Sociedad ilustrada

En la década de los 20 alcanza su madurez una generación formada para homenajear y reivindicar la figura de Góngora en el tercer centenario de su muerte. Todos sus miembros estaban unidos por la amistad, su gran formación intelectual, a parte de sus talantes liberales y progresistas alimentados por los convulsos años que les tocó vivir y que culminarían con la proclamación de la Segunda República. La Guerra Civil y la defensa a la República les costaron la muerte o el exilio, truncándose así la mejor generación poética del siglo.*En el ámbito de la poesía, la Generación del 27 no rompíó con el pasado sino que realizaron una integración entre elementos de la poesía moderna y contemporánea siguiendo la poesía pura de Juan Ramón Jiménez o la de la experimentación con Gómez de la Serna, usando el verso libre en muchas de sus composiciones. El gusto por la metáfora será un nexo de uníón para todos ellos. También en cuanto a la temática podemos encontrar gran diversidad.*Todos los autores representarán esta gran heterogeneidad de estilos y temas escribiendo poesía intelectual como Pedro Salinas, gran poeta del amor, (La voz a ti debida) , Jorge Guillén, quien más se acerca a la poesía pura, (Cántico, clamor y homenaje) y Vicente Aleixandre , con gran influencia surrealista, (Espadas como labios) a la par que continuaron con la poesía tradicional , dada su admiración a los clásicos españoles como Garcilaso, Jorge Manrique, San Juan de la Cruz y el anteriormente mencionado Luis de Góngora, en especial, Federico García Lorca, quien ambienta sus obras en Andalucía con personajes siempre en conflicto, (Romancero Gitano) y Rafael

Alberti, de corte neopopular, (Marinero en tierra), entusiastas de la lírica popular y de cancionero. Bécquer y Rubén Darío influyeron también en Luis Cernuda, de gran influencia ROMántica, (Donde habite el olvido). También emplearon formas métricas clásicas como sonetos, romances, décimas, etc. Y el empleo de poesía popular que marcó las obras de Federico García Lorca, Rafael Alberti y Gerardo Diego (Versos humanos). Salinas, apasionante poeta amoroso, Guillén, que se acerca a la poesía pura, y Alexandre, que tiende al Surrealismo, desarrollarán una poesía de corte más culto. La alianza de estas dos vertientes – tradicional y renovadora – logra en la generación un admirable equilibrio que los definirá.*La poesía del 27 pasó por tres etapas correspondientes a distintas orientaciones poéticas. 

Poesía pura

Tenía el objetivo de desencadenar emociones intelectuales como artefacto de precisión rechazando temas humanos siguiendo el magisterio de Juan Ramón y Góngora. El resultado será una de forma cuidada y con el amor y la muerte como temas. 

Surrealismo y rehumanización

Tenía el objetivo de criticar el mundo exterior interésándose de nuevo por los conflictos humanos. Esta etapa estará caracterizada por la influencia del Surrealismo. 

Guerra Civil y exilio

Periodo de gran afectación a la Generación donde Lorca o Miguel Hernández (El rayo que no cesa) morirán y el resto se exiliará manteniéndose solo en España Gerardo Diego, Dámaso Alonso (El viento y el verso) y Vicente Aleixandre y quienes tendrán un papel decisivo en la posterior poesía de postguerra. Esta poesía se diversificará según los autores y sus circunstancias


Nos situamos a finales del Siglo XIX y principios del Siglo XX (hasta 1936). Dentro del teatro se observa el condicionamiento social en las obras, ya que el público era principalmente burgués y el espectáculo se adaptaba a lo que ellos pedían.1 EN El teatro a principios del Siglo XX: destacamos la comedia benaventina, que tras el fracaso de El nido ajeno, en la que hace una crítica a las costumbres de la época, Jacinto Benavente opta por hacer obras en las cuales plantea problemas poco conflictivos en sus obras, adaptándose a los gustos del público. Su obra incluye comedia burguesas y dramas rurales y sus obras principales son La malquerida y Los intereses creados. 2.- Paralelamente, nos encontramos con la comedia costumbrista, marcada por los sainetes,, composiciones de tema humorístico y popular. Encontramos a Carlos Arniches con El Santo de la Isidra y los hermanos Quintero con Malvaloca., que describe los tópicos de Andalucía. El mismo Arniches va a crear la tragedia grotesca, que describe con cierto aire crítico la sociedad en la que se nos presentas personajes caricaturescos y trágicos a la vez. Destaca La señorita de TréVélez. 3.-También el teatro poético; escrito en verso e influido por el Modernismo y con las mismas carácterísticas ornamentales y de cierto conservadurismo temático, donde destacaron los hermanos Machado, con La Lola se va a los puertos o Eduardo Marquina con En Flandes se ha puesto el sol. 4.-La Generación del 98 llevó a cabo una serie de intentos renovadores, como por ejemplo Unamuno con Fedra, Azorín con Lo invisible y sobre todo Jacinto Grau con El señor de Pigmalión.* Pero será Valle-Inclán quien destaque en este periodo. Se dice de él que supo ver más allá de su tiempo debido a: la originalidad de sus obras, debido a sus temas y estética diferentes, sus planteamientos radicales, la riqueza y expresividad de su lenguaje. Al inicio de su obra teatral Valle-Inclán entra dentro de la corriente modernista decadente. A su vez Valle inicia el ciclo místico con las Comedias Bárbaras, En estas obras aparecen personajes gobernados por instintos tremendamente fuertes, en un clima

de supersticiones donde los episodios truculentos, cambios de escenario y de personajes se suceden sin parar. Este ciclo culmina con la obra Divinas palabras, donde Valle trata los temas de la avaricia y la lujuria. Simultáneamente Valle escribe las farsas, donde utiliza lo grotesco y la caricatura para ridiculizar a los personajes. Alrededor de 1920 Valle desarrolla el esperpento, un género propio basado en la deformación de personajes y valores, con el que denuncia diversos aspectos de la sociedad. Los personajes de este género son grotescos, semejantes a marionetas. Usa frecuentemente los contrastes (lo cómico contrapuesto a lo trágico). Una gran riqueza del lenguaje, que se aprecia en los distintos registros Las obras esperpénticas son la trilogía Martes de Carnaval y Luces de Bohemia, considerada su obra maestra. Esta caracterizada por el gran número de personajes, por sus escenas grotescas y por la crítica que se realiza a la España del momento. 5.-En cuanto al teatro de la Generación del 27 se produce un acercamiento del teatro al pueblo y se crearon compañías teatrales como “La Barraca” que pretendieron dar una educación teatral al público. Los autores más importantes son Alejandro Casona con su obra La dama de Alba donde se mezcla realidad y fantasía y Max Aub, que tiene una valiosa producción teatral, como San Juan. El autor más destacado es Federico García Lorca, este tiene un teatro poético donde suele predominar como tema dominante el enfrentamiento entre el individuo y la autoridad, en sus obras predominan las protagonistas femeninas. El teatro de Lorca puede clasificarse en diferentes estilos, como las farsas que tratan sobre matrimonios de interés, el teatro lírico, el teatro surrealista y el más importante de todos los tipos, los dramas rurales; dentro de estos destaca la trilogía rural: Bodas de Sangre, Yerma y La casa de Bernarda Alba, las tres presentan rasgos comunes como la ambientación en el campo andaluz, el desenlace trágico o la mujer como protagonista.


Nos encontramos ante un periodo claramente marcado por los acontecimientos económicos, políticos y sociales derivados de la Guerra Civil Española, de la dictadura de Franco y del inicio del periodo democrático. En esta década se produce un aislamiento internacional y una división nacional que se traduce a sus vez en una división de la cultura en dos; una poesía arraigada de aquellos poetas afines al franquismo que evitan en sus poemas cualquier crítica o visitón negativa en la que destacan Leopoldo Panero y Luis Rosales, y una poesía desarraigada de aquellos que marcharon al exilio y claramente influida por el existencialismo filosófico, abogando por una poesía más directa, menos retórica y más comprometida con el ser humano. Destacamos así a autores como Miguel Hernández, con obras como El rayo que no cesa, Viento del pueblo (de estilo popular) y su libro póstumo Cancionero y romancero de ausencias (sobre la cárcel y la angustia por el destino de su familia).Otros autores de gran importancia, los cuales sobresalen por su ruptura temática y formal y una gran presencia del existencialismo, son Vicente Aleixandre con Sombra del paraíso, en la que el autor manifiesta su dolor ante el alejamiento del humano de la naturaleza y Dámaso Alonso con Hijos de la ira, donde el autor vuelca todo el dolor de aquella época. Década de los cincuenta Durante los años cincuenta se inició una cierta apertura al exterior y un desarrollo económico que mejoró las condiciones de vida que se vio reflejado en el auge de la poesía social, la cual pretende mostrar la verdadera realidad del ser humano y del país denunciando las injusticias y usándola como un instrumento para transformar el mundo. Se pasa así del yo al nosotros. Como tema principal destaca la preocupación por España y el recuerdo y la superación de la Guerra Civil, dirigíéndose así a la “inmensa mayoría” con un lenguaje directo y coloquial. Destacamos a poetas como Blas de Otero, con Pido la paz y la palabra, José Hierro que escribe Cuanto sé de mí y Celaya con su obra Cantos iberos. Década de los 60 La más dura etapa de la posguerra consiguió

trazar profundas amistades entre los considerados “los niños de la guerra” destacando entre ellos a Claudio Rodríguez, con Salmos al viento, Ángel González , con Poemas Póstumos, Gil de Biedma, con Diecinueve figuras de mi historia civil. Los poetas sociales fueron una gran influencia para los libros de estos autores y se comenzó a ver a Machado como un modelo político y estético. Durante estos años la poesía pretendíó mostrar a la sociedad un punto de vista más personal para dar a conocer la realidad de la sociedad. Los temas se inclinaron hacia la experiencia personal y los aspectos cotidianos del día a día al mismo tiempo que desaparece la exaltación del lenguaje intentando sumir a los lectores en una versión de la poesía más intima y acogedora. Vuelve a haber, sin embargo, una preocupación artística del lenguaje poético. Democracia ( 70 -2000) Por último, la década de los 70 en España se vive desde la perspectiva del agotamiento de la dictadura y la preparación de la transición (1975), por lo que hace que sea de gran influencia la literatura extranjera al producirse un mayor aperturismo político y social. En el ámbito literario, destaca la generación de los Novísimos, que supone un gran cambio con respecto a la poesía anterior, cuyos poetas, que se conciben a sí mismos como aristócratas e intelectuales cuyas manifestaciones principales se transmiten por medio de la poesía, entendida como una exhibición cultural y recogida en antologías, influidas temáticamente por los medios de comunicación y la poesía extranjera, así como por los experimentos vanguardistas (escritura automática, collage) y por el Modernismo, en el que sobresale el ritmo del lenguaje y el léxico culto. Sobresaldrían poetas como Gimferrer, Panero, Ana María Moix, José María Álvarez. Se produce una gran diversificación de tendencias y corrientes: culturista, con Antonio Colinas; clasicista, destacando a Antonio Carvajal;; experimental, con Fernando Millán; metapoétca, con Guillermo Carnero; intimista , con Álvaro Savador; épica, con Julio LLamazares etc.