LA RESTAURACIÓN
1. INTRODUCCIÓN
La Restauración es un período monárquico comprendido entre dos sistemas republicanos, empezando por el fin del Sexenio Democrático y acabando por la victoria republicano-socialista. La Restauración borbónica fue un régimen formalmente parlamentario que se caracterizó por el funcionamiento caciquil y la manipulación de los resultados electorales.
2. LOS ORÍGENES: RESTAURACIÓN DE LA MONARQUÍA BORBÓNICA
Se debe a:
- El fracaso de los diferentes regímenes del Sexenio Democrático y la situación de guerra civil que vuelve a vivir el país.
- La preparación de esta Restauración se debe a Antonio Cánovas del Castillo, político líder del partido Alfonsino, y el General Martínez Campos, quien proclama en Sagunto a Alfonso XII rey de España.
Fundamentos del sistema canovista:
- El sistema político de Cánovas se inspiraba en el modelo británico de una monarquía constitucionalista respetada por todas las fuerzas políticas, que actúa como árbitro.
- Dos grandes partidos que se turnan pacíficamente en el gobierno.
- Era imprescindible que el ejército abandonase el protagonismo de la vida política.
3. LA CONSTITUCIÓN DE 1876
Sus principios son:
- La soberanía es compartida entre las Cortes y el rey.
- Las Cortes tienen dos cámaras: Congreso y Senado.
- El Estado se define como católico.
- Se reconocen los derechos individuales básicos.
- Garantiza la separación de poderes.
- El mayor protagonismo lo tiene la Corona.
4. EL TURNO PACÍFICO EN EL GOBIERNO
Los dos partidos dinásticos no surgen de forma espontánea, se trataba de crear dos fuerzas políticas y una alternación en el gobierno. El primero en formarse fue el partido Conservador de Cánovas, después el partido Liberal de Sagasta. De 1875 en adelante, la búsqueda de la estabilidad intentando superar el exclusivismo moderado de la época isabelina y la sustitución del pronunciamiento militar por la alternancia de partidos, como acceso al poder.
4.1 EL PARTIDO CONSERVADOR
Su líder fue Cánovas, hasta su asesinato en 1897 a manos de Angiolillo. Reunía a los antiguos moderados, unionistas, algunos progresistas y un sector carlista. Su ideología es liberal conservadora y en sus bases sociales están los grandes propietarios agrarios, la jerarquía eclesiástica y la alta burguesía industrial y financiera.
4.2 EL PARTIDO LIBERAL
Su líder fue Sagasta. Reunía a progresistas, demócratas, políticos descontentos con Cánovas y algunos republicanos. No renuncia al sufragio universal masculino. Sus bases sociales están entre las clases medias, funcionarios, profesionales. Partido de orden que acepta la dinastía borbónica.
4.3 LA ALTERNANCIA DE ESTOS DOS PARTIDOS DINÁSTICOS
El Poder Ejecutivo no era el resultado de la voluntad ciudadana sino de una decisión previa extraparlamentaria en la que participaban tanto la Corona como los líderes políticos. El partido gobernante permanecía en el poder mientras sus fuerzas internas estuviesen unidas, en el momento que aparecían disputas internas, se convertía en un partido en crisis y el rey/reina encargaba el gobierno al otro partido. El funcionamiento del turnismo se basaba en dos condiciones pactadas:
- La Corona actuaba de árbitro y decidía cuándo sustituir un partido por otro.
- La necesidad del falseamiento de las elecciones para poder crear mayorías parlamentarias.
5. EL FALSEAMIENTO DEL SISTEMA ELECTORAL
Las elecciones son un fraude ya que solían ser manipuladas por los caciques. Dicho fraude se organiza con tres instituciones básicas:
- Justicia: Debido a la dependencia política de los jueces y su influencia en los procesos electorales derivada de la suspensión de Ayuntamientos, manipulación de censo, etc.
- Ministro de la Gobernación: Era el encargado de controlar el proceso electoral. Nombra gobernadores provinciales afines al nuevo partido en el gobierno y se encarga de realizar el encasillado.
- Caciques locales: Son individuos, con poder económico e influencias, que controlan una circunscripción electoral. Actúan a nivel local y comarcal, como mucho provincial. Las trampas se hacían bajo 3 métodos: encasillado, circunscripción electoral y pucherazo.
6. LA OPOSICIÓN AL SISTEMA
- Los carlistas: Se sitúan a la derecha de los partidos dinásticos. La derrota de 1876 no supone su desaparición. Cuenta con apoyos en Navarra y País Vasco.
- Los republicanos: Se situaban a la izquierda del partido liberal y no aceptaban la monarquía como forma de estado. Muchos intelectuales fueron republicanos, como los partidos de el Radical de Alejandro Lerroux y el Partido Reformista de Melquiades Alvarez.
- El movimiento obrero: Dividido entre anarquistas y socialistas. Los anarquistas se oponían a la participación política y se dividían en diferentes grupos y tendencias: los anarco-sindicalistas y terroristas. A cada acto terrorista, el gobierno responde con una fuerte represión contra todo el anarquismo. Los núcleos marxistas socialistas están organizados desde 1879 en el Partido Socialista Obrero Español liderado por Pablo Iglesias.
- La Confederación Nacional del Trabajo (CNT): Fue fundada en 1910. Tuvo su apoyo entre los textiles de Barcelona y los jornaleros del campo andaluces. Finalmente, existieron desde comienzos de siglo sindicatos agrarios promovidos por los Círculos Católicos.
- Nacionalismos y regionalismos: Son políticas contrarias al uniformismo y centralismos típicos del liberalismo español. El nacionalismo catalán, representado por la Lliga Regionalista de Prat de la Riba, era un grupo político de centro-derecha y católico que defendía los intereses de la burguesía textil catalana para compartir el poder central con la burguesía terrateniente y financiera de Madrid. En el caso del País Vasco existía cierto grado de autonomía económica. El desarrollo vasco produjo una fuerte inmigración y profundas transformaciones de la sociedad rural tradicional. De esta forma, el nacionalismo vasco de Sabino Arana con el P.N.V. trató de defender la tradición, el catolicismo, la lengua, etc.
7. CONCLUSIÓN
La Restauración borbónica se implanta en España con el objetivo de lograr por fin un período pacífico. La Constitución de 1876, la Monarquía y los partidos dinásticos eran la clave del nuevo sistema. Con el tiempo, los dos partidos hegemónicos se fueron descomponiendo y no fueron capaces de dar entrada a las nuevas fuerzas emergentes, como el nacionalismo. La incapacidad del Régimen para renovarse y modernizarse y nuevas crisis acabaron propiciando la solución militar.