Constituciones y Desamortización en España del Siglo XIX

La Constitución de 1845

Contexto histórico:

La Constitución de 1845 fue promulgada durante la Década Moderada (1844-54), un periodo de inestabilidad política caracterizado por el enfrentamiento entre los partidos liberales moderado y progresista.

Características:

  • Texto conservador que excluía alternativas en el poder.
  • Beneficiaba al partido moderado y a la oligarquía.
  • Suprimía el principio de soberanía nacional y establecía la soberanía compartida.
  • Declaraba la confesionalidad y unidad religiosa.
  • Mantenía el bicameralismo, con un Congreso elegido por sufragio censitario y un Senado nombrado por la Corona.

La Constitución de 1837

Contexto histórico:

La Constitución de 1837 fue aprobada tras la experiencia de los años precedentes, que habían demostrado la necesidad de orden y una administración moderna.

Características:

  • Texto breve que dejaba al margen cuestiones reguladas posteriormente por leyes orgánicas.
  • Proclamaba principios básicos del progresismo, pero también recogía elementos moderados.
  • Concedía poderes a la Corona.
  • Establecía un sistema parlamentario similar al francés o belga.

La Desamortización Eclesiástica

Contexto histórico:

La desamortización eclesiástica fue una medida impulsada por el gobierno progresista de Mendizábal en 1836.

Objetivos:

  • Reducir la deuda nacional vendiendo bienes de propiedad eclesiástica.
  • Expropiar bienes vinculados y exponerlos a la venta.
  • Sanear la hacienda pública.

Consecuencias:

  • Consolidación del régimen liberal.
  • Concentración de la propiedad en manos de unos pocos.
  • Escaso desarrollo de la producción agraria y la industria.
  • Dimisión de Mendizábal y entrega del gobierno a los progresistas.