En el siglo XIX se desarrolló un nuevo modelo de imperialismo, diferente al colonialismo europeo de la Edad Moderna. Este imperialismo se sustentó en un nuevo escenario económico: la expansión de la industrialización.
Durante el último tercio del siglo XIX y principios del XX, las grandes potencias industriales europeas, Estados Unidos y Japón, rivalizaron por el dominio del mundo. Simultáneamente a su desarrollo industrial, extendieron su dominio político y territorial sobre la casi totalidad Sigue leyendo →