Evolución del Sistema Político Español Tras la Transición: Del Bipartidismo a la Consolidación Democrática

Después de las dos primeras elecciones democráticas, ganadas por la UCD de Adolfo Suárez en 1977 y 1979, el sistema político español consolidó un sistema bipartidista, formado por el PSOE y el PP, con una particularidad: la fuerte presencia de partidos nacionalistas en Cataluña (CiU, Convergencia i Unió) y el País Vasco (PNV, Partido Nacionalista Vasco).

El Ascenso del PSOE y el Gobierno de Felipe González (1982-1996)

Las siguientes elecciones se celebraron en octubre de 1982, y fueron ganadas por el PSOE de Felipe González, que obtuvo por primera vez en la democracia española una mayoría absoluta, con 202 diputados (récord todavía no superado). Como primer partido de la oposición apareció Alianza Popular, dirigido por Manuel Fraga Iribarne, con 107 diputados. El resto de partidos se hundieron, como la UCD, con 11 diputados, o el Partido Comunista, con solo 4 diputados.

El gobierno de González comenzó a legislar sin recurrir a ningún pacto. La política interior de este gobierno estuvo dirigida principalmente a combatir el paro (el objetivo no fue conseguido). La medida más audaz del gobierno fue la expropiación de RUMASA, en el año 83, que generó mucha controversia. También se estableció la jornada laboral de 40 horas, y se realizó una fortísima reconversión industrial (empresas estatales obsoletas fueron cerradas, lo que generó numerosas huelgas).

En el ámbito educativo el PSOE aprueba una normativa muy avanzada, pero con un desarrollo mediocre: la LOGSE (Ley Orgánica General del Sistema Educativo), cuya particularidad más significativa fue hacer la enseñanza obligatoria hasta los 16 años. Se aprueba el derecho al aborto para tres supuestos (violación, peligro para la salud de la madre y malformaciones del feto). Esta normativa venía a completar la posibilidad de divorciarse (concedida durante el gobierno de UCD). Ambas medidas provocaron mucho rechazo entre los colectivos más conservadores de la sociedad.

Todas estas medidas se tomaron en un contexto en el que ETA asesinaba continuamente a miembros de la Guardia Civil, políticos, periodistas…

En política exterior se concreta la adhesión a la CEE el 1 de enero de 1986, y la incorporación definitiva a la OTAN, después de un referéndum popular que se celebró ese mismo año.

Las Mayorías Absolutas del PSOE (1986-1993)

Las siguientes elecciones se celebraron en 1986, 1989 y 1993, en las cuales el resultado fue siempre el mismo: el PSOE gana las elecciones y AP es líder de la oposición (en las elecciones de 1993 pasa a llamarse PP, Partido Popular). En estas tres elecciones el PSOE consiguió la mayoría absoluta, salvo en las del 1993, que fue por mayoría simple. El líder del PSOE seguía siendo Felipe González.

En esta etapa el PSOE fue perdiendo votos por diversos escándalos políticos, de manera que en 1996 se convocaron nuevas elecciones generales, ante el deterioro del gobierno, en las que por primera vez, después de la Transición, un partido de derechas obtiene la mayoría.

El Gobierno del Partido Popular (1996-2004)

El PP gana las elecciones del 1996 con José María Aznar a la cabeza, pero con mayoría simple. Para poder gobernar, el PP se alió con los partidos nacionalistas (CIU, PNV y Coalición Canaria).

Aznar realizó durante estos 4 años una política muy centrista, que permitió a España entrar en la nueva moneda, el euro, desde el primer momento. 4 años después, y gracias a esa buena política económica, en las elecciones del año 2000, el PP vuelve a ganar frente al PSOE, que bajó muchísimos escaños. El PP consiguió esta vez la mayoría absoluta.

Esta etapa fue muy distinta a la anterior. Se formó una alianza con EE.UU., apoyando militarmente la guerra contra Irak, a pesar de la oposición de la inmensa mayoría de los españoles.

Una de las medidas más significativas de este periodo fue la supresión del servicio militar obligatorio (2001) y la creación de un ejército profesional.

El Regreso del PSOE con José Luis Rodríguez Zapatero (2004-2011)

En el 2004, días después de los atentados del 11 de marzo, el PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero recupera el poder perdido hace 8 años, quedando el PP de Mariano Rajoy en la oposición. Zapatero apostó por una política distinta a la de Aznar, tanto en política exterior como en política interior. En política exterior, la medida más sobresaliente fue la retirada inmediata de las tropas españolas de la guerra de Irak. En política interior, la medida más avanzada fue la aprobación del matrimonio homosexual, normativa que provocó, al igual que cuando se aprobaron el derecho al divorcio o al aborto, numerosas protestas de la Iglesia y de los sectores más conservadores de la sociedad.

En el 2008, los resultados de las nuevas elecciones generales son muy similares a los de 2004: el PSOE gana sin mayoría absoluta, y el PP es el primer partido de la oposición. Esta legislatura estuvo plagada de casos de corrupción política, y sobre todo por la crisis económica más grave de los últimos años, y que afectó fuertemente a España, con el incremento del número de parados.

Con este panorama, el PSOE decide adelantar las elecciones a noviembre del 2011. El resultado difiere de las dos elecciones anteriores. El PP obtiene mayoría absoluta, quedando el PSOE en la oposición, con Rubalcaba. Llegado a estas alturas, la democracia española ha pasado por un amplio abanico de posibilidades políticas: el UCD, partido de centro; el PSOE, de izquierdas; y el PP, de derechas.

Conclusión

La democracia española ha demostrado su solidez y capacidad de adaptación a lo largo de las décadas. Desde el bipartidismo inicial hasta la aparición de nuevas fuerzas políticas, el sistema ha evolucionado, consolidándose como un referente en el panorama internacional.