Bienio progresista resumen

12.3. Isabel II el reinado efectivo (1843-1868)

 Durante el reinado de Isabel II se va a consolidar en España el régimen liberal.
Este reinado se puede dividir en varias etapas:

La década moderada (1844-1854)


Durante estos 10 años gobernó el partido moderado. El partido moderado recogíó los principales puntos de su pensamiento político en la Constitución de 1845.

En esta constitución se establece que la soberanía reside en las cortes y en el rey, además rechazan la milicia nacional y el juicio para los delitos de imprenta, defiende que los alcaldes sean designados por el gobierno eligiéndose solo los concejales, rechazan que los senadores sean elegidos defendiendo que sean nombrados por el rey y que tuvieran un carácter vitalicio. Defiende la confesionalidad del estado, defienden severas leyes de imprenta y leyes electorales con requisitos económicos más elevados.

Con Narváez en la presidencia del gobierno además de aprobar la Constitución de 1845 se aprobaron otras medidas: reformaron la administración fortaleciendo el poder de los ministros y el Consejo de Ministros y reforzaron la centralización de la vida política. Además aprobaron una nueva ley electoral en 1846 reduciendo el cuerpo electoral al elevar el requisito económico necesario para tener derecho al voto, además aprobaron una nueva ley de imprenta de 1846 tratando de controlar la prensa. En los años siguientes los principales problemas fueron la crisis económica que se inició en 1847 y que terminó en torno a 1850 y la crisis política que se produjo en 1848 en el marco del proceso revolucionario que afectó a gran parte de Europa ese año de 1848.

La revolución del 48 aunque fracasó tuvo varias consecuencias:


1º. Provocó una escisión en el partido progresista separándose su corriente izquierdista que luego fundó en 1849 el partido demócrata que defiende el sufragio universal a diferencia del partido progresista que defendía el sufragio censitario.

2º. Influyó en los intelectuales del partido moderado como Jaime Valdés o Donoso Cortés y comenzaron a preocuparse por los problemas sociales sentando las bases de lo que más tarde a principios del s XX será el cristianismo social.

3º. El gobierno va a conseguir el reconocimiento internacional para la monarquía de Isabel
II de algunos estados que hasta entonces no la habían reconocido como el Vaticano, Austria, Piamonte o Rusia.

A principios de 1851 Narváez fue sustituido al frente del gobierno por Bravo Murillo. Éste llevó a cabo una importante labor como tecnócrata, consiguiendo solucionar el grave problema de la deuda pública.

Por último Bravo Murillo intentó reformar la constitución aunque no lo consiguió y terminó abandonando el gobierno. Tras su caída del gobierno se sucedieron varios gabinetes entre ellos el de Sartorius que se caracterizó por sus arbitrariedades y política corrupta por lo que pronto comenzó a organizarse un pronunciamiento militar contra el gobierno.


La revolución de 1854 y el bienio progresista (1854-56)


El pronunciamiento militar contra Sartorius lo dirigíó el general ODonnell. En Vicálvaro se produjo el enfrentamiento entre las tropas del gobierno y los sublevados. (Esta revolución se conoce también con el nombre de la Vicalvarada). Sin embargo, este enfrentamiento no resolvíó el problema, por lo que ODonnell se reuníó con el general Serrano y Cánovas del Castillo en Manzanares. Entonces Cánovas redactó el manifiesto de Manzanares proponiendo a los progresistas que se sumasen a la rebelión. Poco después la revolución tomó un nuevo impulso, comenzaron a estallar motines por diferentes provincias y el resto del ejército se sumó a la sublevación al final en 1854. Sartorius dimitíó.

De 1854 a 1856 el gobierno estuvo presidido por Espartero.

El nuevo gobierno aprobó algunas medidas importantes entre ellas destacan en el plano económico la aprobación en 1855 de una nueva ley de ferrocarriles, la aprobación de una ley de sociedades de crédito para regular el sistema financiero y la creación de bancos, y la aprobación de Madoz de una nueva desamortización que afectó a los bienes del clero secular y de los ayuntamientos.

Por otro lado durante el bienio progresista se elaboró una nueva Constitución. Esta aunque nunca fue aprobada es importante porque refleja la ideología del partido progresista al igual que la constitución de 1845 reflejan la ideología del partido moderado. En ella se recogen la soberanía nacional la milicia nacional, la tolerancia de cultos, los jurados para los delitos de imprenta la elección de senadores y alcaldes y se defienden requisitos económicos más reducidos para poder votar o ser elegido.

El bienio moderado (1856-1858)


En 1856 la reina aceptó la dimisión de Espartero y nombró en su lugar a O´Donnell presidente del gobierno. Lo más destacado del nuevo gobierno fue la aprobación de una reforma constitucional que establecíó los juicios por jurados para los delitos de imprenta y el hecho de que el poder ejecutivo solo nombrase a los alcaldes de los ayuntamientos con más de 40.000 vecinos siendo los demás elegidos. O´Donnell fue sustituido por Narváez. Este derogó la reforma constitucional de O´Donnell aunque

Por otro lado durante el bienio moderado se aprobó en 1857 con Claudio Moyano, la primera ley general de Instrucción Pública y también ese año se inició en España la estadística moderna por la publicación del censo general de la población de 1857.

La Uníón Liberal (1858-1863) y los últimos gobiernos de Isabel II (1863-1868)


En 1858 O´Donnell volvíó a presidir el gobierno al frente de un nuevo partido la Uníón Liberal. Este partido estuvo dirigido por O´Donnell y Posada Herrera.

Este partido ideológicamente basculó entre las posiciones defendidas por el partido progresista y el partido moderado, así por ejemplo aceptó los jurados para los delitos de imprenta pero rechazó la milicia nacional.

La Uníón Liberal desarrolló una política interior de tipo práctico fomentando las obras públicas y tratando de modernizar la economía, pero sobre todo basó su gestión en el desarrollo de una política exterior de prestigio,. La política de prestigio fracasó en su objetivo de exaltar al gobierno y al final desgastó al propio O´Donnell.
Los últimos años del reinado de Isabel II se caracterizaron por la inestabilidad política. Los cambios en el gobierno fueron una consecuencia de la influencia que ejercíó la reina y su camarilla. Al final la reina se vio envuelta en múltiples escándalos y crisis políticas que van a favorecer la caída de la monarquía.. No obstante en la caída de la monarquía también influyeron otros aspectos como la crisis económica , las malas cosechas ,el descontento de los militares y consecuentemente las crisis planteadas por las conspiraciones militares .

La Uníón Liberal (1858-1863) y los últimos gobiernos de Isabel II (1863-1868)


En 1858 O´Donnell volvíó a presidir el gobierno al frente de un nuevo partido la Uníón Liberal. Este partido estuvo dirigido por O´Donnell y Posada Herrera.

Este partido ideológicamente basculó entre las posiciones defendidas por el partido progresista y el partido moderado, así por ejemplo aceptó los jurados para los delitos de imprenta pero rechazó la milicia nacional.

La Uníón Liberal desarrolló una política interior de tipo práctico fomentando las obras públicas y tratando de modernizar la economía, pero sobre todo basó su gestión en el desarrollo de una política exterior de prestigio,. La política de prestigio fracasó en su objetivo de exaltar al gobierno y al final desgastó al propio O´Donnell.
Los últimos años del reinado de Isabel II se caracterizaron por la inestabilidad política. Los cambios en el gobierno fueron una consecuencia de la influencia que ejercíó la reina y su camarilla. Al final la reina se vio envuelta en múltiples escándalos y crisis políticas que van a favorecer la caída de la monarquía.. No obstante en la caída de la monarquía también influyeron otros aspectos como la crisis económica , las malas cosechas ,el descontento de los militares y consecuentemente las crisis planteadas por las conspiraciones militares .


La Uníón Liberal (1858-1863) y los últimos gobiernos de Isabel II (1863-1868)


En 1858 O´Donnell volvíó a presidir el gobierno al frente de un nuevo partido la Uníón Liberal. Este partido estuvo dirigido por O´Donnell y Posada Herrera.

Este partido ideológicamente basculó entre las posiciones defendidas por el partido progresista y el partido moderado, así por ejemplo aceptó los jurados para los delitos de imprenta pero rechazó la milicia nacional.

La Uníón Liberal desarrolló una política interior de tipo práctico fomentando las obras públicas y tratando de modernizar la economía, pero sobre todo basó su gestión en el desarrollo de una política exterior de prestigio,. La política de prestigio fracasó en su objetivo de exaltar al gobierno y al final desgastó al propio O´Donnell.
Los últimos años del reinado de Isabel II se caracterizaron por la inestabilidad política. Los cambios en el gobierno fueron una consecuencia de la influencia que ejercíó la reina y su camarilla. Al final la reina se vio envuelta en múltiples escándalos y crisis políticas que van a favorecer la caída de la monarquía.. No obstante en la caída de la monarquía también influyeron otros aspectos como la crisis económica , las malas cosechas ,el descontento de los militares y consecuentemente las crisis planteadas por las conspiraciones militares .