La Narrativa Medieval en España: Del Mester de Juglaría al Mester de Clerecía

Narrativa oral. El Mester de Juglaría

Los juglares son actores profesionales que recorren pueblos recitando o cantando poemas y viven de lo que los espectadores les dan al acabar el espectáculo. La mayoría narran hazañas de héroes locales.

Poesía épica y cantares de gesta

Extensas narraciones en verso que relatan sucesos históricos y legendarios en torno a un héroe que representa los valores de un pueblo. Tono heroico ya que exaltan las hazañas de un guerrero.

Cantar de Mio Cid

El documento es un típico manuscrito de juglar de pequeño tamaño y de apariencia modesta y está firmado por Per Abbat. El autor es desconocido, por tanto es anónima, como ocurre en toda la épica medieval.

El argumento se divide en:

  • Cantar del destierro: el héroe es desterrado injustamente por su rey y debe recuperar su honor. Tras ganar muchas batallas, va ganando prestigio y riquezas. A cada victoria, el Cid envía mensajeros al rey con regalos y le reitera su fidelidad.
  • Cantar de las bodas: el Cid conquista Valencia y consigue el perdón real. El rey permite que su mujer e hijos se reúnan con él y pide al Cid que case a sus hijas con los infantes de Carrión. El protagonista recela de las bodas, pero accede porque no puede negar nada a su señor.
  • Cantar de la afrenta de Corpes: comienza con unas anécdotas que revelan la cobardía de los infantes. Como los vasallos del Cid se burlan de ellos, deciden vengarse. Marchan con sus mujeres a Carrión y las desnudan, azotan y abandonan. El Cid pide justicia al rey, que convoca las cortes en Toledo. Vencen los representantes del Cid y los infantes de Navarra y Aragón piden casarse con las hijas del héroe, que así culmina su ascenso social.

El tema es la recuperación del honor en dos vertientes: el honor social como vasallo, el Cid pasa del destierro a ser un héroe. El honor personal como padre injuriado.

El protagonista reúne varias virtudes: como caballero, es el modelo de perfecto vasallo y como persona, es un hombre familiar que se preocupa por el bienestar de los suyos. Confía en restablecer la justicia siguiendo las normas establecidas en la época. Representa el modelo de caballero que difunde la épica en la Edad Media.

La historicidad es notable. Es verosímil pero no quiere decir que sea totalmente histórico. La poesía épica parte de una biografía y la convierte en mito, mezclando lo histórico con leyendas que ayudan a que el pasado tenga un tono ejemplar.

El estilo presenta versos de distinta medida que riman en asonante. Rasgos propios del estilo juglaresco: epítetos que van configurando en el oyente las características de los personajes a los que se alude. Cambio del punto de vista narrativo del estilo indirecto al diálogo. Valoraciones que hace el juglar sobre personajes o situaciones. Expresiones juglarescas que reclaman la atención de los oyentes. Lenguaje arcaizante y más antiguo que el usado en la época para dar al poema un valor histórico y un tono aristocratizante.

La narrativa culta. El Mester de Clerecía

Narraciones didácticas en una nueva forma métrica (cuaderna vía) que recogen temas de la tradición culta y usan recursos juglarescos. La inició Gonzalo de Berceo.

Rasgos

  • Son narraciones escritas en romance por autores cultos llamados clérigos.
  • Tienen objetivo didáctico y moral ya que proponen modelos de conducta moral.
  • La estrofa usada es la cuaderna vía, 4 versos de 14 sílabas con una fuerte cesura en mitad del verso y rima consonante.
  • Se recurre a expresiones juglarescas para mantener la atención de los espectadores.
  • Combinan temas de la tradición culta y la popular.
  • Predominan temas religiosos y morales.

Gonzalo de Berceo

Primer autor castellano conocido. Inició el mester de clerecía con narraciones de tema religioso escritas en una forma métrica culta (cuaderna vía). Se expresa en un lenguaje relativamente sencillo que incluye recursos expresivos juglarescos. Su obra más conocida es Milagros de Nuestra Señora: breves relatos que repiten un mismo esquema: personas devotas de la Virgen que se encuentran en un problema y se salvan por un milagro suyo. El estilo en general es sencillo aunque tiene muchos cultismos.

El Libro de Buen Amor del Arcipreste de Hita

Escrito por Juan Ruiz, los temas y el vitalismo que encontramos en él reflejan una sensibilidad muy alejada del didactismo. Era sacerdote, un tío divertido y vital que cantaba los placeres del mundo y tenía una sincera religiosidad, gran conocedor de la literatura culta y popular de su época.

El Libro de Buen Amor

Tema y estructura

Obra escrita en verso con predominio de la cuaderna vía, ausencia de didactismo. Narra varios episodios amorosos en los que el autor intenta conseguir el amor de alguna mujer y para ello recurre a intermediarias o alcahuetas. Junto a estos, se encuentran mezclados cuentos o ejemplos, composiciones líricas, digresiones morales y composiciones burlescas.

Originalidad

Lo más innovador es la mezcla de elementos aparentemente contradictorios: religiosidad y vitalismo profano; tono serio junto al aire divertido y burlesco de algunas parodias. Esto hace que sea difícil de interpretar. Aparece por primera vez una actitud irónica y vitalista en una obra culta.

Estilo

Lenguaje rico y muy variado. Se usa registro culto y coloquial, léxico muy amplio y de enorme plasticidad, con expresiones pintorescas, afectivas y populares.

El Conde Lucanor de Don Juan Manuel

Conjunto de cuentos enlazados por dos personajes. Primer escritor que manifiesta su voluntad de crear un estilo literario personal que aspira a la precisión.

Estructura

Mismo esquema: el conde plantea a su sirviente algún problema. Éste responde que sobre el mismo tema conoce un ejemplo o cuento y se lo explica. Se dice muy brevemente que el conde puso en práctica el consejo y le fue muy bien. El autor resume la idea didáctica en una moraleja.

Temas

Reflejan las preocupaciones de los aristócratas de la época.