La Poesía Española de 1939 a 1975: Generaciones y Tendencias

LA POESÍA DE 1939 A 1975. CLAUDIO RODRÍGUEZ

Contexto histórico y literario

El conflictivo período de la Guerra Civil española (1936-1939) y la dictadura franquista influyeron profundamente en la literatura española. La postguerra estuvo marcada por la miseria, la violencia y la censura, lo que dificultó la libre expresión de los escritores. Muchos se vieron obligados al exilio, mientras que otros se vieron afectados por la división entre dos Españas.

La Generación del 36

Esta generación, marcada por la guerra, reflejó sus secuelas sociales y políticas en su poesía. Se rehumanizó para expresar sentimientos personales y colectivos, abandonando la idea del arte puro vanguardista.

Poesía arraigada

Propia de los poetas del régimen franquista, exaltaba el amor, la fe católica, el paisaje y la patria desde una visión jerárquica. Destacan Luis Rosales y su obra”La casa encendid”.

Poesía desarraigada y social

Expresaba el rechazo a la dictadura a través de la angustia existencial y la denuncia de la injusticia. Publicaron en revistas como”Españ” y destacan Blas de Otero y Gabriel Celaya.

Poesía del exilio

Los poetas exiliados escribieron inicialmente sobre la guerra y la nostalgia, pero con el tiempo se adaptaron a su nueva realidad. Destaca León Felipe con su obra”Español del éxodo y del llant”.

Otras tendencias

* **Grupo Cántico:** Poesía sensual y refinada con influencias de Cernuda. * **Postismo:** Actitud artística subversiva y provocadora con imágenes sorprendentes. Destacan C. Edmundo de Ory y Gloria Fuertes.

La Generación del 50

o la generación de los Novísimos

LA GENERACIÓN DEL 36 Se trata de una generación escindida y marcada por la guerra que refleja sus secuelas sociales y políticas. La poesía se rehumaniza para expresar sentimientos humanos personales y colectivos y renuncia a la idea del arte puro de origen vanguardista. Se abren dos líneas: 

POESÍA ARRAIGADA Es la poesía de los poetas del régimen franquista, que publicaron en revistas como Escorial y que hablaban del amor, la fe católica, el paisaje o la patria desde la visión jerárquica de la dictadura. Muestran una imagen serena y armónica del mundo con un estilo sobrio y una métrica clásica. En torno a esta revista se sitúan los poetas falangistas como: Luis Rosales: amigo de Lorca, que se distancia luego del régimen en favor de una poesía personal sobre el sentido vital, llena de ritmo y metáforas. Antes de la guerra publica Abril, desde la visión cristiana de un mundo pleno pese al sufrimiento. En la posguerra destaca La casa encendida,

POESÍA DESARRAIGADA Y SOCIAL Es la poesía de los autores que sufrieron la censura de la dictadura y que manifestaron su rechazo a través de la angustia existencial ante una realidad concebida como un caos, marcada por el paso del tiempo y la muerte. Su tono es dramático, como un grito desgarrado. Publicaron sus poemas en revistas como España, fundada por los leoneses Eugenio de Nora y Victoriano Crémer. Esta poesía se torna más social y testimonial, siguiendo los pasos de Machado, Neruda, Miguel Hernández o el maestro, Dámaso Alonso, quien tras la guerra publica Hijos de la ira, poemario desarraigado y existencial que reflexiona sobre la condición humana y es un grito contra la injusticia, la miseria y el odio de la sociedad. Los poetas consideran a la poesía como arma de transformación social y dan testimonio de la realidad: injusticia, falta de libertad y deseo de paz, con un tono pesimista y prosaico, para dar voz al pueblo, a los que no pueden expresarse. De los autores más comprometidos en oposición a la dictadura destacan: Blas de Otero: su obra abarca tres etapas: 1- existencial: escribe Ángel fieramente humano, poesía desarraigada y dramática sobre un ser humano desvalido y abandonado por Dios que busca la eternidad. 2- social: destaca Pido la paz y la palabra, en la que muestra el compromiso y la solidaridad con sociedad española pidiendo justicia, paz y libertad. 3- experimental: poemas más personales, herméticos y de métrica libre. Gabriel Celaya: es el poeta más combativo y político en sus poemas sociales y fusiona lo culto con lo popular con gran originalidad y musicalidad. Pasa también por tres etapas: existencial, social y experimental. Destaca su obra Cantos íberos con su famoso poema La poesía es un arma cargada de futuro. 

POESÍA DEL EXILIO Los poetas exiliados escriben, al principio, sobre la guerra, la nostalgia de la patria perdida, el deseo de regresar, la crítica al franquismo, pero, con el tiempo, se adaptan a su nueva realidad y circunstancias. Destaca: León Felipe que combatió en la guerra y se exilió en México. Su tema clave es España, el dolor y la indignación por la guerra y el franquismo. España ha salido derrotada como Quijote. Sus versos cuentan con la influencia del poeta estadounidense, W. Whitman. Destaca su obra: Español del éxodo y del llanto. 

OTRAS TENDENCIAS Grupo Cántico: grupo poético minoritario nacido en Córdoba que publica en la revista del mismo nombre, de poesía sensual y refinada, con un tono nostálgico y vanguardista bajo el influjo de Cernuda. Uno de sus autores es P. García Baena. Postismo: grupo también minoritario, en el que destaca C. Edmundo de Ory, que adopta una actitud artística subversiva y provocadora siguiendo la estela del surrealismo y la experimentación sin límites con imágenes sorprendentes. Ligada a este movimiento estuvo también Gloria Fuertes, poeta autodidacta, cuya obra se centra en el ser humano, la ternura y la musicalidad. Escribió poesía tanto para niños como para adultos. LA 

GENERACIÓN DE LOS 50 La llamada Generación del 50 la forman una serie de intelectuales de izquierdas formados en universidades extranjeras y con influencias de la poesía francesa e inglesa. Son autores jóvenes, universitarios, de familias acomodadas y algo rebeldes. Se conectan alrededor de dos ciudades: Barcelona, con Goytisolo, Carlos Barral y Gil de Biedma y Madrid, con Valente y Claudio Rodríguez, entre otros. Los autores abandonan el tono épico de la poesía social en favor de un enfoque humanista desde la experiencia personal como reflexión sobre la vida, lo moral y la realidad. Esta poesía mantiene su compromiso ético colectivo, el inconformismo y la dignidad pero desde una perspectiva subjetiva. El lenguaje aúna conciencia y emoción, con un uso coloquial y cordial. Dentro de esta Generación del 50 ocupa un puesto destacado el zamorano CLAUDIO RODRÍGUEZ, cuya obra, también muy breve, es de una gran hondura poética. Su vida estuvo marcada por el drama de la muerte temprana del padre y el asesinato de su hermana. Aún así, completó los estudios de Filología y pasó temporadas como lector de español en universidades inglesas. Su obra tiene una fuerte influencia de autores como los clásicos del siglo de Oro, Antonio Machado, Jorge Guillén o los poetas simbolistas franceses. Muy joven, en 1953, gana el entonces prestigioso premio Adonais de poesía con un libro pleno de metáforas, reflexivo y muy apegado al campo castellano donde creció.