juicio de Nuremberg
Permitió sentar en el banquillo a 21 dirigentes nazis ante un tribunal formado por magistrados de los cuatro grandes estados: Estados Unidos, URSS, Gran Bretaña y Francia. 19 de ellos no admitieron ninguna responsabilidad ni mostraron arrepentimiento alguno por su actividad nazi. Se dictaron 12 penas de muerte. Este proceso permitió hacer un público balance de las atrocidades del nazismo.
Conferencias de Paz
Yalta
Marcó el momento de mayor colaboración entre los aliados. Decidieron la desnazificación y participación de Alemania e incorporaron a Francia en el reparto. Polonia fue el otro centro de atención, así como las nuevas fronteras de la URSS, la creación de una comisión de reparaciones para evaluar los pagos de Alemania a sus víctimas y la organización de elecciones democráticas en los países liberados. Se concretó la propuesta para crear la ONU.
Conferencia de Potsdam
Berlín se dividió en 4 zonas con un gobierno interaliado y fue la última conferencia que hicieron los 3 grandes: Roosevelt, Stalin y Churchill. Se consolidaron las fronteras de Polonia. Los resultados fueron escasos y el enfrentamiento permanente de Stalin y Truman se saldó en acusaciones de pretender la hegemonía mundial.
Conferencia de París
Cuando se elaboraron los tratados de paz con Italia, Rumanía, Bulgaria, Hungría y Finlandia, firmados en 1947. Hasta 1955 no se firmó el de Austria y en el mismo año se firmaron, sin la URSS, la paz con Japón. Alemania nunca firmó un tratado de paz.
La ONU
Se planteó entre los aliados ya en 1941. Fue en la conferencia de San Francisco donde se aprobó la Carta de la Organización de las Naciones Unidas, a la que se unieron 46 estados fundacionales. Pretendía el mantenimiento de la paz y la seguridad internacional, la cooperación económica y social entre las naciones. Todos los estados miembros están representados y tienen voto en la Asamblea General, el Consejo de Seguridad es el órgano ejecutivo básico. Inicialmente estaba formado por 11 miembros. El Consejo recoge las recomendaciones de la Asamblea y puede transformarlas en decisiones aprobadas por la mayoría y de obligado cumplimiento para los estados miembros. Una Secretaría General en Nueva York se encarga de la administración permanente de la institución y lleva a cabo la coordinación de toda la ONU. Otros organismos con competencias definidas son el Consejo Económico y Social, que coordina un conjunto de comisiones encargadas de problemáticas específicas, y el Tribunal de Justicia Internacional, con sede en La Haya.