II.I – El Empirismo: fenomenismo y causalidad

* Fenomenismo: doctrina que limita el conocimiento humano al conocimiento de los Fenómenos.

* Causalidad: relación que se establece entre una causa y un efecto.

El Empirismo es una corriente filosófica contrapuesta en numerosos aspectos al Racionalismo. Mientras este último tomaba como modelo de referencia las Matemáticas, el Empirismo toma la experiencia.
Para los empiristas el origen Del conocimiento es la experiencia, admitiendo no solo el valor de la Experiencia externa, sino también el de la interna. Además niegan las ideas Innatas de los racionalistas ya que lógicamente al ser innatas, no podrían ser Experimentadas.

El Origen del conocimiento es entonces la experiencia: la mente es una tabla rasa. La experiencia es la observación directa tanto de los fenómenos externos como De los internos. Experiencia equivale a percepción, por eso Hume llama al Contenido o conjunto de la experiencia: percepciones. Ahora bien, el conocimiento humano es Limitado, por la tanto la experiencia también lo es. Los racionalistas no Ponían límite a la razón, pero los empiristas sí, creían que no se puede Conocer nada más allá de lo propia experiencia. En consecuencia, si el Conocimiento al que creen acceder los racionalistas es indudable, el Conocimiento al que creen acceder los empiristas es probable. Por ello, Hume se Muestra escéptico ante la Metafísica. En cambio, racionalistas y empiristas sí Coinciden en que TODO conocimiento es conocimiento de ideas: no conocemos las Cosas, sino las ideas que tenemos de las cosas. El pensar se reduce a Relacionar ideas y por ello dan gran importancia a comprender los mecanismos Psicológicos que explican la asociación de ideas. Cualquier idea puede ser Explicada mediante la descomposición en ideas más simples. Además, los Empiristas no niegan la razón, pero proponen un concepto de esta dependiente de La experiencia. La razón es la única guía del ser humana y debe tener una Finalidad práctica, al considerar imposible la Metafísica. No es la Todopoderosa razón que defienden los racionalistas, sino una razón autocrítica Que examina sus propios límites y posibilidades.

Como ya Hemos señalado anteriormente, para Hume no hay nada innato y todo nuestro Conocimiento procede de percepciones de la experiencia. Él las clasifica en Función de tres factores:

Para Entender la asociación de ideas, Hume aporta tres leyes:

Cuando La mente relaciona ideas como que uno más es igual a dos, esta relación se Cumple siempre. Pero cuando relacionamos hechos, esta relación es contingente (puede suceder o no). La conexión causa y efecto es una ley de asociación que En su momento fue aceptada acríticamente, pero Hume – que desconfía de todo lo Dogmático – la cuestiona. Para ello  aplica el siguiente principio empirista: toda 

idea que no sepamos distinguir de que impresión es copia debe ser rechazada. Por ejemplo, Hume considera que en una cuestión como que el fuego caliente el Agua añadimos una condición supuestamente necesaria que no es tal. Para él 

lo único que podemos observar es que un hecho va seguido del otro. En conclusión, La idea de una conexión necesaria es fruto de nuestra imaginación, extrapolamos El pasado al futuro. Es una postura nuevamente escéptica. ¿Es posible la Ciencia entonces? Si la conexión necesaria es solamente una costumbre de Nuestro entendimiento y no una ley universal, todo se quedará en creencia. Los Enunciados científicos no pueden considerarse leyes universales.

Desde Esta posición hace una crítica a los conceptos claves de la metafísica Racionalista. La rechaza adoptando un escepticismo moderado que surge gracias a Un análisis de nuestras facultades mentales. Este, dice Hume, nos cura el Dogmatismo de los metafísicos y nos libra de abordar cuestiones inabordables. Una de ellas es la idea de substancia a la que no corresponde ninguna Impresión, por lo tanto no existe tal idea. El concepto clave  de la Metafísica es una ilusión. No solo Rechaza la idea de substancia finita extensa, sino también la de substancia Finita pensante: el yo o la identidad personal. Para que existiese la idea del Yo tendría que estar originada por alguna impresión invariable durante toda la Vida lo que no ocurre.

Lo mismo Sucede con la idea de substancia infinita una idea que tampoco procede de Ninguna impresión. Nuestras impresiones son puntuales y concretas y ninguna da Pie a una idea infinitamente perfecta. Hume reconoce que la creencia en Dios es Natural y necesaria entre los seres humanos, pero no lo podemos comprender, Pues no hay impresiones disponibles.