TEMAS DE LA Poesía DE AM. poesía machadiana universo cerrado de símbolos, de temas recurrentes que dan sentido unitario a su obra.
Machado afirma existen hondas palpitaciones del espíritu que no pueden expresarse en el lenguaje corriente, y el poeta, debe recurrir al lenguaje figurado, a los símbolos, a las imágenes y a las metáforas.
EL TIEMPO
él entiende el tiempo como algo vivo, personal, no como concepto o abstracción. Es la duración limitada, la historia individual de cada ser –de su propio ser-, que se hace, que pasa, pero que permanece en el recuerdo, donde se borran los límites personales. Es muy sensible ante el curso fatal de las horas y los días. Dialoga con el tiempo mediante estos símbolos:
1.El poema
. Para Machado, poesía es arte eminentemente temp: “La poesía es la palabra esencial en el tiempo”. Une dos elementos contradictorios: lo esencial y lo temporal. Poesía es palabra q expresa lo q cosas son (su esencia), a través de mi contacto con ellas, con mi experiencia, con mi tiempo vivido.
2.El agua
agua del río, fuente, lluvia…; símbolos del fluir temporal y, por ello, de la vida interior. Agua puede representar muerte, quieta en taza de la fuente o, a la manera de Manrique, en la inmensidad del mar al que confluyen todas las aguas. Este tema-símbolo es quizá el que con mayor insistencia y también con mayor hondura se reitera a lo largo de su obra.
3.La mañana, la tarde, la noche.
“Me dijo un alba de la primavera”. Mañana personifica sueños o recuerdos de cuando estaba ilusionado. Tarde expresar un sentimiento melancólico con adjs que connotan estado de animo de depresión espiritual (cenicienta, mustia, destartalada…). Noche “¡Oh, dime, noche amiga, amada vieja!” es ser aparte, puede hablar y proporciona el sueño, donde encontrar claves de angustia para conocerse a sí mismo.
4.Elementos del paisaje y el tiempo vivido
. Cuando alma identifica con cosas mundo, los elem conforman paisaje son imprescindibles. Su paso con tiempo, poeta se relaciona con ellos, éstos adquieren sentido nuevo, personal. Transfiguran en espejo q refleja lestados del alma. Ejemplar proceso que “sufre” el olmo. “A un olmo seco” inicia proceso identificación alma con dicho árbol.
5.Los caminos
caminos presentes en la poesía de Machado desde primeras composiciones. Caminar errante sent de pesar sin consuelo, nostalgia de la vida que se va dejando atrás. Caminos ser motivo melancolía o recuerdos del pasado, pero también símbolos de la vida y entonces el camino real difuminarse, borrarse hacia la lejanía, hacia el futuro. No está hecho, se hace a la vez que se anda (“se hace camino al andar”)
6.El reloj
Es un símbolo opuesto a los anteriores, pues es objeto real, que mide mecánicamente el tiempo cronológico, no el tiempo psíquico del hombre, del poeta, que se había expresado con todos los otros símbolos.
LA MUERTE
la muerte se manifiesta como la destrucción, la enfermedad, la guerra o el crimen. actitud ante ella oscila desde angustia personal hasta melancolía e incluso rebeldía (por la muerte de la esposa). Los símbolos relacionados con este gran tema son múltiples: el mar, el ocaso, el otoño, la sombra, la luna… El mar simboliza ciega inmensidad de la muerte, lugar al que confluyen todos los ríos de la vida.. Y en el maestro sevillano se palpa una honda turbación del espíritu: la angustia existencial ante la nada, ante el no ser, que está desde el principio en su obra y se va acentuando con el paso de los años.
Dios
La presencia de Dios ocupa en su pensamiento un lugar significativo. Se trata de un Dios añorado, soñado, deseado más que afirmado en el que no se puede creer aunque se quiera; la figura de Cristo es mucho más cercana a Machado que ese “Dios entre la niebla” porque es de carne mortal que sueña la inmortalidad, el triunfo sobre la muerte; “La saeta”.
EL RECUERDO Y EL SUEÑO
En Machado el sueño es la única forma posible de conocimiento: es una de las vías más directas para penetrar en el mundo interior. Puede soñar despierto, pues en los caminos del sueño es donde se contempla las galerías del alma que para Machado son símbolos de esa parte de sí mismo que ignora. Pero en su poesía, especialmente a partir de Campos de Castilla, el sueño no sólo emana del hombre, sino de las cosas: sueña la naturaleza; y los elementos que la conforman, convertidos en personificaciones, en proyecciones de su yo. Este es un recurso propio de los ROMánticos, de la “pathetic fallacy”. Consiste en atribuir a la naturaleza las actividades de su propio espíritu, como soñar.
EL AMOR
A lo largo de toda la obra se intuye el deseo de Machado de amar y la necesidad de ser amado. Por eso los poemas referidos a las dos pasiones de su vida ocupan un lugar más importante en su producción: el de su esposa Leonor (en Campos de Castilla y Nuevas canciones), cuya muerte provocaría los más doloridos acentos del poeta, y el amor otoñal, pero apasionado, de Guiomar (en el Cancionero apócrifo). De cualquier modo, el amor es para Machado un sentimiento ennoblecedor que dignifica al amante, quien poseído de esa exaltación espiritual comprende mejor la belleza del mundo y rescata las cosas del olvido, del tiempo y de la muerte.
EL TEMA AUTOBIOGRÁFICO
En numerosos poemas evoca Antonio Machado su infancia, su juventud, sus amores, incluso sus experiencias de la vida cotidiana. Pero no sólo aparece la biografía externa, sino especialmente, la espiritual. De este modo, su poesía puede considerarse un diario de su propia alma, el diálogo del hombre, de un hombre con su tiempo.Véase el poema “Retrato” que, al uso de la época, inserta el semblante del autor como introducción a una obra.
EL PAISAJE Y EL TEMA DE ESPAÑA
El paisaje es un tema esencial en la obra machadiana. Puede adoptar un valor doble. Hay unos paisajes que sirven a la reflexión y otros que encauzan la efusión sentimental.Cuando utiliza el paisaje como reflexión lo hace de varias formas: puede enumerar humildes realidades, casi de forma objetiva, como en la primera mitad de “A orillas del Duero” o bien lo convierte en símbolo del pasado histórico de Castilla (segunda mitad del poema citado). Pero también le puede servir para hacer una dura crítica socio-política. Cuando sirve para la efusión sentimental, los elementos del paisaje castellano se transforman en símbolo de realidades íntimas. Machado ha proyectado sus sentimientos sobre aquellas tierras, seleccionado lo que prefiere, qué es lo adusto y acentuando lo que sugiere soledad, fugacidad o muerte. El paisaje es reflejo del mundo interior del poeta, del estado de su alma. Dialoga con el mundo y consigo mismo en intima comunión con el paisaje que describe y canta.